¿Celos?

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Me encuentro en el piso de arriba, esperando a Arianne en el pasillo mientras escucho la conversación entre ella y Susan.

-¿Dices que se quedara a dormir?  ¡Ni pienses que dormirá en tu cuarto! 

-Tía, necesita quedarse aquí. -escucho cómo baja la voz y se me es más difícil escuchar. -No tiene a nadie y es nuevo en Denver. Necesita apoyo y me ha caído bien.

-Es simpático, ya. -afirma, Susan. -Pero este chico parece un niño perdido y, aunque parezca genial, Arianne ¡No lo conoces! 

Dejo de escuchar porque me siento un intruso y comienzo a caminar hacia la última habitación del pasillo. De lejos, se ve la puerta abierta y el balcón de esta. La tentación de subir al tejado me invade pero es muy temprano. Prefiero sólo explorar el balcón a que piensen que soy un ladrón. 

Mientras me dirijo a la habitación, no puedo dejar de impresionarme con los lujos de esta casa. Y eso que no es una mansión. Bueno, al menos sé que Arianne no es una mentirosa sobre su tía. Es una gran diseñadora. Y la arquitectura de la casa se ve fenomenal. 

Los muros aquí arriba son oscuros, y los pisos blancos, brillantes. La luz se encuentra apagada y hay más oscuridad aquí que en la planta baja. En el umbral de la puerta ya, le echo un vistazo a la habitación. Las paredes son pardo oscuro y hay una gran alfombra púrpura a los pies de la cama de sábanas beige. 

Quién diría, ¡Combinan hasta las sábanas! 

-¿Cómo llegaste aquí? -pregunta una voz a mis espaldas. No es Arianne. No es Susan. Es una voz fuerte, ronca. Totalmente masculina.

Me doy la vuelta y me cruzo con los ojos oscuros de un hombre vestido con una sudadera blanca y unos shorts verdes. ¿Será el tío de Arianne, el arquitecto?

Antes de poder pronunciar palabra, Arianne aparece y le deposita ambas manos sobre sus hombros.

-¡Chris! -le da un beso en la mejilla y el hombre le regala una sonrisa. Qué amorosos son todos aquí. -El chico que ves allí se llama Ben y se quedará aquí un tiempo. Susan te lo explicará todo, ¿Sí? 

El rostro del hombre no parece confundido. De hecho, parece de acuerdo y sin tener algún problema.

-¡Es un gusto, muchacho! -se acerca a mí con una sonrisa amistosa, para darme una palmada en la espalda. -Dime, ¿Qué haces aquí?

Antes de poder pronunciar palabra alguna, Arianne me interrumpe.

-Le he mandado a mi habitación. Pasa que tenía que hablar con Susan.

-Oh, entiendo. -dice. -Bueno, iré a darme una ducha. Estuve toda la mañana dormido. 

-¡Qué tío dormilón! -ríe ella y él se marcha de la habitación.

Chris se  va y Arianne corre a pasos rápidos para cerrar la puerta. 

El móvil de Arianne comienza a sonar con el tono River de Ed Sheeran y ella salta de alegría al ver que es Ryan.

-Dame un momento. -me dice y atiende. No logro escuchar lo que él dice pero, ella sonríe como una loca enamorada y se sienta en su cama. -Amor, ha pasado una noche y ya te extraño. ¿Cuándo vendrás a visitarme? -parece que el contesta algo que la desanima y su sonrisa se desvanece en sus palabras. -Oh, bueno. Sí, claro. Hasta luego.

Me acerco al mirador cerrado por dos grandes ventanales cubiertos por una gran cortina púrpura y le escucho murmurar: 

-Dice que tiene una fiesta. 

-Eso es genial, ¿No?

-¡NO, no lo es! -gritó, irritada y tira un almohadón lejos que impacta contra mi cabeza. -Ay, lo siento. -sé que oculta una sonrisa, así que para no hacerla sentir mal, me río un poco. Arianne comienza a reírse un poco más fuerte y así terminamos, sonriendo. 

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⏰ Last updated: Apr 30, 2018 ⏰

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