¡Cómo No Enojarme! [Corrigiendo]

¿Zamasu?

Narrador:

Sentirse intranquilo era algo normal, ¿entonces por qué se sentía más intranquilo que antes?... Y no, no es por Black ni por Zamasu del futuro, que ahora casi no joden su estabilidad mental, que aunque ya no pueden intentar dominar su cuerpo, sí seguían dando lata de vez en cuando.

—Debo estar tranquilo—se dijo en voz baja mientras tomaba té con Gowasu.—Estoy nervioso...

Bien, eso último sí lo dijo en voz alta.

—¿Por qué estás nervioso Zamasu?

—¡No por nada!—respondió de prisa.—¡¡Debo ir por más té... ya se terminó!!—se levantó bruscamente del asiento y se fue corriendo empujando el carrito del té.

—¡Zama... su!, "¿así que esto es lo que provoca principalmente verdad?"—pensó cuando el otro se había ido.—Zamasu...

Para Gowasu, más que su aprendiz, Zamasu era como un hijo en su etapa de rebeldía.

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—¡Ya no entiendo!

—¡No entiendo!

—¿Qué no entiende, Zen oh-sama?

—¡Qué es lo que pasa, ya no entiendo!

—... Ah... ya veo. Bueno se lo explicaré de esta forma...

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~Al día siguiente~

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—Zamasu deja de dar vueltas a la mesa...—le dijo Gowasu.

Sentía que le daría dolor de cabeza el sólo seguir viendo como éste caminaba como pendejo... digo digo... como un loco al rededor de la mesa del templo.

—Ah... no creo poder hacer eso...—su nerviosismo se notaba en los tres tonos que se distinguían en sus voces.—¿Si no viene... me habrá dicho que si vendría sólo para dejar de molestar... acaso...?

Bien, perfecto, ahora Zamasu parecía un acosador y un exagerado que acaba de conseguir salir con la persona que acosaba... o bueno eso parecía.

—Zamasu tranquilizate, actúas de manera exagerada.

—¡Usted que va a saber!...

—Tienes razón... no voy a saber que se siente tener que soportar a dos almas que te dan dolor de cabeza, contando que actúas como un acosador que no sabe cómo acercarse a la persona que le gusta. Y me alegro de no saber lo que se siente eso.

Auch...

—Te dejaré esperar a tu visita en tu locura—sentía que Zamasu debía de soportarse a sí mismo por mucho que sintiera tristeza lo que le sucedía.—Me retiro.

Y se teletransportó de ahí.

—No estoy loco—se cruzó de brazos.—¿No es así ustedes dos...?

Silencio...

Silencio...

—Mierda creo que sí estoy loco.