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Llegó el día de la boda, primero te fui a ver a ti, te veías guapo, perfecto.
Sé que fue el día más feliz de tu vida por tus facciones.
¿Lo estás haciendo bien?
Platicamos toda la mañana de tus sentimientos, dijiste que me querías y que si hubiese llegado antes a tu vida, me hubieras hecho la persona más feliz pero lo.hiciste, el sólo hecho de que dijeras esas palabras lograste que mi corazón brincara de alegría y dolor mezclados.
Después de platicar contigo y sin decirte lo que yo siento, me fui a verla. Su vestido esponjado, blanco, escotado de la espalda y sin mangas, una cola extremadamente larga. Amigo, ella era la novia más hermosa que había visto.
Me acerqué y la abracé tan fuerte como pude, a comparación de ti, ella se veía triste, avergonzada, tenía los ojos rojos e hinchados, supuse que de tanto llorar.
—Danonino... —Me abrazó incluso más fuerte. —Y-...
—Tranquila, soy feliz. Tú estás con él y él está contigo. Es verdad que lo amo, pero si ambos son felices yo también lo seré.
Nuevamente esa tarde volvimos a llorar, la estilista le arreglo el maquillaje y nos subimos a la limosina, tenía la tarea.de yo entregartela, ¿no es chistoso? Me hice amigo de la chica que se casará con el hombre que amo, pero es tan buena que incluso si quiero odiarla no podría, antes me odiaria a mi mismo por querer intentarlo.
Cincuenta minutos más tarde llegamos a la Iglesia, todos estaban ahí afuera, pude ver a SungKyu llorando, a Nam consolandolo y a ti sonriendo en la puerta de la Iglesia, el padre te metió y cuando lo hiciste bajamos.
Dos pequeños niños tomaron tu gran cola y te.colocaste bien el velo, tomaste mi brazo y en cuanto la música comenzó a sonar empezamos a caminar, en ese momento mi fin había llegado, lo que un día quise para mi otra lo tendría, hubiera querido ser más egoísta, pero incluso si viajara al pasado y me dieran la oportunidad de cambiar las cosas, no lo haría, porqué esas sonrisas son lo que yo más amo.
Te entregué a JiSoo y la tomaste, la misa comenzó y todos estábamos sonriendo. JiSoo volteaba a verme más seguido, pero siempre le sonreía, le alentaba a que siguiera, ¿si eras tú su felicidad, por qué se lo quitaría?
La parte importante de la misma llegó.
—Si hay alguien que tenga algún impedimento para que está boda no se realice, que hable ahora o calle para siempre. —Mentiría si dijera que no lo pensé, pero al final no lo hice. —Bien. Ahora los declaro, marido y mujer hasta que la muerte los separe... Puedes besar a la novia.
Las campanas y la música sonaron una vez la ceremonia finalizó, ambos empezaron a caminar de la mano cuando de repente escuché el grito de tu ahora esposa.
—Ho Won, ¡NOOOOOO! Por favor Amor, abre tus ojos, no me dejes ahora.
—JiSoo. —Se acercó Nam, sigue vivo pero sus latidos son débiles, hay un donante. Le pensaba decir después de su boda pero ya no hay tiempo.
—Hoya. —Susurré en lágrimas. Abracé a JiSoo y nos fuimos al hospital.
Una vez que llegamos y te prepararan para la operación, sólo pude decirte unas cuantas palabras.

“Las personas buenas, reciben cosas buenas”.

Y ambos te soltamos de las manos, sin saber si te volveríamos a ver.

Coffee Love "YaDong"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora