CAPÍTULO 9: INCERTIDUMBRE

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"La tormenta se avecina...
Golpeara con fuerza destruyendo vidas...
Hay que ser fuerte... ahora más que nunca..."

Había pasado muchos acontecimientos . Por un lado estaba desesperada por que se llevaron a mi esposo sin consideración alguna. Hubiese deseado defenderlo o ir a buscarlo, pero era imposible para mí. Primero debía cuidar a mis dos pequeños, Ale estaba muy asustado por ver Anayra herida y que se llevaran a su padre y a Gabriel, que ya lo consideraba como un tío. Solía llamarlo tío Gabriel.

Por otro lado aparte de cuidar a mi pequeña hija recién nacida, hacia hasta lo imposible por salvar la vida de Anayra, que después de todo... sin ella no estaría ni mi hija y con vida.

Recordaba lo último que me enseñó Anayra antes de que yo cayese enferma. Justo mucho tiempo antes de que el caos pasara, ella me enseñó sobre la medicina natural. Tenía libros muy antiguos en estanterías sobre el uso de hierbas especiales. Anayra siempre fue la médico más especial, tenía gran amistad con el rey...Siempre le ayudaba y salvó muchas vidas a través de los años...Solo que siempre con su actitud misteriosa, no contaba de su pasado a nadie... e incluso Gabriel, su hijo, decía que su madre jamás contaba de su vida pasada y que no se explicaba porque su madre fuese tan callada y tan enigmática.

Mientras ella se recuperaba yo trataba de mantener todo en orden, pero siempre con la incertidumbre y el temor a que esas puertas se abrieran anunciando el final y lloraba en silencio ante la ausencia de mi esposo, sin saber que estaba siendo él este mundo maldito.

En otro lado no muy lejos de allí, Gabriel y Leonel habían sido llevados como prisioneros ante los gemelos, que estaban en la parte más alta del castillo sentados en los tronos de los fallecidos reyes. Mirando de manera frívola a los dos inocentes monstruos que llegaban atados, con pocas fuerzas y fueron puestos ante ellos.

-¡No lo puedo creer! -Exclamó el pelirrojo en tono sarcástico- ¡Mirad quienes están ante mí!

Él comenzó a reír con descaro e hizo que tiraran a ambos monstruos al suelo. Walter y su hermana se acercaron a ellos.

-Hermano, mira estos monstruos ¡Son un desastre! ¿Por qué no los mandamos a matar de una vez? -Dijo la pelirroja- Solo mirad su cabello... todo enredado, sucio, y maloliente... ¡Simplemente despreciables!

-¡A menos mi pelaje me cubre un poco del frío. Ustedes deben cubrirse con un montón de ropas encima! -dijo Gabriel como siempre retando a todos en el peor momento.

- ¡No te quedes callado Leo di algo!- ...

-¡No puedo creerlo! ¡No pue-

El gemelo golpeo a Gabriel fuertemente haciéndolo caer al suelo... Gabriel estaba más enojado aun pero no podía hacer nada... lo tenían atado a fuertes cadenas que le impedían moverse...

La chica tomo con fuerza el cabello de Leonel...mientras este se mantenía mudo y sin levantar la mirada.
- Deberíamos cortarles el horrible cabello que tienen...o simplemente desaparecerlos para que no causen más problemas. ¡Y cortarle la cola a ese gato entrometido!

-¿Por qué no cortamos mejor ti cabeza? ¡Sería más interesante! -siguió Gabriel de retador-

- ¡Dame ese cuchillo! ¡Yo misma mataré a ese gato! -gritó la gemela con furia.

- ¿Matarlos? ¡Nah! ¡Quiero divertirme un rato!

- ¡¿Qué piensas hacer entonces?! Espero que no sea una de tus tontas ideas.

- ¡Ya verás! ¡Guardias! Llevad detenidos a estos dos y encerradlos en el calabozo del castillo, tengo algo planeado con ellos, así aprovecho y doy una lección a todos estos malditos monstruos de una vez -se comenzó a reír de forma malvada-

- ¿Esa era tú idea? ¡Ah! ¡Qué inteligente! -Exclamó ella en tono sarcástico- ¡No te vayas a morir de un dolor de cerebro!

Se llevaron arrastras a Leo y a Gabriel tirándolos en fría celda, desde allí observó a otros compañeros que pedían piedad e incluso estaban muy lastimados casi hasta el punto de desfallecer... podían ayuda... pero no vino nadie en su auxilio... Incluso, frente a ellos el gemelos mataron a un conocido de ellos atravesándolo con una espada.

-¡Oh no! Jerry... ¡Ha muerto! -dijo Leo nervioso viéndolo morir al instante.

-Gabriel....¡Yo no quiero estar aquí!... la vida de mi familia peligra.... Nuestra familia peligra... ¿Gabriel?

-Estos malditos humanos... Me la van a pagar... -dijo intentándose levantar sin éxito lanzando un maullido de dolor -

Gabriel estaba mucho más herido que Leo, el gemelo lo había herido gravemente, estaba sangrado mucho y eso lo debilitaba cada vez más...

-¡Oh por Dios Gabriel! ¡Por favor... tengan un poco de piedad o mi amigo va a morir!

-¡A nosotros no nos importa que les pase a ustedes! De todos modos es posible que todos los que están aquí mueran. Tú y tu amigo gato morirán. Mirad a tu desgraciado amigo. ¡Ya es un gato moribundo ! ¡HA HA HA HA!!

-Por favor....sé que ustedes no son tan malos... Pueden que no lo sean... ayúdenos....por favor...

-Nosotros seguimos reglas, ustedes son culpables... en especial tú.

Salieron de allí los guardias dejando a los amigos solos...mientras Leo trataba de animar a su amigo...

-¡Vamos, sé fuerte Gabriel! ¡Vamos a lograr salir de aquí!

-Salir....salir de aquí para que todo sea peor. Va...vamos a morir...

-No digas eso, sé que vamos a salir adelante, solo sé fuerte....

-Si muero... y logras salir de aquí... promete cuidar a mi mamá...Es lo único que tengo en esta vida... P-por favor...Cuida de Anayra..¡Y véngame! No seas tan cobarde Leo....Recuerda... recuerda la frase especial...

-Te lo prometo... pero debes resistir... Anayra sufriría mucho si mueres.... Perder a su única familia la afectaría mucho....Todo esto es mi culpa...debí enfrentar las cosas yo solo... fui un cobarde... ¡lo siento Gab...

-No te disculpes, no es culpa tuya... ni mía...Son de ellos...

-Mantengamos la poca esperanza que queda por nuestra familia ¿está bien? ¿Gabriel?

-...Así será. Por...nuestra familia...

Gabriel cayó rendido ante su debilidad... mientras Leo trababa de cuidar a su amigo para que este no se rindiese ante la batalla contra la muerte, mientras pensaba en qué hacer para salvar a su amigo y salvarse él... mientras no dejaba de pensar en el destino de su familia.


(reel.rop.saicarg. )
(amixorpa.es.etreum.anu)NO es latín.

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Aprender a ser la tormenta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora