No necesito un soporte porque para eso tengo mi propia piel. No necesito tus mentiras, ni tus vueltas. No necesito seguir argumentando porque ya conozco todas las respuestas.
No puedo escuchar canciones sin sentir todas tus historias. No puedo salir de este rango por miedo a encontrarte, y que se te ocurra volver a encantarme.
No quiero volver atrás porque mis venas aún guardan todas las heridas. No quiero problemas más espero soluciones. No quiero tus sobras de afecto, tus palabras repetidas, yo no soy un álbum a completar.
Quiero tu mirada en mi mirada, quiero tus labios diciendo tu verdad. Quiero mis manos nerviosas pensando en el mañana. Quiero seguir soñando con lo desconocido, con aquello que anhelo desde que tengo memoria de poeta.
Quiero más noches en vela y conversaciones sobre variadas narrativas. Quiero más oportunidades para seguir callando, para seguir fingiendo, para seguir disfrutando.
Quiero que tu sinceridad tape mi ansiedad y contarte mis más profundos secretos. Quiero que nos esquivemos antes del beso y vibrar por la tensión sexual. Quiero que la vigilia en las estrellas me de más canciones e historias que escribir. Quiero que me leas y te encuentres entre líneas porque ahí es donde te guardé para siempre.
Y ya no me importa como ésto siga, ya no me importa seguir mirando al sur queriendo el norte. Ya no me importa hablarlo, ni llorarlo. Lo único que necesito es una respuesta. Y mientras espero seguiré apropiandome de lo que tu esencia me dejó, seguiré escribiendo canciones sobre vos que otros van a usar para acercarse a mi aura.
Todo pasa en un mientras tanto, y mientras tanto la luna sigue esperando que te animes a cambiar las frases trilladas por una buena respuesta.
