Star Butterfly: La Princesa de mis pesadillas

~Cap VI: Heekapoo~

Marco caminaba de noche por los oscuros pasillos del exageradamente enorme castillo Butterfly. Su objetivo era claro, reunirse con una chica que le robo su corazón a primera vista.

Jackie Lynn Thomas.

Todo estaba a pedir de boca. Llevaba un traje de cóctel de color negro. Con todo y corbata, zapatillas negras y un ramo de flores rojas que compró en un kiosko afuera del castillo.

Todo iba bien para el chico de rasgos latinos, el único problema.

-Estoy perdido -murmuró con cansancio al ver que no sabia donde estaba.

El lugar era tan grande que no recordaba muy bien por dónde vino. Volteó a ver a todas partes y lo único que vio fue un largo pasillo con un sin fin de puertas.

No sabía que hacer pero solo había una cosa que lo motivaba.

-Llegaré a mi cita con Jackie aunque tenga que abrir todas y cada una de estas puertas -exclamó enérgico.

Dicho eso se puso a abrir cada puerta del pasillo.

-¿Jackie? -Dijo el nombre de la chica al abrir la primera puerta. Pero no estaba allí, esa habitación estaba llena de... -Maíz. -Cerró la puerta con frustración. -Vaya, si que les encanta el maíz en esta dimensión jeje. -Dijo con una sonrisa.

Procedió rápidamente a abrir la siguiente puerta.

-¿Jackie?

-Meeeeeh -lo recibió una especie de cabra humanoide con cuatro cuernos en su cabeza y con un par de alas de murciélago.

-Oh, lo siento -se disculpó por la irrupción. Iba a salir pero se le ocurrió preguntarle a la cabra si sabia donde dormía Jackie. -Disculpe la molestia, pero... ¿Sabe cuál es la habitación de Jackie Lynn Thomas? -Preguntó. -Es una chica de la nobleza y...

-¡Meeeeeh! ¡Meeeeeh! ¡Meeeeeh! -Lo interrumpió la cabra.

Marco entre cerró los ojos con cansancio comprendiendo al instante que la criatura esa no hablaba español.

-Bueno, de todas maneras gracias -se despidió Marco y cerró la puerta.

Procedió a abrir la siguiente puerta.

-¿Hola? -Preguntó y la cerró al instante al ver que esa habitación estaba llena de maíz también.

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Tal vez paso una hora abriendo y cerrando puertas. Encontrando maíz en la mayoría, un sujeto con túnica, cabeza de cristal, un ojo y brazos de serpiente en otra, el mismo hombrecillo azul que le pidió pudin, la cabra nuevamente, guardias dormidos en otra y muchas otras cosas que no comprendía por que estaban allí.

-Muy bien, esta es la ultima y si Jackie no está aquí, me iré a dormir -exclamó molesto.

Además de que ya estaba muy cansado por todo el trabajo que hizo hoy y eso lo tenia de muy mal humor.

-¿Jackie? -Preguntó entrando a la habitación.

Pero no estaba allí.

-Aquí no es la habitación de ella -le dijo una mujer de piel pálida, un poco más bajita que él, cabello rojo muy largo, cuernos amarillos en su cabeza, ojos color naranja, vestido largo de color amarillo, orejas puntiagudas y un par de colmillos sobresalientes de su boca. Además de que tenía un par de pechos enormes y si no estuviera un poco rellenita, a él le hubiera parecido muy atractiva.

-Lo siento -respondió nervioso ante la mirada cansada de ella. Suspiró cansado y procedió a sacar sus tijeras dimensionales de su bolsillo para irse a su habitación.