Capítulo 40

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-No, Beca. No te vayas, quédate conmigo. No te atrevas a cerrar los ojos,Beca,no- La tomé entre mis brazos y la miraba, lágrimas salieron de mi, mi voz se quebró al igual que todo lo que era yo en esos momentos.

-Chloe, tengo que llevármela. Tu quédate aquí con las demás a esperar que es lo que dirán los jueces- Dice Aubrey muy agitada.

Yo solo volteo a verla con lagrimas en los ojos, no pude evitar sollozar en ese momento.

-Yo quiero ir con ella. no quiero dejarla- La abrace con más fuerza.

-Tienes que quedarte- Amenaza con la mirada.

-A mi no me importa si ganamos o perdemos , yo solo quiero ir contigo- Había elevado el tono de mi voz, ahora me encontraba llorando y gritando a mi mejor amiga mientras las demás solo nos miraban sin saber que hacer.

Aubrey voltea a ver a Amy.

-Amy- Le dice Aubrey, con eso siento que alguien me levanta y me sostiene con fuerza.

Era evidente que se trataba de Amy impidiendo que fuera con Beca.

-Suéltame, Amy!- Grite con coraje, con tristeza, con todo un poco.

-No la vayas a soltar Amy- Aubrey como puede levanta a Beca y se la lleva e brazos.

Las demás se acercaron para tratar de calmarme, pero en verdad ninguna de ellas lo lograría, al menos de que una de ellas se llamara Beca Mitchell, tenga ojos de color como la noche misma, sea de baja estatura, tenga la voz algo aguda... Solo esa persona lograría calmarme del todo, pero desgraciadamente ella no estaba aquí.

Mientras seguía pataleando y forcejeando para tratar de escapar de los brazos de Amy, lo cual no funcionaba, solo provocaba que mis energías se agotaran rápidamente.

Ya cuando no sentía nada de fuerzas fue cuando me fui sentando y Amy se sentaba junto conmigo ya que no quería soltarme para nada.

Mientas me ponía de rodillas y caía junto con mis lágrimas me aferre al brazo de Amy, no quería abrir los ojos, quería que todo esto fuera un sueño y que al abrir mis ojos Beca se encontrara entre el publico.

-Déjame ir Amy, por favor- Le suplique en un susurro, sentía que si lo decía con un tono de voz normal no me iba a salir ni una sola palabra más que solo aire.

-Tienes que esperar, Chloe- Me dice mientras afloja un poco de su abrazo.

-¿No lo entiendes?- Me gire para verla directamente a los ojos.-La espere por mucho tiempo para poder estar con ella, ahora no quiero tener que esperar para perderla. por favor- Los ojos se me volvieron a cristalizar de tantas lágrimas que se me dificultaba el poder verla con claridad.

-Ve por tu enana- Me hace un movimiento con la cabeza que me hace entender de que me dejará ir.

-Gracias- Dicho eso salí corriendo que ni me percate de que es lo que estaba pasando a mi alrededor.

Lo que no me había puesto a pensar era en que una vez que me subo al coche y lo pongo a andar, es que no sé para donde me dirijo, que dirección tomar, que lado escoger, ¿izquierda? ¿derecha?

-RAYOS!- Dije para mi misma mientras conducía y trataba de contener las lágrimas que amenazaban con salir.

Si por lo menos Amy me hubiera dejado ir antes, habría podido seguir a Aubrey pero no, desgraciadamente no fue así.

Ahora no solo la tristeza recorría dentro de mi, sino también el coraje, la ira, eran sentimientos encontrados.

De lo que si que no estaba del todo segura era de con quien me encontraba enojada, si con Aubrey por decirme que me quedara, con Amy por haberme tomado de esa manera, con Beca por haber asistido cuando debía de estar en cama reposando, conmigo por enojarme sin saber el porque, existen demasiadas razones por las cual podría estar enojada.

Tu silencio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora