Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto.

Capítulo 1.

Después de esa ''charla'' con Lord Beckett, nos mandó tanto a Lizzy como a mí a una celda y se marchó junto a Will para según él, llegar a un trato justo por nuestras vidas. Lizzy se opuso completamente a que se marchase con Cutler pero Will logró tranquilizarla y ahora nos encontrábamos ambas en la celda frustradas.

-Oye Val. Giré mi rostro y observé a Lizzy que estaba apoyada en los barrotes de la celda.

-Dime.

-¿Qué crees que quiera Beckett de Will?, es decir, está interesado en Jack no entiendo que clase de negociación estarán llevando a cabo. Podía notar la angustia en Lizzy.

-Te voy a ser completamente sincera Lizzy, no tengo ni la más mínima idea de que quiera ese hombre, sólo espero que salgamos pronto de aquí. Todavía seguíamos en nuestras prendas mojadas y temía que enfermásemos en cualquier instante.

-Beckett y padre se conocían de antes, o eso parecía. La atención de mi hermana se había dirigido a sus manos, mientras hablaba sus ojos no se separaban de sus manos.

-Yo también me di cuenta de ello. No sé que relación tendría nuestro padre con una persona como Beckett, lo único que sabía seguro era que hacía mucho tiempo que no se veían las caras.

-Valerie, nunca he preguntado por miedo a tu reacción pero , ¿ extrañas a Jack?. Aquella pregunta me tomó por sorpresa y centré mi mirada confundida en ella.

-Lizzy, eres mi hermana puedes preguntarme todo sin miedo a nada. Una sonrisa se marcó en el rostro de mi hermana. –Y respondiendo a tu pregunta, claro que extraño a Jack más de una vez he soñado con que apareciese con la Perla y nos marcháramos a vivir aventuras. La imagen de Jack rondaba mi cabeza, ¿dónde estaría ahora?. –Sabes que después de todo, el mar me ha interesado más que nada y no sólo por los piratas y Jack, también porque me siento cómoda en medio de tanto agua, es como un sentimiento de libertad Lizzy. Antes de que me diese cuenta, mis ojos empezaron a aguarse y Elizabeth vino hacia mí y sostuvo mi mano acariciándola.

-Tengo el presentimiento de que lo veremos pronto hermanita. Ambas nos sonreímos.

-Más le vale aparecer pronto, estamos en este embrollo por culpa suya en parte.

-Bueno, los tres contribuimos bastante a la hora de liberar a Jack. El recuerdo de aquel día pasó rápidamente por mi mente, la lucha contra los soldados, nuestro padre perdonando a Jack, sus palabras.

<< Y Valerie, tú y yo tenemos asuntos pendientes todavía, encanto>>

Las palabras de Jack sonaban en mi mente, como si estuviese a mi lado.

-A veces me pregunto que hubiese pasado si Jack nunca hubiese llegado a Port Royal. Elizabeth me miró divertida.

-Desde luego, no estaríamos aquí encerradas querida hermana.

-Y tú no estarías a punto de casarte con Will.

-Cierto, de alguna manera, Jack nos ayudó en ese aspecto. La mano de Lizzy seguía acariciando la mía.

El sonido de la puerta nos alarmó a ambas, pero nos tranquilizamos rápidamente al ver que se trataba de Will y nuestro padre

-¡Espere, vos no podéis estar aquí!. El guardia intentó detener a Will pero mi padre se lo impidió.

-Vais a ver como sí puede. Ambas nos acercamos hasta la puerta y Will sostuvo las manos de Lizzy mientras nos veía a las dos.

-¡Señor Swann!. El soldado no parecía contento ante aquello