Todo cambia. [NARUTO] [TERMINADA Y EDITADA]

Capitulo 38.

Narra Ino.

– Realmente me encanta todo esto.

—Jamás había venido o bueno sí pero no a ver nada de esto.

— ¿Entonces para que?.

– Jmp pues en una misión qué tuvimos, pero luego habrá tiempo y te contaré.

Seguimos viendo todo lo qué había.. Sai me había llevado a un museo, no era muy fan pero me entretuve muchísimo, después de eso me llevo a una tienda de arte.. Le dijeron qué si quería podía dibujar algo.

Yo definitivamente jamás lo había visto dibujar, pero al ver él hermoso dibujo qué había echo de mí, me.. Enamoré de lo qué él hace.. Sus dibujos son hermosos.

— Me encanta dibujar, quiero dedicarme a la pintura.

No sabía sí era grosero pero me lo imagine pintando una lugar de color azul. Eso realmente me hizo reír y él me miro.

— ¿Crees qué no podría hacerlo...?

Valla definitivamente era una idiota...

—No, claro qué puedes tienes talento. –Le dije con mucha seguridad.

—Gracias. –Me sonrió.

Le devolví la sonrisa y salimos de la tienda de arte, comenzamos a caminar y pasamos cerca de un puesto de hamburguesas... Me puse roja ya que mí estómago había "Rugido de hambre", definitivamente se me había antojado.. Lo volte a dónde debería estar y no estaba..

—¿Sai?. –Dije volteando hacía la dirección en la qué estaba hace un rato.

— Por aquí. –Me hablo.

Volte hacía él lugar en dónde provenía su voz y lo vi en él puesto de hamburguesas. Me acerqué de nuevo roja.

—Ya pedí una para ti y una para mí.

Sonreí.

—Gracias.

—Pense qué te quejarías.

—¿Eh?.

Lo mire sin entender..

— No es nada.

Mientras comíamos nuestras hamburguesa un vendedor de dulces paso a nuestro lado, yo lo mire, tenía a su pequeño hijo aún lado. Mientras ofrecía a la gente sí querían alguno yo miraba al pequeño. Luego nos miro a nosotros y se nos acercó.

—Disculpen la molestia, Les gustaría comprar alguno de estos dulces. –Nos mostró su canasta de dulces y Sonreí.

Estaban ahí mis dulces favoritos y había otros qué no había probado. Acabe mi hamburguesa y decidí lo mejor para mí, tal vez.

—Quiero todos. –Dije con una sonrisa.

—¿E-Enserio?.

—Porsupuesto.

Mire a Sai y él sólo me miraba, tal vez intentando descifrar él porqué los compraba todos, pero era lo más sencillo, me gustaban y quería probar los otros, aún qué eran muchos, realmente me gustarían comprar todos para compartir les a las chicas o comerlos yo.

Los page.

_Puede quedarse con él cambio.

—No.. Eso me dejaría con 300 más y no podría aceptarlos.

—No sé preocupe, Y Eh....– Saqué una tarjeta de la empresa y se la extendí – Valla allí, están contratando gente. Puede darle una mejor vida a su pequeño y no se preocupé por él cambio, úselo para comprarse algo o al niño. 

Le Sonreí y él señor sólo me agradeció.

Mire al pequeño niño y le di dinero, cómo sí fuera una recompensa por su ternura, o eso le dije.

Después de qué él niño y él señor se fueran, Mire a Sai él qué sólo me miraba.

—Eso fue muy bueno, ¿no crees?. –Abrí uno de los dulces y me lo comí, sabía delicioso.

— Eres muy buenaa, Otra cosa más para enamorarme de tí, –Me sonroje– normalmente yo sólo abría comprado uno.

— La mayoría hace eso, pero a ese señor ya lo conocía, tal vez él no se acuerde de mí pero yo sí, aún qué sí habría hecho eso por otra persona.

—Enserio me encantas. –

Sonreí y de un momento a otro sentí sus labios estampados en los míos, eso fue lo mejor de este día, supongo.. Le correspondí al beso.

—¿Quieres ser mí novia?

Lo mire con sorpresa y un sonrojo.

—¡Por su puesto qué sí!. –Grite.

Podría jurar qué todos alrededor me miraron, pero no me importó y salte a los brazos de Sai.

Este día había sido maravilloso.