Capítulo 6

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El Soldado y el Dios se encontraban desayunando a las ocho de la mañana, ya que, Bucky tenía que estar en la torre puntual. No quería escuchar sermones de Steve y menos tan temprano.

Loki apuñalaba su desayuno con un tenedor mientras su cabeza estaba llenas de preguntas, está empezando a sentir ese molesto e innecesario sentimiento que había jurado nunca sentir en su vida por una persona. La única persona con la cual sentía amor era solo con su madre, Frigga.

Claro que la extrañaba, siempre pensaba en ella, en cómo estaba o si estaba pasando algo en Asgard. Creo que nadie se ha preocupado por su ausencia. Ni siquiera Thor. Todos sabían que Loki desaparecía y volvía con sus malévolos planes, entonces, ¿para qué preocuparse?

Lo más gracioso para Loki, es que no tenía ganas de planear nada, ni de traicionar o molestar a su hermano mayor. El trono de Asgard era algo que ya no le importaba desde hace mucho tiempo.

—¿Loki? —Bucky preguntó.

El Dios alejó todos sus pensamientos y miró a Barnes con una expresión preocupada en su rostro.

—¿Estás bien? Sólo veo que juegas con tu desayuno.

—Estoy bien—Loki murmuró, dejando de jugar con el tenedor.

—¿Estás seguro? —volvió a preguntar pero Loki no tuvo oportunidad de responder porque el celular de Bucky vibró—. Es un mensaje de Steve, me tengo que ir—se levantó y guardo el teléfono en su bolsillo.

Loki miró a Barnes moverse de un lado a otro mientras buscaba las cosas necesarias para su misión. Entonces pensó. ¿Y si algo malo le pasaba? ¿O si vuelve herido? Era conciente de que era una misión no tan arriesgada, pero si importante, el mismo había escuchado, pero aún así, el miedo de perder a la segunda persona que más amaba lo comía vivo.

—Te veré mañana, Loki—Bucky dijo finalmente, dedicándole una sonrisa y enviando un mensaje, estaba seguro de que era para el Capitán.

Bucky por fin sabía usar el celular, entre los dos se habían ayudado para comprender esas cosas, y Bucky se emocionaba cuando descubrían algo nuevo, a Loki le encantaba cuando los ojos de Barnes brillaban por una nueva función en su celular.

Bucky apenas tocó la perilla de la puerta cuando una mano agarró su brazo de metal, impidiendo que se fuera.

—¿Loki?—Bucky preguntó confundido, mirándolo a los ojos, sus ojos verdes se volvieron oscuros y eso lo puso nervioso .

—Promete que regresarás bien—Loki murmuró ya que casi estaban tan cerca.

—L-lo haré—Barnes pudo decir, seguía mirando sus ojos y después bajó a sus labios. Tragó saliva nerviosamente.

Los dos se daban miradas que a Bucky se le había olvidado llegar puntual con sus compañeros de equipo. Parpadeó por un segundo y ahora a Loki le tocó mirar sus labios. Sus respiraciones se mezclaban y los dos ya no podían más. La tensión seguía en el aire, Loki tomó a Bucky de su cintura y lo acercó más a él haciendo a Bucky soltar un pequeño gemido.

Bucky nerviosamente envolvió sus brazos alrededor del cuello de Loki, atrayéndolo más a él por la diferencia de altura. Y de pronto, sus labios se encontraron con los del Dios en un lindo y tierno beso.

EL DEMONIO BLANCO ✦ WINTERFROSTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora