Capitulo 7

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El sonido de los aceros se escucha por todo el barco, todos y cada unos de los piratas están al tanto de la batalla se escuchan gritos silbidos las apuestas no se hacen esperar, el hombre es bastante fuerte pero yo soy  bastante ágil, afortunadamente nadie se a dado cuenta de el echo que soy mujer.
Las risas y alaridos se escuchan como ecos a la distancia, a comparación de los latidos de mi corazón que late desenfrenado por la adrenalina.
La desventaja de fuerza es demasiada debo actuar con inteligencia o terminare siendo abusada por mas de una docenas de brutos con aliento a podredumbre, tan solo de pensarlo me da asco.

— ¡CAPITAN! — Se escucha de repente un gritó captando la atención de todos. — Nos aproximamos a un huracán.

La emoción de la batalla fue tanta que todos tenían los ojos en nosotros y descuidaron su alrededor.
El capitán  maldijo una y otra vez mientras movía a todos sus hombres para tratar de desviar el barco, si corríamos con suerte pasaremos por un costado y el golpe no seria tan fuerte.

— Bien niño bonito corriste con suerte, dejaremos esto para después. — Me dijo el capitán cuando paso por mi lado.

No podía creer lo que estaba pasando esto era demasiado. Tenia ganas de lanzarme a los brazos de Adrien y que me  comiera a besos, pero esa idea no podía materializarse.

La tormenta nos azotó con gran fuerza, la lluvia nos impedía ver bien, las olas amenazaban con voltear en barco y hundirlo, chocaban contra en casco y contra cubierta arrastrando con sigo a quien no lograba sujetarse bien.

Los gritos del capitán eran potentes, los rayos iluminaban el cielo, mi corazón bombea tan veloz que parece que estallara. Mi piel se me enchina, no se si de frío o miedo.
El mar no esta teniendo piedad alguna de nosotros.

Al fin la mañana a llegado y con ella la calma, el infierno perdió barios demonios y eso funciona nuestro favor, menos hombres, mas posibilidad de defendernos.

Estoy parada junto a Adrien que no pierde de vista al capitán, lo mira como si lo quisiera matar con la mirada.
Anoche en la tormenta la ropa se me pego y la gorra se me calló, mi peor miedo ya paso todos se dieron cuenta que soy mujer.
Las miradas morbosas no se hacen esperar.
Los hombres pasan su lengua por sus amarillentos dientes y temo por mi, pero mas que nada por Adrien .
Temo que me lo arrebaten para que...
Bueno no quiero ni mencionarlo.

—¡ Lleven a la princesa a mi camarote! —Se escucha la orden del capitán. Mientras los hombres se acercan entre vitoreos y expresiones de morbo y lujuria que notan en su rostro.

— ¡Sobre mi cadáver! — Grita Adrien deslizando su espada, comienza a luchar contra vario hombres.
Yo intento ayudarlo pero soy sujetada por varios hombres que no permiten moverme.
Grito pataleo, me retuerso y escucho decir a un tipo — Es feroz la fierecilla. — y a otro responder — Como disfrutaremos jugar contigo.

Mi ojos comenzaron a humedecer se mientras mi desesperación crecía gracias a la importancia que me invadía.
Adrien lucho impecable mente su espada se deslizaba por los cuerpos de aquellos piratas y sus puños chocaban contra su rostro asta que sentí aquella punzada tan terrible que mi corazón se detuvo por un instante.

— ¡NOOOOOOOOO! — Mi grito resonó con fuerza cuando vi como una espada atravesaba el cuerpo de Adrien, mis  lágrimas cayeron desenfrenadas y mis intentos por soltarme aumentaron mientras veía la sangre de el y su mirada en mi.
¡No,no, no! Mas valdría morir en este mismo instante.
Sentí el corazón en la garganta impidiendo recibir mas aire mis gritos eran desenfrenados y mis maldiciones completamente llenas de rabia.
Quería acercarme a el y decirle que todo estaría bien pero no pude, los malditos perros lo arrojaron por la borda y mi corazón se fue con el mientras lo veía caer.
Todo paso lentamente como si el tiempo me quisiera hacer eterno este terrible sufrimiento.

Mi garganta raspaba de tanto gritar asta quedarme sin voz y mis ojos enrojecidos de tanto llorar miraban con un profundo odio a todos aquellos que participaron.

Pero mi corazón estaba roto y mi alma me había abandonado para ir con el...
Mientras las risas de todos esos asquerosos perros de mar se escuchaban en un eco a la distancia.

❇❇❇❇❇

Si lo se me quieren matar por los  que hicieron aquellos terribles piratas.
Pobre Marinette sus desgracias no se acaban.

¿Que mas les puedo decir?

Estamos de luto

De verdad llore con este capitulo.
Pero era necesario para lo que viene.

Por ahora solo toca que Marinette sea valiente.

Los invito a conocer mi nueva historia
Se llama

"Catterine"
El amor de Poseidon.

Espero me apoyen en este nuevo proyecto.
Besitos 😘😘😘

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