2- 5 y 4 años

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Debían ser cerca de las 8 de la mañana de un sábado, Izuki acababa de llegar de un patrullaje nocturno para poder tener el día del cumpleaños de su hija libre.

Hiro estaba acostado en su futón, todavía arropado y mirando al techo, viendo como el sol del amanecer hacía dibujos en el techo y pared, llevaba casi 20 minutos así y simplemente no quería levantarse, se había quedado hasta tarde jugando monopoly con su hermana y padre, además de que habían comido helado a altas horas de la noche y aunque su madre se lo prohibía, su padre los dejaba con la típica excusa: "mamá no está aquí y tampoco se va a enterar". En consecuencia de ello, ambos niños tuvieron dolor de estómago, Yuko fue donde su padre y durmió con él parte de la noche, mientras que Hiro prefirió aguantárselo, aunque le costó mucho dormir.

- de hace un rato lo noto callado -escuchaba a su madre decir mientras oía como chocaba entre sí la loza de las tazas y platos- ¿le habrá pasado algo en el preescolar? -dijo y sintió un tono de preocupación.

- no lo se, pero yo también lo noto un poco distante... ¿será por el tema de los quirks? Realmente me rompió el alma verlo llorar por eso, sobretodo si no sabemos si tendrá el tuyo hasta que sea algo mayor mayor -oyó que dijo el ojirubí y escuchó a su madre toser.

- solo no quiero que se sienta mal, Kacchan, me preocupa seriamente, sobretodo porque entrará a la escuela dentro de poco y se va a apartar más de nosotros -dijo y se escuchó como ordenaban ciertas cosas- ¿estará despierto? Habitualmente lo está, ¿puedes ir a verlos en lo que yo termino de preparar? -poco después de eso, Hiro vió como se corrió la puerta del cuarto y vió a su padre sonreírle dulcemente, manteniendo una mirada de amor detrás de los cristales de sus lentes.

- hola campeón -se escuchó suavemente y caminó donde el niño, para darle una mano y dejar que se levantara, comprobando que la niña dormía profundamente, luego lo tomó en brazos al ver que seguía medio dormido y salieron del cuarto, Hiro dejó su cabeza contra el hombro de su padre mientras este descorría la puerta- mira quien estaba despierto -dijo con una sonrisa, caminando donde Izuki, quien recién encendía el hervidor con agua, ella puso cara de asombrada y sonrió ampliamente, caminando donde el niño y dejando un pequeño beso en sus labios.

- hola mi amor, ¿ya fuiste al baño? -dijo con una dulce sonrisa y el chico de los rizos negó con su cabeza, haciendo que la pecosa sonriera- ve con papá, luego yo te serviré leche y cereal, ¿sí? -dijo y le sonrió nuevamente.

- ¿pueden ser panqueques? -dijo tímidamente el niño y los padres rieron, Bakugou abrazándolo con cariño y besó su sien.

- claro, ve al baño -dijo bajándolo y vieron como el niño fue hasta el baño, una vez que entró y cerró la puerta ambos padres ssuspiraron, notando que su hijo era mucho más alegre.

Hiro hizo sus necesidades y luego se lavó las manos, en cuanto salió vió como su padre terminaba de hacer la mezcla de los panqueques, en lo que su madre estaba sentada y bostezando un poco.

- ven, Hicchan -dijo ella palpando su regazo y el menor fue con ánimos, subiendo ahí y luego le abrazó.

- te amo -le dijo suavecito el rizado a Izuki, haciendo que ella sonriera.

- ¿quieres hoy a la casa de la abuela, mi amor? -dijo a su hijo, acariciando sus rizos y Katsuki les miró, esperando la reacción dem pequeño.

- sí! -dijo el niño, sonriendo amplio y asintió con su cabeza levantándose y estiró su mano a su muñeco de acción de Deku, moviendo este.- ¿no vas a salvar el día hoy? -dijo ladeando su cabeza y ella sonrió, lo dejó en el sillón y ella se levantó, adoptando una pose heroica.

- ¿dijiste salvar el día? -dijo ella, viendo como él se paraba con ánimo.

- plus ultra! -dijo el niño con ánimo.

- plus ultra! -le respondió su madre, caminando a él para tomarlo y ponerlo en su espalda, corriendo por la sala del departamento. Katsuki sonreía mientras escuchaba como ambos se reían, en un momento se giró y vió como los peliverdes eran iguales, ambos con una enorme sonrisa.

- mami, yo también quiero caballito -se escuchó la voz algo llorosa de la niña, quien estaba parada en la puerta de su cuarto, restregando su ojo con su puño.

- Yucchan! Feliz cumpleaños! -exclamó el niño y esperó a que su mamá parara para ir y abrazarla, cuando se separaron la niña fue donde su madre, extendiendo sus brazos y ella se puso de cuchillas para dejar un beso en su frente.

- feliz cumpleaños, mi amor, papá está preparando panqueques, así que ve a abrazarlo y dale las gracias -dijo y la pequeña de cabellos rubios y fue donde su padre, para abrazarle la pierna y bostezo.

- gracias papi -le dijo un poco somnolienta.

Habían desayunado como familia y luego le dieron un regalo a la niña, viendo como le había gustado al ver que quería colocarse el regalo casi de inmediato, sin embargo, no pudo ya que Kacchan tomó a los niños y los llevó a la bañera en lo que Izuki ordenaba todo.

En la tarde y en la casa de la señora Midoriya, estaban todos los padres viendo como alrededor de 5 niños corrían por el patio: Hiro, Yuko, May y los dos niños Iida, Kai y Kei.

- Kei tiene mucha energía -le murmuró la pecosa a su amiga mientras traían platos con comida de la cocina.

- ese es Kai -dijo Ochacco, la peliverde le miró avergonzada y ella se rió- yo los distingo por el color de la ropa, así que no te sientas mal -dijo y vió a sus gemelos correr, Kai con un traje de la ropa de héroe de Todoroki y Kei con un traje de Ingenium.

Izuki rió mientras veía como Kirishima corría detrás de los niños junto con Bakugou, quienes hacían de villanos, el resto de los padres gozaban ver como los infantes vestidos de héroes de la época se reían con gusto, luego miró a los padres que estaban sentados, como Tenya les decía a sus hijos que tuvieran cuidado, Kaminari que le sacaba fotos con su celular a su hija, como los padres de Katsuki y la madre de Izuki estaban alunados viéndolos reír.

- pareciera realmente que todos de coordinaron para vestirse -dijo Uraraka viendo a los niños. Mientras que sus hijos llevaban los trajes ya nombrados, Hiro llevaba un traje de Deku, Yuko su nuevo traje de Froppy junto con unos guantes de granada nuevos, que eran como los que usaba su padre y May su traje de Uravity.

- sí, pero se ven todos muy tiernos -murmuró Izu, sonriendo al ver como justo su hija caía de boca en el pasto, asustando un poco a todos, en levantó y miró a su madre, se giró a ver a su padre, quien estaba justo detrás de ella tendiéndole una mano.

- no llores, arriba -murmuró él, dejando que se parara su hija, se puso de cuclillas y miró la cara de su hija- todo está bien -le murmuró y besó la punta de su nariz. Izu miró a su hijo, quien hizo un puchero y fue donde ella con cara de molestia, abrazándose a su pierna.

- ¿pasa algo, bebé? -dijo ella, colocando una mano en el cabello de su hijk y este frunció el ceño, este no le dijo nada, dándole a entender que estaba celoso.

BakugouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora