Siempre seras mi protector

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Marinette logra que Edwar y ella recibían a los invitados, le costo bastante pero logro estar con el de anfitriones, mientras sus amigos están en el bar y las chicas repartiendo tragos soportando todas esas miradas morbosas de algunos invitados y también invitadas, pero alerta a la señal para salir de aquí.

- Bien Marinette, es hora de explicaciones.

- Lo se Edwar esperemos al baile.

- ¿Me aras esperar mas? Mi cabeza va reventar.

- Tu cabeza esta trabajando, me dirás que esto no te trae recuerdos, casas lujosas gente importante.

- Niñas mimadas a las que tienes que proteger.

- ¿De que hablas?

- Solías llamarme mi lady.

Solías llamarme mi lady.
Solías llamarme mi lady.
Solías llamarme mi lady.
Mi lady
Mi lady...

Sonaban esas palabras una y otra vez en su cabeza, martillando fuerte aturdiendo sus sentidos, desequilibrando su mundo.

- Edwar!

- Ya le dije que mi nombre no es Edwar, mi nombre es... Adrien.. se.. se.. Señorita Dupaing... - Marinette sonreír a darme cuenta que si afecto eso en su memoria.
Dicho esto la mira finamente y como una ola abrazadora lo golpea fuerte y su memoria lo comienza a tacar con imágenes de su pasado.

- Me siento mareado.

Dice Adrien y comienza a tambalearse.

- Respira Adrien, ven vamos al sillón necesitas tiempo para asimilarlo, Adrian necesito que te recuperes, necesitó, esa mente ingeniosa y rápida digna de ti.

- Esto es difícil Marinette.

- Lo se Adrien, pero los chicos nos necesitan, escuche el plan que tiene esa mujer y no es nada agradable.
Están en un gran peligro.

- Te das cuenta que me pides algo que me sobrepasa.

- Por favor sobreviviste a dos balados y una caída de no se cuantos cientos de metros de un helicóptero lo que aras aquí es pan comido par ti.

Nuevamente imágenes mentales atacan la cabeza de Adrien asta que llega la ultima imagen que tiene de Marinette...

- Necesitó ir al baño, me siento extraño.

Adrien se levanta y se va al baño dejando a Marinette a merced d esos hombres lujuriosos...

- Adrien no tardes por favor, te necesito. - Dice la chica por lo bajo.

•••Flashback•••

- Señora encontramos a estos chicos por los limites de la mansión.

La mujer les da un ojeada y se detiene en Marinette la mira con detenimiento.

- Lleven los al sótano excepto esta, lleven la a mi habitación.

Dice los hombre llevan a los chicos al sótano y a Marinette a la habitación de la mujer.

...

- ¿Como te llamas niña?

- ¡Que te importa!

La mujer la abofetea.

- A mi me hablas con respetó.

- El respeto se gana.

- ¡Oh, ruda la niña! - Dice la mujer con sarcasmo en la voz.

- Mejor digame, que hago aquí y mis amigos en el sótano.

- Pronto daré una fiesta y tu seras la atracción principal, eres muy linda y te puedo aprovechar bien.

- Me estas vendiendo al mejor postor ¿cierto?

- Mira pero aparte de bonita inteligente.
Acabó de notar , eres muy especial para dejarte ir así como así. Te propongo algo.
Dame algo que agrade a mis clientes y yo te dejare ir con su amigos.

- ¿Algo como de que o que?

- Te llevare a recorrer el lugar tal vez así te des una idea de lo que harán.

<<Fin del Flashback>>

- Hola hermosa, tu debes ser la nueva adquisición de Lucrecia .

- Si eres muy bonita, tienes todo lo que ella ofreció.

- Tu piel es tan blanca que me encantaría darle color con unos cuantos azotes.

Comienzan a rodear a la pobre chica que se ve acorralada, cuando de pronto, de entre la multitud surge un hombre decidido que se abre paso directo a Marinette tomándola de la cintura y dándole un beso grande apasionado lleno de deseo y que los que lo rodean se saborean el momento.

- Lo siento  caballeros, pero la dama ya tiene dueño y la quiero para mi solo.

- ¡Adrien !

El la aleja de esa manada de lobos hambrientos y lleva al la pista.

- ¿Ya recordaste?

- Lo suficiente para saber quien soy, quien eres y como saldremos de aquí.
Tu trato apesta sabes.

- ¿Como? Unos minutos de memoria y ya dedugiste el trato.

- Perdí la memoria no la intuición, después de meditarlo y que la loca mujer esa me acorralo en el baño, se que quiere de ambos.

- Me alegra no tener que explicarlo.

- Bien este es el plan...