Vuelo

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Capitulo dedicado a la hermosa persona de : MILS2006 ; ¡muchas gracias por apoyar esta historia!

- Waka- Wataru no llores.- le decía al pequeño pelirrosa en un intento de calmarlo mientras lloraba como magdalena teniendo que agacharme por la diferencia de alturas.

- Esh- que io bush buah-- intentaba hablar Wakamole mientras casi se comía sus mocos. Ascole.

- Vamos Wataru, ¿no te gustaría que Naomi-san se fuera con tu imagen llorando verdad?- habló Masaomi agachándose a su altura haciéndole reflexionar a lo que él negó tallándose sus ojos con la manga de su suéter.- Perdón Naomi-san.- se disculpó apenado.

- No te preocupes, gracias por traernos. - dije con una leve sonrisa en mi rostro la cual fue correspondida por el castaño.

Era el día en el que volvíamos a la Toscana finalmente, estaría sola con el pelirrojo seguramente en un incómodo silencio si no fuera por los Asahina que habían venido a despedirse. Con el equipaje ya registrado y los boletos en mano, el anuncio de que nuestro vuelo saldría pronto para que los pasajeros fueran abordando por la puerta sonó por el altavoz del aeropuerto.

- Ya es hora Naomi.- dijo Hikaru viendo el reloj que le había regalado en nuestro primer mes juntos en su muñeca. Buenos tiempos. De cualquier manera asentí aún indispuesta a dirigirle la palabra.

- ¡Abrazo familiar!- gritó Wataru lanzándose hacia ambos con sus brazos abiertos mientras el resto de los Asahina se unía al incómodo y espontáneo abrazo, lográndome sacar una pequeña sonrisa a pesar de mi mal humor.

- Naomi-san- me llamó Ukyo siendo el primero en separarse del abrazo para luego Fuuto, Natsume,y Kaname, le imitaran.- en nombre de toda la familia queremos pedirte una disculpa por interponernos en su relación. Lo sentimos mucho.- dijo inclinándose en un perfecto ángulo de noventa grados. Nuevamente, el resto le imitó. Excepto Fuuto, quien permanecía de brazos cruzados pero luego Ukyo lo tomó del cuello inclinándolo también. Tomé un profundo respiro después de observarlos algunos segundos antes de responder disfrutando del sentimiento de poder, parecía como si mafiosos se reportarán ante su patrón, el mero mero, ósea se yo.

- Oigan, levántense no es necesario hacer eso, acepto su disculpa, tienen una gran familia, no dejen que esto los separe. - dije con amabilidad.- Y dejen ese feo hábito de querer lo del otro.- comenté finalmente sonando un poco molesta terminando de hablar a lo que ellos asintieron con la cabeza. Para suavizar el serio ambiente levanté el pulgar en señal de confirmación, de alguna manera logré hacerlos reír, debería ser comediante. Se despidieron una última vez, y antes de alejarse de la entrada, el castaño mayor, con Wataru en brazos, volteó para decir:

- Naomi, cuídalo mucho.- dijo dirigiéndose hacia mí con una leve sonrisa en sus labios. No afirmé ni negué nada. Solo agité levemente mi mano despidiéndolos a la vez que observaba a lo lejos cómo se alejaban mezclándose con la enorme multitud de personas de el aeropuerto.

- No les dijiste que rompimos, ¿verdad?- dije rompiendo el silencio que se había formado repentinamente entre nosotros una vez los Asahina se habían desaparecido de mi vista.

- Habrían sido un problema.- contestó aún sonriente el pelirrojo tomando su bolso de mano en su hombro para entrarnos en la puerta de embarque.

- Pues no creo que el problema aquí sean ellos. - dije con cierto veneno en mi voz mirándolo sobre mi hombro. Para después, también tomar mis cosas en mano, y caminar con él por detrás de mí.

Entregué mi pase de abordar a alguien del personal y con pesadez subí al avión en el que pasaría aproximadamente doce incómodas horas de vuelo junto a Hikaru en el asiento de a lado, agradecí internamente el haber comprado calmantes en la farmacia por que sin duda sería un viaje largo.

¿La novia de Hikaru? [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora