Capítulo 9: Consecuencias

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Capítulo 9

Consecuencias

Stephen había seguido frecuentando a Tony en varias ocasiones, pero sin concretar la misión. Cosa que le acarreo problemas, constantes reprimendas y castigos, pero a él no parecía importarle. Estaba acostumbrado a eso, así que ¿por qué no hacerlo?, esta vez, al menos valdría la pena, y su pequeño Tony valía la pena.

─ ¿Qué está pasando Stephen? Llevas más de un mes con eso y nada. Cumple ya la misión.

Le había gruñido el general Schmid, con su tono más amenazante. Él simplemente se encogió de hombros y respondió.

─No estoy interesado.

─ ¿Cómo te atreves? Eres sólo un arma y se te ha dado una misión. Masacra a los Stark.

─No. Bueno Her Shcmid, me voy, tengo una misión.

El hombre le detuvo tomándolo del brazo. Estaba realmente enfadado y confundido a la par. Stephen nunca había actuado así, el chico era el mejor arma de Hydra, siempre eficiente y veloz. Obediente, sumiso ante ellos, pero ahora actuaba con una rebeldía que no alcanzaba a comprender, ni en su etapa adolescente se portó de esa forma.

─Hare que te castiguen, te fustigaran toda la tarde por esto.

─Sí aha, como si no lo hicieran siempre, es de rutina.

Dijo soltándose y avanzando, cráneo rojo enfureció y le cortó el paso nuevamente.

─Hablare con el barón para que te dé un reacondicionamiento.

─Ya, dígale, me voy, tengo un trabajo.

Sin más se lo quitó de encima y se alejó. Cráneo rojo estaba atónito, pero se encargaría de que el chico recibiera la justa lección por su desacato. No podían tolerar esa actitud.

Por su parte el rubio sabía que su comportamiento le acarearía una buena dosis de castigos, pero la satisfacción que sintió al ver rabiar a uno de los líderes, no tenía precio y él estaba acostumbrado al dolor. Daba igual no importaba si le dejaban horas o días en el cuarto frio, su cuerpo ya estaba adaptado a eso, sus pulmones resistían bien respirar hielo, su piel había superado la hipotermia. No le importaba si lo baleaban, total ya casi ni sentía los impactos, no le importaba si lo azotaban toda la tarde como prometió el líder, sanaba rápido y el dolor, el dolor era solo un estado mental, en parte había aprendido a dejarse ir un momento y dejar su cuerpo, un cascaron vacío durante las torturas. Su mente divagaba en los programas de condicionamiento en los que estaba, su alma se iba a su lado animal y volvía después, cuando ya el dolor menguaba cuando, su cuerpo estaba en proceso curativo.

Tomo sus armas y se preparó para su misión, el que se le asigno fue su pequeño e inocente .Tony, él se lo pidió, bueno que salvara a los niños, que ayudara, se lo pidió a su héroe, pero él no era eso, era un psicópata asesino, arma de hydra, haría lo que le pidieron, pero sus métodos, no serían del agrado del chico, pero él no tenía por qué saberlo, además el fin justificaba los medios. Cumpliría y los niños estarán a salvo.

Entro a la estancia y diviso a los sujetos. Noto que estaban jugando al póker y bebiendo, estaban tan distraídos, tan confiados, fue fácil atacar. Una de sus cuchillas voló con rapidez y se ensarto en el cuerpo de uno de los sujetos, el cual emitió un alarido de dolor, los demás le miraron atónitos por unos segundos, pues la luz se cortó dejando todo a oscuras, fue solo cuestión de segundos, un detalle para infundir terror, cuando la luz volvió la mitad de los sujetos habían sido cortados o mutilados, los demás miraban aterrorizados al hombre vestido de rojo y negro, cuya siniestra mirada carmesí les hizo temblar. El tipo se relamió los labios y después lamio las gotas de sangre de una de sus cuchillas, en un gesto puramente psicópata.

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