𝒯𝓊𝓉ℴ𝓇. 𝓙𝓸𝓱𝓷𝓷𝔂 𝓢𝓮𝓸.
Ella es tan inteligente y tan linda, pero ella no lo sabe. No sabe que tiene potencial para grandes cosas. Si, se queda dormida en clases perdiendo todos los apuntes, si, ha reprobado muchas materias, pero es INTELIGE...
Llevaba dos días sin comer, el estómago me rugía, me dolía. Anoche había caído rendida a mi cama, mi vida seguía el mismo curso aburrido de siempre. No me sentía tan mal, mientras no deje de beber agua voy a estar fantástica.
Las clases eran aburridas, como siempre. Aguante hasta el receso, tenía mucha hambre, me había levantado más temprano solo para que mi mamá no me viera. Cuando llegaba a casa le mentía a mi madre con un "comí algo antes de venir" tal vez ella no quedó satisfecha pero no me importaba.
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Durante el periodo de receso decidí ir a la biblioteca, en el camino me encontraba con varios grupos de alumnos, murmuraban todos sobre el mismo tema. El profesor de filosofía me miró un momento.
"Park SunHye" abrió su boca el profesor haciéndome unas señas con sus manos, me acerqué algo inseguro "quisiera que me ayudes dándole un tour a él por todo el colegio" murmuró señalado a su oficina, era un chico sumamente atractivo, sumamente serio; pude comprender a qué se debían los murmullos que resonaban por todo el pasillo. "Es nuevo" aclaró, de adentro a su oficina y ambos volvieron "ella es Park SunHye y el es Lee Taeyong" extendí mi pequeña mano hacia él y le dediqué una diminuta sonrisa. "Park te va a enseñar las instalaciones" Taeyong había agarrado mi mano, me sentía tan poca cosa a su lado, inclusive empezaba a sentirme mal por él, la chica fea con un chico atractivo, muy muy atractivo. Una vez que ambos ya habíamos avanzado y estábamos lejos del profesor, lo miré.
"Hey ¿quieres que alguien más te de el 'tour'?" Me miró extrañado
"¿Estas hablando en serio? ¿Te da vergüenza que te vean conmigo?" Su voz era grave, algo hostil.
"No... es solo que...yo..." agache la mirada y miré directo a mis manos, no entendía por qué tuve que haber pasado en el momento justo para que el maldito profesor me pidiera llevarlo por todo el colegio.
"Si no quieres no lo hagas, de cualquier modo me da igual esta escuela de mierda." No me dejó protestar, solo me quede ahí, el caminaba despreocupado, varias chicas lo miraban y cuchicheaban, ellas me miraron a mi, quise con todas mis fuerzas enterrar mi cabeza en la tierra. El chico nuevo volteó, volvió a caminar en mi dirección. "Dime donde están estas aulas" dijo mostrándome una hoja con varias cosas escritas, asentí.
De repente las piernas me empezaron a temblar, mi estómago dolía junto con la cabeza, no pude pronunciar ni una palabra, la vista se me nublaba, debía aguantar.
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