Diario. | Errorink. |

19.

[04/02/18]

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Cada día veo a Nightmare más ansioso e irritado, como si estuviera esperando algo o desde otra retrospectiva estuviera molesto de que algo no sucediera.

Me había hecho un discurso mental para tener valor, y en la hora de la película trate de llamar su atención, después de varias semanas había hablado con él si no fuera para mandados o que película quería, pero ninguno se preguntaba al otro como estaba, bueno, a mí me ignoraba o solo decía no importa. Y si insistía un golpe me llevaba.

Le pregunté si yo tenía algún problema mental, y me había quedado mirando por unos eternos segundos despegando su atención de los papeles, el ceño fruncido solo indicaba que no había sido buena idea pero seguía expectante de su respuesta.

Se levantó, y me tocó la frente y después el cuello, por un momento creí que el camino entre ambas partes había sido una sutil caricia, no obstante ante su contacto no pude evitar estremecerme, mi cuerpo cada vez tenía más pavor de ser golpeado, a diferencia de los primeros días que te escribí diario, es una diferencia.

No estás delirando. Me dijo. ¿Entonces qué te ha metido esa mierda en la cabeza?

No lo sé… Yo solo quería saberlo… Me sobé el brazo donde estaba vendado, con él tenía que permanecer así hasta que él lo dijera, pero él era un buen observador, y bastó un instante para que tomara de mí muñeca para verlo de forma agresiva.

¿Qué te dije de esto? Te había dicho que no tienes por qué sacarlos a menos que yo diga. Acusó ajustando las vendas, se me había soltado un gemido de dolor. Fue sin querer…susurré.

Nightmare preguntó después si era por ello por qué preguntaba, no quería hablar, por lo que cada vez me zarandeaba con más fuerza  hasta llegar a sangrar por mis heridas que faltaban por cicatrizar, cuando vi la sangre me había puesto a temblar, una sensación que me hizo tener un ataque de pánico.

Pero fue cuando él se detuvo y buscó un poco de agua y un paño para atenderme, el agua y yodo estaban fríos, no podía parar de llorar. Trata de hacerme caso la próxima vez, no es bueno que veas sangre. Terminó por decir y se retiró a comprar.

Me duele el brazo, pero puedo soportarlo, aun así no puedo evitar de pensar lo tranquilo que me sentí cuando me trató con suavidad.

Seguramente lo sucedido con Error fue solo por la falta de cariño que he de estar.