¡Y TE ME VAS DE AQUÍ, NO QUIERO VOLVER A VERTE! –Grito Mi Madre
-¡Pues Yo Menos! –Dije Yéndome de la cárcel por la cual estuve 18 años
Pues Como Vieron Mi Madre Me Corrió De La Casa, ella es una mujer borracha que nunca le importe, termine la escuela hace un año, hoy iré a ver a mi nueva compañera de departamento, eh estado ahorrando dinero durante toda mi vida, a si que tengo lo suficiente para pagar un departamento compartido.
Mi Nombre es Victoria Balvanera, soy una persona tierna y me gusta llevarme bien con todo el mundo, bueno creo que mi madre es la excepción, pero trato de ser feliz con las personas que realmente me quieren.
Llegue al departamento número 108, estaba la puerta abierta, pedí permiso y pase, de pronto se empieza a escuchar desde una ´habitación
-¡Oh Si, Vamos Ahh Ahhh Oh Ahhh así así ahhh! –gemía una chica
Entre, había una chica rubia teñida arriba de un hombre, dios santo estaban teniendo relaciones, yo los mire impactada, de pronto el chico miro hacia la puerta, hay no, saco bruscamente a la chica de encima de el, se puso su bóxer y se acerco a mi
-¿Quién eres tu? –pregunto el Chico con su voz ronca Desafiante
-Ehh…
-¿se te ofrece algo?-me dijo serio
-eh…perdón creo que me equivoque, es que me dieron este número de depa, se supone que voy a compartir depa con una niña –dije tierna- ¿ella es la niña? –Pregunte apuntando a la chica que se vestía sentada en una cama
-¿una niña? –pregunta serio- ¿ella una niña?
Yo Asentí
-¿tu debes ser Victoria?
-si, pero ¿Quién le dijo mi nombre? –pregunte intrigada
-tu –respondió mirando serio con sus ojos penetrantes
-¿yo? ¿Cómo no entiendo?
-tu te comunicaste conmigo por internet –respondió
-imposible, yo me comunique con una niña
-yo nunca te dije que era una mujer –dice algo enojado
-oh
Creí que era mejor buscar en otro lado, pero quien sabe porque preferí quedarme ahí, La Chica se termino de vestir y se fue, ni si quiera un beso le dio, ósea para ser su novia mínimo un beso de despedida.
-esa es tu habitación –dijo el hombre serio
-que linda, pero le hace falta color –dije entrando
- ¿y a mí qué? –me dijo serio
-bueno –dije tímida- y cómo te llamas? –dije poniendo mi maleta encima de mi cama
-eso no es de tu incumbencia –Respondió
Yo No Dije Nada, el joven me provocaba algo raro, no se, muy serio, lo encuentro extraño, no se ah atrevido a mirarme a los ojos nunca, Al Pasar Las Horas el Se Fue, me dejo sola en el departamento, a si que me puse a ordenar mi habitación, le hacía falta color, comencé por la cama, la hice con unas sabanas rosadas como a mi me gustan, un cubrecamas morado hermosísimo, Luego comencé a poner mis perfumes, maquillajes en un pequeño mueble que contenía un espejo.
Y así se me hizo el día, el Joven serio aun no llegaba, a si que decidí hacerme un café, fue ahí donde sonó la puerta, el estaba entrando, me miro y se fue directo a su habitación que por cierto estaba al lado de la mía, me hice la que no lo vi, es muy extraño, me fui a mirar por el pequeño balcón, las estrellas estaban realmente hermosas aquella noche, de pronto siento a alguien en la cocina y pues obvio era el chico serio, me acerque a el.
-¿tienes hambre? –pregunte inocente
El Me miro y no me dijo nada
-te pregunte algo –dije de nuevo
-no –me respondió serio mientras tomaba un vaso de agua
-¿Por qué no me quieres decir tu nombre? –pregunte mirándolo a los ojos mientras dejaba mi taza de café en el lava platos
-¿tu sabes por qué estás aquí? –pregunta ronco
-porque mi padre me consiguió este depa
-ya veo
Y Diciendo esas pequeñas palabras nuevamente se fue a su habitación, no lo niego es muy guapo pero, me da miedo, es un extraño y no habla mucho.
Olvidándome de el me fui a dar un baño, luego me percate que el no estuviera y me fui corriendo a mi habitación.
Luego de unos segundos me fui a dormir, estaba realmente cansada.
Al Otro Día me levante en pijamas al baño, luego fui a la cocina, abrí la nevera y solo habían tres huevos, creo que es lo único que se alimenta este hombre, además que la nevera estaba absolutamente sucia, me dio asco a si que saque con cuidado los huevos, los lave y los hice, sin sal sin aceite ya que no había nada de eso, solo café y huevos. Comencé a comerlos a cucharadas, ya que ni pan había
-¡hey esos son mis huevos y ese es mi café! –me dijo el chico
-am perdón, es que tengo hambre y tu solo tienes eso, pero te hice un huevo a ti y una taza de café
El me miro y se comió su huevo, Bueno En realidad se lo trago, ya que se fue nuevamente, Creo que me tendré que acostumbrar a que me deje sola todo el pinche día.
*****
Con Mis Ahorros Ahora estoy En El Supermercado, pues tengo que comer algo más que no sea huevo y tomar café, compre pastas, arroz, carne, cereales, leche etc. Al pasar las horas comencé a cocinar, El Chico aun no llegaba, es muy guapo comencé a pensar, pero muy serio además que nunca me habla. Después de unos cuantos minutos llego
-hola –susurre
Me hizo un gesto con su cara
-¿Qué haces? –me susurro con su voz ronca
-cocino pasta ¿vas a querer? –pregunte tierna
-no
-pero hice para los dos
El Abrió La Nevera
-¿Qué hiciste con mi nevera?-pregunta serio, con voz ronca
-la limpie –dice dando una pequeña sonrisa-estaba bien sucia, ah y compre cosas para que comamos ambos
-no era necesario – me responde
-te compre huevos, veo que te gustan
El Solo Me Miro y se dirigió a su habitación, me sentí mal, pienso que eh hecho las cosas mal, pero bueno, en fin, me serví mi plato de pasta y comí sentada donde corresponde, De pronto recuerdos comienzan a inundar mi mente, mi madre me echo de mi casa, mi padre nunca está en la casa, nunca tuve hermanos, mi madre es una completa borracha, ahora estoy acá con un hombre que ni el nombre se, de inmediato de se me llenaron los ojos de lagrimas y no pude aguantar me eche en el llanto, el me escucho, fue a ver lo que sucedía
-¿Qué te pasa nena?-pregunta serio
Yo Me Asuste, me pare de mi asiento y me seque mis lagrimas, pero nuevamente volvieron a brotar, El Se Acerco a mi y de verdad que no me aguante y lo abrase, necesito un abrazo, o al menos abrazar a alguien por que el no correspondió a mi abrazo…..