Kumo no Dokugan Yoko

Capítulo 11: Despedida, Llegada Y Akeno

(Personas hablando)

(Bijuus/Invocaciones hablando)

(Pensamientos de las personas)

(Pensamientos de los Bijuus/Invocaciones)

No soy dueño de Naruto por desgracia o cualquier personaje de anime mencionado.

Habia pasado una semana desde que Gato murió y los habitantes de Nami no Kuni habían estado celebrando desde entonces. Claro esta había mucho que hacer, reconstruir sus hogares, recuperar sus objetos robados y rehacer sus vidas, pero a pesar de las dificultades en el horizonte, la alegría de las personas era casi palpable.

El grupo de Naruto había estado ocupado durante ese tiempo, tuvieron que asegurarse de que todos los hombres del magnate habían desaparecido por lo que estuvieron viajando por toda la isla en busca de sus enemigos. No es que fuera una tarea difícil, después de todo, con los 2 pelirrojos cuyas habilidades de detección podían encontrar a un bandido a kilómetros era pan comido, pero aun así era molesto. También detectaron en ocasiones a los dos ninjas de Kiri pero Naruto decidió dejarlos en paz. Después de todo ya no tenían razones para luchar.

La tarea más tediosa fue encontrar todos las propiedades de Gato había construido, laboratorios de drogas, almacenes y prostíbulos donde guardaba su 'mercancía'. El pelirrojo tuvo que quemar la mayoría de ellos junto a las drogas, liberar a las mujeres y niñas para que pudieran volver a sus hogares y transportar todo el dinero que habían encontrado para que el Daimio pudiera administrarlo para reconstruir el país.

En resumen, había sido una semana ocupada.

Naruto se encontraba en estos momentos en la ex-aldea amurallada tomando un descanso. Los clones del pelirrojo iban circulando por todo el lugar, llevando madera para reconstruir las casas o desmontando la muralla y los andamios. Karin se encontraba con las mujeres preparando la comida mientras Jugo y Kimimaro habían ido con los pescadores para ayudarles a traer los peces atrapados en sus redes.

El chico iba observando cada persona con una sonrisa, la felicidad y la esperanza de cada individuo reafirmo su resolución. No solo había sido él el que había liberado el país, cada uno de ellos habían jugado su papel, se habían levantado y luchado por su hogar. Francamente, si a algún idiota se le ocurría volver a intentar el mismo truco que el enano, lo más seguro es que acabaría con la cabeza clavada en una pica.

-¡Aniki!-.

Naruto giro la cabeza para ver al pequeño Inari acercándose con una sonrisa. El pequeño se había vuelto muy apegado al pelirrojo después de esa noche y acabo viéndolo como un modelo a seguir.

El pequeño se acerco y le tendió una cantimplora que el ojiazul/violeta acepto antes de dar un largo y profundo trago para hidratarse.

-¿Como va el trabajo?-. pregunto el pelinegro.

Naruto bajo la cantimplora y soltó un largo suspiro satisfecho antes de contestar. -Bien, el muro y los andamios están casi hechos, solo falta reconstruir las casas y habremos terminado-.

El niño lo miro con preocupación. -¿Cuando vais a marcharos?-. preguntó

Naruto se lo pensó un rato antes de contestar. -Habremos acabado con la construcción esta noche por lo que supongo que mañana o en los próximos días, cuando antes mejor-.

La respuesta del pelirrojo deprimió un poco al niño de 10 años. -¿No quieres quedarte?-. pregunto deprimido.

Naruto lo miro unos instantes hasta que empezó a acariciar su cabeza mientas sonreía. -No es eso Inari, es solo que esta no es nuestra casa y tenemos que seguir con nuestro viaje-. explico para que el niño entendiera.