Capítulo 13: Nervousness

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Caliente.

La habitación estaba caliente ¿o era su imaginación? Eso era lo que pensaba Yuuri mientras era besado por Víctor.

En el momento que habían dejado de bailar y conversado un poco, el ambiente cambio drásticamente, provocando que no pudieran dejar de mirarse. Poco después Víctor dijo algo muy cerca de Yuuri, y tan pronto como lo dijo, el ruso lo tomo de las mejillas y empezó un beso.

Cada beso era como una descarga de energía a su pecho y conectaba directamente con su estómago, el toque en las caderas de Yuuri era un suave agarre que lo acercaba más al calor del cuerpo del ruso y lo dejaba abrumado con este. El nivel de los besos aumentaba, subiendo de tal forma que Yuuri pensaba que, si seguía de ese modo, sus piernas podrían desfallecer en cualquier momento, aunque le costara admitirlo y se moría de vergüenza, al japonés le gustaban mucho los besos que el ruso le daba. Eran adictivos, revestidos con un cariño y delicadeza que le hacía sumirse en ellos. Mordiscos, toques, un estremecimiento.

El calor de la habitación aumenta y con ello, se intensifican las acciones. Inmersos en la pasión de los besos, caen en la cama. No dejan de besarse, bajos y suaves jadeos sale de los labios de Yuuri mientras Víctor lentamente le desabrocha la camisa, cuando la ha abierto un poco deja los labios del japonés para pasar a su cuello, allí Yuuri suelta un jadeo entrecortado mientras los labios del ruso trazan un camino desde la oreja bajando por el cuello hasta la clavícula. Este se estremece por cada nuevo toque de Víctor hundiéndose en sensaciones completamente nuevas para el pero que son muy placenteras, Yuuri se muerde un labio intentando no soltar más sonidos vergonzosos pero el placer aumenta cuando Víctor comienza a frotarse contra él.

Esta duro, Víctor Nikiforov esta duro y se esta frotando contra él.

Jadeando sin poder evitarlo, y Víctor tratando desesperadamente de despojar a Yuuri de su camisa por completo comienzan un vaivén donde ambos miembros se rozan intensamente y donde no pareciera existir la razón. El placer es demasiado, pero sigue siendo insuficiente, Yuuri y Víctor lo saben, así que este último empieza a desabrochar el pantalón del primero y el suyo propio para obtener un mayor placer; es cuando el resto de la ropa incluso la ropa interior se retira hasta dejar a la luz sus miembros que el nerviosismo de Yuuri lo envuelve.

La lucidez le vuelve por un momento, sabe que luego de ello no habrá marcha atrás si seguía con ello, sabe que el ruso está haciendo eso por el trato que tienen o por cualquier otra cosa menos por un sentimiento más allá de la lujuria, sabe que esta puede ser su primera vez con una persona, sin embargo, entre en medio de los toques, los besos desesperados, y la mirada en los ojos de Víctor, Yuuri no le importa ya lo que pasara después. Si tendría que arrepentirse de algo, lo haría después.

Las manos de Víctor recorren toda la extensión de sus miembros masturbándolos mutuamente, Yuuri quien tiene sus manos sobre el pecho del ruso lo incitan a seguir mientras se dan placer, los besos se profundizan al igual que los movimientos hasta que el placer es tal que no pueden contenerlo y se desborda en el pecho del japonés. Por un momento, Víctor se recarga del cuerpo de Yuuri para respirar, aunque solo han sido unos toques había sido una experiencia placentera, pero esta consiente que no quiere que eso acabe allí, la noche era muy joven para dejarlo simplemente allí, mucho menos cuando el placer otorgado por el japonés con solo su voz y sus besos habían enloquecido al ruso como ninguna otra persona, no obstante, cuando elevo la mirada para volver a besar a Yuuri y reactivar su fuego, se queda tieso al ver como el rostro de este estaba minado en lágrimas.

Los hermosos ojos ámbar del japonés se encontraban abnegados y por primera vez Víctor siente como su corazón se contrae dolorosamente ante esa imagen. Al principio no sabe bien que hacer, Yuuri sigue viéndole con el mismo rostro, pero con los colores subiendo poco a poco, el ruso como puede lo ayuda a limpiarse, lo viste y se viste el mismo para anunciarle que puede dormir en la cama, y que él, dormirá en la mueble cama de la habitación. Deja rápidamente la habitación, y se encierra en el baño dejando a un muy confundido Yuuri en la cama.

OH MY BOSS  (Concluida)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora