Matrimonio a cambio de Engaños II (Borrador)

Capítulo 16. (parte 2)

Ver la sonrisa de tu hijo al ver a todas las personas que el quería tener en su fiesta. Es simplemente algo maravilloso y mágico. Christian me mantenía sujeta por la cintura, Clara le agarraba la mano a el y yo tomaba la mano de Matt.

Todo estaba perfecto para el, mi hijo estaba a nada de ya convertirse en un hombre. Ahora entendía los miedos que tienen las madres al ver a sus hijos crecer. Ese miedo al saber que no volverás a tenerlo entre tus brazos, que cada dia esa pequeña parte de ti, se ira desprendiendo hasta ser solo un hombre.

Fotógrafos que nos pedían posáramos, mis padres y los de Christian siempre han sido muy reconocidos por lo tanto a nosotros también.

-Feliz cumpleaños.-Beatriz, mi prima. Se nos acerco junto a su esposo e hija.

-Hace tanto que no te veía.- la abracé fuerte.

-También yo, cuando te vi este pequeñín que esta aquí aun no nacía.- al decir esto estrecho a Matt entre sus brazos.

-Hombre, que alegría volver a verlos.- la timidez de mi hijo no daba para más.

-Mi hija Anna, ¿La recuerdan?- yo la miré asintiendo, era hermosa y mi hijo no le quitaba la mirada.

-Como no recordarla.- mire con cariño a ambos.- si mi hijo jugaba con ella en las reuniones.- le di un codazo a Matt para que se animará a hablarle.

-Si, aún los recuerdo de tiernos jugando.- Beatriz y yo sonreíamos con los recuerdos.

Gire para ver a Matt, pero ya no estaba ahí. Ambos se habían ido a un lugar privado.

-Mírate como has cambiado, cada ves que te veo luces mas joven.- mi prima me halagaba mientras que nuestros maridos platicaban.

Le sonreí con cariño.-Mejor no digas, porque luces preciosa.-fuimos por una bebida, obviamente la mia sin alcohol.

Nunca perdimos la comunicación, desde que estaba embarazada de Matt nuestros lazos se unieron mas y ahora eramos inseparables. Aunque si era sincera llevábamos tiempo sin vernos, pero nos escribíamos y siempre estábamos pendientes la una de la otra.

-¿Qué tal lo llevas con Christian?- me pregunto mientras veíamos a los invitados pasar.

-Bien, como todo siempre hay problemas pero los hemos solucionado como se debe.- respondí orgullosa.

-Que bueno, eso me alegra.- tomo un poco de su copa y prosiguió.- Aún me acuerdo cuando lo pasabas mal.

Y si, lo que mi prima decía no era mentira. Christian muchas veces no era la persona que yo esperaba, pero gracias al cambio que dio todo fue diferente.

-Me alegra que nuestros hijos estén teniendo comunicación. A lo mejor algo surge entre ellos.- nosotras sonreímos y chocamos las copas felices.

Me preocupaba mucho el bienestar de mis hijos, de que ellos siempre estuvieran bien y nunca les faltará nada. Desde que ambos estaban pequeños, esa chispa se veía venir y esperábamos nada mas a que floreciera.

-Vamos a sentarnos.-mi marido llego a mi lado y me tomo de la cintura para guiarme a nuestra mesa.

Los fotógrafos y periodistas estaban  a la orden del dia, esperando algún falló o algo para inmediato hacerlo saber a la gente. Todos los invitados estaban esperando a que nosotros dijéramos algunas palabras.

Le pegué en el estómago disimuladamente a Christian para que me hiciera caso.- Tenemos que decir unas palabras.- murmuré apenas moviendo los labios.

-Te deseo suerte, mi amor.-me guiño el ojo y nos subimos al pequeño lugar que teníamos para la música.

El encargado de la música me presto un micrófono y me quede de pie enfrente de todo la gente. -Buenas noches, espero que estén pasando un gran rato a lado de nuestra familia- empecé con los nervios al mil, no era buena hablando con mucha gente mirándome.-Les agradezco por estar aquí para festejar a mi hijo, Matt.- mis dos hijos se apresuraron a subir con nosotros.-Este día me siento muy bendecida al tener a mis hijos conmigo, el poder estar aquí para presenciar un cumpleaños más de mi querido Matt. Cada día creces mas y ahora ya dejas de ser niño para convertirte en un joven adulto y maduro. Para tu padre y para mi siempre serás nuestro bebé, mi pequeño tesoro que amo con mi vida y que estoy muy orgullosa de todo lo que has logrado a lo largo de estos años.- mire a mi hijo y el se limpiaba las lágrimas al escucharme decir todo esto, con cada palabra que yo decía se me quebraba la voz. Christian me abrazo de la cintura y yo me recargue en el, como las lágrimas ya querían salir y mi voz cada ves se rompía más él tomo el micrófono por mi y prosiguió el a hablar.