Secretos del Corazón

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Cinco años han pasado desde aquel día que lo vi por última vez. La lluvia ha caído incesantemente sobre mi alma desde ese momento. Estoy llorando; no por lo que ocurrió sino por su partida. ¿Por qué? Porque me enamoré de él, no puedo negarlo más.

Él era mi enemigo y sin embargo, mi corazón no se fijó en eso.

Pero a pesar de conocer mis verdaderos sentimientos, se fué, no se quedó y ahora mi corazón, mi cuerpo y mi alma lloran su pérdida.

Ya no podría hacer nada para remediar el hoyo que hay en mi corazón. Ahora estoy casada y esperando una hermosa bebé del único de tres hombres, que estuvieron detrás de mí, que se quedó a mi lado. Los otros dos se fueron, me dejaron sola, pero sólo Van se quedó y por eso me casé con él pues sabía que nunca me fallaría.

Los otros me fallaron, aquellos a quienes le di mi corazón y mi alma. Sin embargo, el que no tenía nada de mí resultó ser el mejor partido. Aunque sé esto no logro entregarle mi corazón pues éste todavía anda lejos de mí, por los lugares en los que se encuentran los otros.

Los otros... ¿Desde cuándo los comencé a llamar así? Creo que evitar mencionar sus nombres empezó desde que me traicionaron.

¡No! Alexiel y Heiro nunca me traicionaron, sólo querían vivir lejos de mí para solucionar su conflicto empcional y dejarme solucionar el mío.

¿Y yo que hago? No los espero y me caso. Ahora estoy embarazada y no puedo volver para atrás lo que hice, pero lo deseo tanto. Deseo a dos hombres que no son mi marido y a éste último no; no siento nada por él sólo vivo a su lado por agradecimiento y por no quedarme sola, pero no porque lo ame. ¡NO LO AMO!

Lo peor de todo es que él sabe que no lo amo como una mujer debería amar a su hombre pues ha visto la verdad en mis ojos... la ha sentido en mi piel y por eso sufre. Van sufre todos los días por esa verdad que yo quisiera negar, pero no puedo. No soy tan buena mentirosa...

Y por todas esas razones que nadie entiende estoy aquí, en esta casa que comparto con mi marido, pero que no es mi hogar, esperando a que llegue de trabajar.

La misma rutina todos los días hace que mi vida se marchite. Ya no soy feliz porque deseo hacer feliz a un hombre que no amo y sin embargo, no puedo vivir sin él; pero los recuerdos de otras caricias, otros besos y abrazos me llaman, calentando mi cuerpo y restregándome en la cara que ya no puedo tenerlas.

Cuando los dueños de esos recuerdos regresen me encontrarán atada a quien nunca creyeron su rival y me odiarán pues no los esperé... tomé una descisión, que nos perjudicaba a todos, sola sin siquiera pensar en sus sentimientos.

Me odiarán, de eso no hay duda. Me odiarán por no quedarme con ninguno de ellos, por reemplazarlos, por no amarlos como yo creía... Pensarán lo peor de mí y me llamarán mujerzuela... y tendrán toda la razón del mundo pues así me siento: como una puta.

Entonces mi corazón llorará, logrando que me suma en una mayor tristeza mas me lo merezco pues, en cuanto a mi vida personal se refiere, nunca he tomado las decisiones correctas.

Quiero a Alexiel, quiero a Heiro... Los quiero de vuelta aunque me odien, no me importa. Yo sólo quiero a los tres hombres más importantes para mí de vuelta; todos juntos.

Locuras en Blanco y Negro  [Retos, Locuras y Otros]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora