--¿Cuándo le vas a decir?--Dijo la Maura mientras me abrazaba por la espalda. El Alejandro estaba preparando unos panqueques por que mis antojos nadie los podía saciar, solo la comida del Ale.
Suspiré pesadamente pensando en el Mateo. No lo veo desde que tomamos un tiempo, y eso duele hace cuatro meses. Y los dos estamos para la caga. Yo no se como mierda decirle que tengo cinco meses medio de embarazada, y que el fetito dentro mío es suyo. Por que en ese tiempo estábamos juntos.
Y mis padres por suerte me apoyaron. Y no me mandaron a la cresta y ellos saben que aún no le digo nada al Mateo por que saben y si se entera hará todo lo posible por mantenerme a su lado a salvo. Ya me lo dijo una vez, el año pasado, cuando cumplimos cuatro años de estar juntos.
--Ya se lo voy a decir luego oh. Si no es tan fácil.--Farfulle contra mi celu. Estaba tentada a llamar al Mateo. Pero el miedo me carcome y me gana.
Se merece saber que va a tener un bebé, siempre fue un buen pololo y sé que será un gran papá pero no creo que yo sea la mejor mamá y que no podamos estar juntos de nuevo.
...
23 llamadas perdida de Mateo💜
Solté un pequeño grito al saber que el Mateo se había enterado. Era más que obvio; y sé que la persona quien le dijo fue mi papá.
Mi mamá apareció con una cara de afligida mientras tenía su celular a la oreja.
--Amor. La mamá del Mateo me llamó diciendo que él está de camino pa acá. --Abrí mi boca lo más que pude. Mierda.
Negué varias veces con la cabeza levantándome de mi cama. Inconscientemente me llevé una mano a mi vientre.
--M-Mamá no puedes dejarlo pasar. --balbucee nerviosa, aún no estoy preparada para verlo.
--Hija, el tiene derecho a vivir el embarazo contigo y verte. Saber de su bebé.--Frustrada me volví a sentar en la cama.
-- ¡Alondra! --Cerré los ojos con fuerza. Estaba aquí, podía sentir como subía las escaleras con rapidez.
La puerta se abrió dejándome ver a un Mateo prácticamente en la misma mierda. Sus ojeras demuestran lo poco que a dormido, también en que está más flaco de lo normal.
Corrió a mi tomándome por las axilas lo más suave que pudo. Sin poder evitarlo, lo abracé de vuelta envolviendo mis piernas en su cadera. Juntamos nuestros cuerpos lo más que pudimos gracias a los guatita.
--Te amo--Dijo en mi oído. Solté un sollozo sin contenerlo por más tiempo, estos cinco meses han dado lo peor.--No entiendo como me ocultaste algo así Alondra. ¿Aún no entiendes que erí el amor de mi vida?-- Lo abracé más fuerte. Lo extrañaba demasiado.
--Mateo, prométeme que vas a estar ahí para siempre desde ahora--Farfullé contra su cuello, necesitaba escuchar que lo iba a hacer, que estará ahí para mi toda la vida.
--Siempre amor, no lo dudes--Besó mis mejillas borrando cualquier evidencia de mi llanto-- Te amo Alondra--Besé sus labios con necesidad, no los había sentido en meses y me han hecho mucha falta.
--Te amo Mateo--Murmuré contra sus labios.
...
--Maura, no puedo caminar tan rápido--Le dije enojada, la weona se puso a caminar como flash. Siento que si camino más mi niño va a salir de su cueva.
--Maura, el Doctor dijo que tenía que caminar pero no tan rápido.--Hablo el Mateo tomando mi cintura y de paso acariciando mi guatita.
--Buta es que saben que me carga caminar tan lento po--Me reí y seguí caminando a mi paso. El obstetra me dijo que tengo que caminar unos veinte minutos y hacer yoga tres veces a la semana si quiero que mi parto sea natural. No quiero que sea cesárea, ya hartas estrías tengo ya.
Ya con ocho meses no hallo la hora de que nazca este monito, mi guata es enorme, el doctor dijo que pesaba tres kilos, es un guatón igual que el papá. Mis antojos son muchos, he comido cosas que jamás en mi vida pensé que comería o que no me gustaban.
Todos los días termino con los pies hinchados, las estrías y celulitis no pasan piola, pero aún así sé que no será malo cuidar y tener a este niño.
--Mateo--Contestó al llamado con un mmh, besé su mejilla repetidas veces causando su risa--Te amo--Me besó en los labios susurrando un te amo más.
--Nunca voy a estar con el zorrón.--Murmuró contra mi pelo--Mírate, hasta la bendición de él tienes--Le pegué en el pecho mientras me mordía el labio tratando de no reír.
--Cállate, que no me costaría nada ser mamá soltera--Farfullé con los brazos cruzados.
--Pero a mi si me costaría mucho estar sin ti y mi guatoncito--Una sonrisa sumamente tierna se asomó en su cara y yo no pude evitar amarlo más.
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Zorrón, perrito.
Teen FictionDonde él Mateo, el zorrón del curso quiere algo serio con la mina pesá del curso.