SOLO TU Y SOLO YO

La Realidad

Poché

Ya empezaban a bajar la temperatura y eso significa que estaba tarde a pesar de que estábamos en agua caliente, empezaba a sentir frío en mi cara y realmente tenía hambre.

- salimos, ya tengo un poco de hambre- le dije a calle que estaba jugando con el agua como niña chiquita.

- si claro vamos creo que ya nos arrugamos- me mostró sus dedos y parecían una uvas pasas y solo pude reírme.
Salí del agua pero ví que Calle se quedó observandome de pies a cabeza sin salir aún, me hizo sentir un poco incómoda pero al mismo tiempo sentí que me intimidava, así que cogí rápido la bata y me la puse.

- mira aca te dejo la bata para cuando salgas, te espero en la cocina voy a hacer la comida -
le dije y camine rápido hasta la cabaña, lo que había pasado era muy extraño. Ya había llegado a la cocina y me dispuse a preparar la comida.

- estas haciendo huevos fritos - me dijo riendo

- si exactamente eso Calle y ya sabes después te toca cocinar a ti-ella sabía por qué lo decía

- te ayudo en algo -

- no te preocupes tengo todo bajo control- y si bueno solo sabía hacer pocas cosas pero que estaba haciendo sabía que me quedaba bien, mientras yo terminaba ella miraba su celular.

- ya puedes venir esta servido- le dije, ella se sentó y miro su comida eran dos quesadillas con jamon de pavo unos huevos revueltos con maíz y de tomar Coca-Cola pero no se que tan bien convinaban huevos con Coca-Cola así que no la serví.

- se ve muy rico, parece el desayuno- dijo riendo un poco.

- si es lo que se hacer a cualquier hora de él día espero te guste - le dije y nos pusimos a comer cuando terminamos, Calle me ayudó a arreglar la cocina y salimos a la sala hasta cuándo golpearon en la puerta.

- pase!- dije y seguido entro José

- Señorita ya está listo lo otro que me pidió cuando quiera puede ir- Calle me miro

- hay algo más?- pregunto

- si, pero primero vamos y nos cambiamos- la tome de la mano y la lleve hasta mi cuarto allí tenis ropa y le iba a dar a calle para que de pudiera algo más cómodo.

- mira ponte este saco de sudadera y este pantalón- ella salió a su cuarto y se cambió yo hice lo mismo y salí de la habitación al mismo tiempo que ella le sonreí y la volví a tomar de la mano y salí corriendo de la cabaña.

- vez este camino - ella asintió y yo seguí - pues ve por ahí a ver qué encuentras- terminé de decirle y ella empezó a caminar hasta que llegamos era un kiosko sus paredes eran cristal para poder ver lo que sucedía afuera y como estábamos en una montaña  se podía ver el pueblo en la parte de abajo todas sus luces parecía un pesebre, había algunos dulces en unos tazones en la mesa de centro que había y una hamaca el piso era todo en tapete y habían cojines al rededor de todo el kiosko mire a Calle y estaba llorando

- que pasó no te gustó -

- todo lo contrario me encanta -

- entonces porque lloras-

- jamás nadie había hecho algo por mi así, algo especial para ayudarme- me miro y yo solo la abrace.

- no he hecho nada Calle solo te traje a mi lugar favorito- le dije mientras ella seguía en mi abrazo  duramos unos cuantos minutos así y ella se alejo.

- es mucho más de lo que piensas y te lo agradezco -

- para eso estamos las amigas.- nos sentamos en la hamaca tomamos una cobija yo saqué mi parlante lo coloque en el suelo y puse música, duramos un tiempo en silenció.