El superviviente

Capítulo 1 Un kig-yar en problemas

Desperté de manera agitada ya que un grito me había alertado, pero al no ver nada solo me tranquilice, entonces el grito se hizo presente de nuevo provenía de afuera, me levante y recogimos cosas, podía ser alguien en peligro, Sali y la nieve de la tormenta del dia anterior aun estaba presente en algunos escombros y edificios derrumbados de la zona, camine y camine, y el grito cada vez se hacia mas presente pero era en un lenguaje incomprensible para mi así que prendí mi collar traductor.

- ¡ALGUIEN POR FAVOR AYUDEME! - fue lo que escuche

Corrí hacia la zona de donde provenía el grito, doble una esquina y al llegar allí, pude ver de donde provenía el grito, era un kig-yar con armadura pesada del covenant, me escondí detrás de un auto y miré por una de las ventanas rotas de este. El kig-yar estaba atrapado, un escombro había atrapado su pierna, tenía miedo, pero quería ayudar ya que al parecer estaba sufriendo mucho, pero una parte de mi sabia que era peligroso, me arme de valor y Sali de mi escondite, en cuanto el kig-yar me vio tembló un poco y tomo su pistola de plasma con la que me apuntaba con mano temblorosa, tenía miedo ¿de mí?

-a...aléjate d...de m....mi h....hu...humano- dijo el kig-yar quien me apuntaba con mano aún más temblorosa, entonces este disparo, fallando el tiro por lo tanto que temblaba su mano, luego aventó su arma hacia mi con la esperanza de pegarme, pero fallo.

- ¡OYE QUE TE SUCEDE! - grite, pero el kig-yar solo me miraba con miedo

A medida que me acercaba a él, la mirada del kig-yar se iba transformando hasta llegar a las lágrimas, me tenía miedo, ¿pero por qué?

- ¡POR FAVOR HUMANO, NO ME MATES, DEJAME AQUÍ, ¡NO QUIERO MORIR! - grito el kig-yar quien rompió en llanto, ¿Qué carajo?, no normalmente son maquinas asesinas pensé.

-ya tranquilo, solo quiero ayudarte con tu pierna- dije al tiempo que me arrodillaba a un lado del escombro, mientras el se me quedaba viendo muy confundido.

-bien, veamos si este exoesqueleto que encontré aun sirve- dije al tiempo que apretaba unos botones del Exo, el cual hizo unos ruiditos y los foquitos de este se encendían, puse mis manos alrededor del encumbro y lo levante sin mucho esfuerzo. Pero al levantar el escombro, la pierna del kig-yar estaba atravesada por una varilla de construcción.

-oye tengo que moverla, pero te va a doler- le dije, pero este aún seguía procesando lo que estaba pasando, el hecho que un humano ayude a un miembro del covenant, oye eso no sucede todos los días, tome con cuidado la pierna del kig-yar y la levante, el solo lanzo un grito de dolor y luego deje su pierna sobre el piso, entonces del Exo que tenia se desplego un casco el cual se puso en mi cabeza apenas deje la pierna del kig-yar en el suelo, wow esto es nuevo, pensé, luego en el visor del casco una reproducción detallada de la pierna del kig-yar se reprodujo en mi casco y mostro una ruptura de hueso, tome dos palos de madera y los amarre a cada lado de la pierna, luego suture la herida, mientras el kig-yar se quejaba muy poco del dolor.

- ¿Por qué me ayudas humano? - pregunto el

-bueno, hay mejores maneras de morir y por hipotermia creo que no es la mejor- dije al tiempo que me sentaba a un lado para descansar.

-pero, pude haberte matado- dijo el

-lo hubieras hecho, de no haber estado sumido en miedo- dije, mire al cielo y una gran nube de tormenta se dirija hacia nosotros.

-mierda- dije

-humano, si quieres puedes venir a mi casa, pero necesito ayuda, no puedo caminar bien-

Tome al kig-yar del brazo y lo pase por encima de mi hombro, luego caminamos así hasta llegar a una especie de cueva hecha por los edificios caídos, entramos en ella y una vez dentro, había muchas cosas, una mesa de comunicaciones, latas de comida, una especie de fogata, pero tenía cristales que liberaban calor, lo cual explicaba eso, luego una cama, donde pose al kig-yar quien se quejó un poco.