Despersonalización

capitulo 5: Condicionamiento

Capitulo larguito, los próximos volverán a ser pequeños, o al menos la mayoría de ellos. CONTINENTE ESCENAS QUE NO SALÍAN EN LA PRIMERA VERSIÓN.

advertencia: capitulo cruel, saquen sus pañuelos desechables de su preferencia. También pueden ser un punch tendrán ganas de golpear algo.

 Capítulo 5

Condicionamiento.

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─ ¿Lo conseguiste?

─Sí, tengo lo que buscábamos.

─ ¿Cuántos?

─Sólo uno.

─Sera suficiente, los experimentos, la inestabilidad temporal, ¿sobrevivirá?

─Tengo a la criatura idónea, una lástima que la máquina se haya destruido y sea sólo él, pero quizá podamos replicarlo, aun así, resistirá, no es como los otros, conseguí un ser especial, muy especial.

El científico extendió los brazos en los cuales llevaba un pequeño bulto, un bebe de apenas un par de meses de nacido.

─Muy bien. Lo usaremos para conseguir nuestros propósitos, con esta materia prima forjaremos un arma ideal.

La única científica del grupo sintió un pequeño resquemor de lastima al ver a la criatura, era un bebe, y saber el destino que le deparaba. Ella era una mujer cruel, fría, calculadora, pero aun así no pudo evitar sentir pena por el pequeño y lo que sería su vida, no más bien es que sabía que al momento de traerlo le habían robado su vida.

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¿Y él es?

─El capitán Hydra.

Esa respuesta dejó impactado al castaño. Estuvo a punto de desmayarse o quizá de tener un nuevo ataque de pánico, no estaba entendiendo nada, no sabia si quiera que debía preguntar, como debía portarse. Echarse a correr, atacarlo, ponerse a la defensiva o solo quedarse quieto, quizá ponerse a llorar, realmente no sabía. Pero el rubio parecido notar todos esos cambios y simplemente le sonrió tiernamente, levanto la mano y la coloco sobre su cabeza y le acaricio suavemente como si acariciara a un gatito.

─No temas, no te haré daño, nunca te lastimaría. Tranquilo.

─ ¿Tú...?

─Somos dos en uno, el Stephen que vez ahora, él que habla contigo, y hay otro dentro de mí, ese otro es el capitán hydra, es un asesino, es temible, pero aunque él es cruel, a Tony jamás le haría daño, él es una bestia, es un monstruo y Stephen, no puede contenerlo siempre, pero él pertenece a Tony, al igual que Stephen lo hace. No temas, no eres prisionero, no te haré daño, puedes marcharte cuando lo desees, no tienes que huir porque no estas preso, Tony es libre siempre, debe serlo. Pero no estás en prisión, estas en casa y a salvo, asi que no temas, tranquilo.

En ningún momento su tono sonó alterado o con enojo, pero si tenía un matiz de miedo, miedo a asustarlo, a perderlo, pero a la par solo era un tono calmado y suave, reconfortante. De pronto el sintió que en efecto podía relajarse y que estaba a salvo, quizá fuera esa voz o esa mirada o las caricias suaves que recibía.

─Hay mucho que tienes que decirme.

─Todo a su tiempo.

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