Capitulo 13

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En la sala se sentía una atmosfera algo pesada. Yami se encontraba sentada en una de los sillones junto con Anelis, quien tenía una mirada soñadora sobre los chicos que tomaban tranquilamente sus bebidas. Nadie hablaba, solo cuando se presentaron y luego silencio total.

Yami se sentía muy sorprendida por la visita de su amiga, y comenzando a experimentar incomodad por el hecho de que no quería que le robara de nuevo sus amigos, como ya había pasado en una ocasión que no tenia muchas ganas de rememorar, esa chica no había sido capaz ni siquiera de ir a visitarla al hospital, solo había dicho por medio de un mensaje que se encontraba con algunos problemas y tenía que ir a otra cuidad con su madre para resolverlos, aunque por casualidad llego nuevamente cuando salió del hospital sabiendo que organizaría una mini reunión para festejar la recuperación.

-Y... ¿De dónde conocen a Yami? –interrogó Anelis cortando el silencio.

-Nosotros la ayudamos cuando estaba siendo atacada. –respondió Max algo irritado por la interrupción del silencio.

-Exacto, pasábamos por ahí casualmente con un grupo de amigos y solo sucedió –alegó Criss tranquilamente mientras tomaba un poco de té – Comenzamos a venir poco después de eso para ayudar a Clara, ya que nos enteramos que se encontraba sola en la casa. Nos turnábamos para ir a cuidar a Yami al hospital y para estar aquí. –Finalizó dejando la taza en la mesa y tomando un pedazo de pastel, al mismo tiempo que enviaba una mirada hacia Yami.

La peli azul extrañada inclino la cabeza hacia la derecha incitando que no había entendido la indirecta.

- ¿Vinieron solo para ver cómo estaba? –volvió a interrogar Anelis.

-Sí, casualmente descubrimos que vivimos por aquí cerca, a unas 10 cuadras. Ese día cruzábamos por el parqué porque nos dirigíamos a comer a la casa de Max, que por cierto es mi vecino... –relataba Criss con un tono de felicidad para ser cortado por el pelirrojo.

-Desgraciadamente es mi vecino...

-Admite que adoras que te moleste –Recompuso Criss burlón, haciendo que Max pusiera los ojos en blanco.

El rubio carraspeó un poco para luego proseguir.

-La cosa es que vinimos para ver cómo estaba, así también podremos conocerla mejor y pasar tiempo con ella, nos cayó muy bien.

-Además solo nosotros estamos de visita porque los demás tenían cosas que hacer. –agrego Max antes de que la chica formulara otra pregunta al respecto.

-Oh, ¡son muy buenas personas! Quisiera tener amigos como ustedes, ¿Podrían darme sus números? Así algún día arreglamos para salir a algún lado, no sé...–Anelis hizo una pausa larga- ...Obviamente los 4, incluyendo a Yami también, ¿no es cierto? –plasmo una sonrisa inocente en su rostro.

-Si claro, no hay problema. –contesto la nombrada tomando un poco de té, para que así no notaran su voz de enojo – Solo necesito ponerme al día con las clases y ya.

-No sé mi número de teléfono y deje el móvil en mi casa –cortó Max antes de cualquier cosa volviendo a beber de su taza.

-Oh, ya veo. Que lastima, ¿y tú Criss?... –Trato de hablar Anelis coquetamente, pero fue opacada por la voz del chico.

- Si no entiendes alguna cosa de las lecciones puedes preguntarme –comentó Criss mirando a Yami e ignorando a Anelis rotundamente – Soy el presidente estudiantil o delegado principal, como quieras llamarme, de la escuela a la que asistimos. -dijo dedicándole una sonrisa relajante mientras acomodaba su pelo rubio con una mano.

Ella Es Diferente {El Corazón Es Lo Que Cuenta}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora