Su Lengua La Movía De Arriba Asia Abajo, Lo Sentía Muy Rico, Demasiado
-Oh Lalo Por Favor –Le Suplicaba
-¿Por Favor Que? –Me Pregunta Agitado
-Hazme Tuya –Dije Agitada Mientras me retorcía
Vi Una Sonrisa Triunfadora en Eduardo, Se Puso Su Condón, A Los Minutos Sentí Como Su Polla Estaba entrando en mi, Oh Esto es exquisito, El Pones Sus Manos Al Costado De La Cama Para Darse Impulso, comienza a moverse rápidamente
-Ah Ah Ah! Oh Si Hay Hay –Gemía Sin Parar
Salió De Mi, Me Dio Vuelta, Me Estire, este abrió mis Glúteos y comenzó a penetrarme por atrás, Se Sentía Igual de rico, solo cambiamos de posición. Después De Algunos Minutos, Puse Mi Pie sobre su hombro mientras el me cogía, oh oh pero que rico!
-ahh ahhh, así ahh –gemía yo sin parar
Después de Tres Horas de Darme Como Quiso, Quede Peor con el dolor que sentía en mi feminidad, Ya era la hora del almuerzo, estaba a punto de terminar de cocinar, Cuando Veo a Eduardo Irse
-Oye –Lo Llamo
Él Para
-¿No Te Quedaras a Comer Conmigo?
-No –Me Dice Para Luego Irse
Yo Me Quede Ahí Sin Decir Nada, Había Hecho Comida Para Los Dos, Pero Bueno, En Fin.
Pasaron Los Días, Habían Días en los cuales Eduardo Estaba Completamente caliente, otros ni la palabra me dirigía, aquel día había una gran tormenta, no paraba de llover, Eduardo y Yo Habíamos ido de compras, llegamos al departamento todos mojados.
-Hay que sacarse la ropa en el baño, nos vamos a enfermar –dijo Eduardo Serio
-dejaremos todo mojado, mejor acá no más-dije inocente
Ya que más daba, Eduardo Me Conocía entera y yo a él, Comenzamos a Quitarnos Nuestras Prendas, el fue por unas toallas, me cubrí con una y me senté entre las almohadas del sofá, Eduardo Tapado Con Una Toalla, fue a hacer café. Al terminar de hacerlos se acerco a mi, dejo las tazas de café en la mesa de centro, y con su mano comenzó a secar las gotitas de agua que caían por mi cabello mojado , yo solo lo miraba, de pronto tuve la necesidad de besarlo, pero no fue necesario hacerlo el comenzó a secar las gotitas de agua con su boca, al llegar a mis labios comenzó a besarlos delicadamente, Yo Correspondía a cada caricia, ya entendí era de esos días en los cuales Eduardo Estaba caliente. Me Recostó en el sofá, me saco la toalla, me beso entera, yo también le saque su toalla, le jalaba delicadamente el cabello.
-Eduardo –dije agitada
-¿Qué sucede nena? –me pregunta
-vamos a tu cuarto –le dije
-¿Por qué aquí no? –me pregunta con su voz ronca y serio
-porque hace frio –dije tierna
Eduardo Se Paró, me cargo entre sus brazos y me llevo a su cama, ahí siguió besándome, sus besos se volvieron apasionados, lo di vuelta, me subí arriba de el, tome su miembro entre mis manos, comencé a masturbarlo, en estos días había aprendido arto de sexo, no era perfecta en eso pero me manejaba en algunas cosas.
-oh oh así chiquita –me decía Eduardo Jadeando
Yo Seguí moviéndolo de arriba hacia abajo, cada vez más rápido, de pronto supe que se iba a correr pronto, metí su miembro a mi boca, sentí como el liquido de este hombre pasaba por mi lengua, preferí tragarlo de una sola vez, era salado, si salado, El miembro de Eduardo Estaba Erecto, me lo metió en mi entrada para que yo lo cabalgara, me movía de arriba hacia abajo cuantas veces quise -ah ah ah oh si ahh hay –gemía sin parar-Luego cambiamos de posición, yo me senté de espalda sobre el pene de Eduardo, ya que el me lo exigió, no se cómo pero comenzó a meterlo y a sacarlo, dios santo que sensación tan Exquisita. Al Llegar a Unos Cuantos Orgasmos por separado, nos acostamos a un extremo de cada lado de la cama, estamos cubierto por las sabanas y cubre cama, realmente hace mucho frio. Eduardo se sienta en La Cama, Se Pone Su Bóxer, Pretende irse, pero yo tome de su mano, el me queda mirando
-no te vayas –le dije
-¿Por qué no? –me dice serio
-es que hace mucho frio, no quiero dormir sola, ven –le dije con una sonrisa
-no me gusta dormir después de follar nena –me dice
-haz un excepción, solo por hoy que hace frio –le suplique
-¡NO TE DIJE! –Me Dice Gritando Fuertemente, un grito que me ah dejado helada, Eduardo tomo su pantalón y se fue a dormir al sofá, una lagrima salió de mis ojos, tome mi ropa, me fui a mi habitación.
Al Otro Día, Me Puse Una Playera de lalo, seguramente en alguna noche se le quedo en mi habitación, Lo Fui a Buscar, Estaba En El Sofá Durmiendo
Decidí Hacer Desayuno Para Ambos, a pesar de todo preferí olvidar el suceso de ayer, De Pronto Escucho Hablar a Eduardo, Me Acerco a El, Creo que está teniendo una pesadilla, decía algo como “-No Me Dejes, No, No”
-Shh Tranquilo –Le Susurre mientras el dormía, parecía un niño- todo va a estar bien –le dije dándole un pequeño beso en la mejilla Fue Así Que Eduardo volvió a un sueño lindo, se le notaba en la cara, volví a la cocina, sonó el timbre, fui a ver quién era
-¿Qué carajos hacen aquí? –Pregunte
-Hola –Me Dice Alexis
-Hola-Me Dice La Señora que según se es mi madre
-contesten ¿Qué hacen aquí?
-vine por mi dinero –dice La Señora
-Ya Te Dije Que No Te Daré Nada
-¿En Que Te Has Convertido Victoria? Mira Como Estas Casi Desnuda, Con Una Playera de Hombre –Mirando a Eduardo- Entregándote a un hombre que a penas conoces –Dice La Señora Clara, Mi Madre
-Mire Señora, eso a usted no tiene porque importarle, a si que váyase con Alexis Por Donde Entro, ya no me busque, porque no le daré dinero
-Mira Mal Nacida, si tu no me tienes el dinero para mañana me encargare de hacerte la vida imposible –dijo Clara Mientras se Iba
-Victoria –Susurro Alexis
-¿Qué Quieres?
-Quiero Pedirte Disculpas por lo de la otra vez y quería decirte que te amo, perdóname, vuelve conmigo mi amor
De Pronto Siento Como Alguien Toma De Mi Cintura
-Ella no va a volver contigo imbécil, a si que deja de molestarla, porque ella es mía –Dice Eduardo Teniéndome de La Cintura. Yo Lo Quedo Mirando Impactada….
