Capitulo 42.

3.7K 188 18
                                    

La voz de mi doctor inundo mis oídos, no sabia si realmente yo quería luchar por seguir en este mundo. Eran tantos problemas, tantos engaños que al final me daba cuenta que mi matrimonio solo estaba lleno de engaños. Quería traer a mis hijos al mundo y ver a mis dos seres de luz mas crecer. Pero ya no se si valía la pena seguir aquí. No quería ser egoísta y arrebatarles la vida a mis hijos, pero en mi ya no habían fuerzas para seguir luchando.



Narra Christian.


La noche en un hospital era demasiado fría, sola. Mis pensamientos no me ayudaban en nada. Jessica era demasiado para mi, las cosas que le suceden siempre son por culpa mía. Matt y Damián estaban al otro extremo de la sala de espera, mi hijo no se me quería acercar ni de broma. No quería que mis hijos me odiaran , pero al final eso estaba ganándome yo. Tantas horas que habían pasado ya y ninguna noticia tenia, no sabia si mi mujer estaba mejorando o empeorando.




-¡Hijo!- el grito de mis padres me sacaron de aquellos pensamientos oscuros. Vi su mirada de tristeza y como corrían hacia mi.



-Mama.- la abrace fuertemente y me deje caer en sus brazos. Lloraba sin control, pues lo que sucedia era mi maldita culpa.- No la merezco, siempre le hago daño, no puedo ni quiero seguir arriesgándola.- el abrazo de mi madre se hizo mas fuerte y negó con la cabeza. Simplemente ya no podía mas con esta situación. Como hombre no podía seguirle fallando a mi esposa ni hijos.




-No digas eso, hijo. Todo estará bien, sabemos que Jess es demasiado fuerte y saldrá adelante de todo esto. No empieces a tener esos pensamientos.- mi padre miraba la escena, mientras que me retiraba las mejillas.




-Mi hijo me odia, me echa la culpa de todo y se que tiene razón. Soy el único responsable de que mi mujer y mis hijos estén entre la vida y la muerte. No los quiero perder.- mi padre me agarro por el cuello y me miro devastado.





-Todo va a estar bien, deja de pensar esas cosas y hay que centrarnos en orar por tu esposa.-asentí mientras trataba de tranquilizarme. Segundos después desaparecieron para saludar a mi hijo y de igual manera darle su apoyo.




Tenia ganas de golpear cosas de que el que estuviera en esa maldita cama sin reaccionar fuera yo. Mis puños estaban cerrados y seguramente ahora tenia un aspecto terrible. era lo que menos me importaba en estos momentos. Ni siquiera había comido en todo el día y ni hambre tenia, un nudo enorme sentía en la garganta, nada me permitía comer. Después de un rato mis papas se llevaron  a Matt a casa, iban a ver que tal estaba Clara y a traerla un rato si quería. Me deje caer en el piso y coloque mi cabeza en las rodillas. Estaba devastado.




Narra Jessica.

Matrimonio a cambio de Engaños II (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora