Rompiendo Las Leyes De La Sociedad

Capítulo 29 -El proximo paso-

Ya era de mañana, una fría mañana nuevamente en Reino Unido. Charlotte se había despertado temprano para bañarse y así fue. La mujer de nombre Olivia le permitió ingresar al baño mientras este estaba vacio y no habían clientes en el parador, Charlotte se tomó una abundante y estimulante ducha caliente higienizándose con sobres de Shampoo y acondicionador que había ella guardado en su maleta antes de partir a Londres. Una toalla enrrollo su cuerpo y otra en su cabello. Empezó a secarse y a ponerse una crema humectante, acto seguido, secó su cabello con el secador de Olivia.
Una vez ya terminada de cambiarse, tomó las toallas que utilizó y las colgó al lado de la casa de Olivia, también puso a lavar toda la ropa que había usado.

El ruido del lavarropas fue lo que Archie le quitó el sueño, se sentó en la cama y observó por la ventana "¿Dónde está la Srta?" Se preguntó en mente al recuperar el razonamiento por completo, suspiró mientras se estiraba para posterior levantarse de la cama.

—¿Srta?—Interrogó Archie saliendo de la habitación encontrandose con ese ruidoso lavarropas en funcionamiento.—Oh, fue eso que me despertó.

—Buen día, Archie.—Saludó Charlotte ingresando a la casa con dos vasos de café en cada mano.

—Buenos días.— saludó recibiendo el vaso de café.—Gracias.— se sentó en el sofá que había a un lado, Charlotte también se sentó.

Un silencio invadió el espacio de esa pequeña casa cuando el lavarropas finalizó su trabajo, ambos bebian café tranquilamente mientras observaban cada uno un punto fijo diferente, hasta que Charlotte lo decidió romper.

—Esta mañana me bañé en el parador.

—¿Nadie la vió?— preguntó preocupado dandose vuelta a observarla.

—No, no había nadie en el parador. —bebió café.— Olivia me prestó su secador de cabello y sus toallas.

—Srta, no se aproveche.— comentó Archie arqueando una ceja imaginando la situación.

—Ella me los ofreció, también permite que usted se bañe.—sonrió.

—No entraré a un baño de chicas nunca. —negó con asco.

—No tiene nada de malo, quizás no tiene algunas cosas que ustedes sí, solo debe ir a la ducha que hay al final de todo. —aclaró Charlotte.

—No.

—Archie, eres un sucio, hueles muy mal.—criticó tapándose la nariz finjiendo tener arcadas del asco.

—Bueno, primera y última vez.— se levantó del sillón y empezó a buscar ropa para ponerse.

—Evite que lo vean.— recordó Charlotte sin aún levantarse del sillón.

—¿Te crees que no soy precabido?— preguntó abriendo la puerta —Debe ser usted más precabida , mire si Olivia queria todo ese dinero, eh. —acto seguido salió de la casa y se dirigió al parador.

El mayor al ingresar al baño de chicas revisó cada una de las puertas viendo si encontraba algunos pies femeninos detrás , su búsqueda ha sido un éxito para el, no había rastros de una mujer en ese rosado y amplio tocador, ingresó a la ducha que en el fondo se encontraba y se quitó la ropa, abrió el grifo y dejó caer el agua de la ducha en su esbelto cuerpo, también en su piercing. Una vez ya finalizado su baño tomó una toalla y la envolvió en su cadera, agarró su ropa sucia y la metió en una bolsa para posterior lavarla.

Charlotte colgó la ropa en una parte donde Archie no lo vería ya que le provocaba lástima tener mucha ropa interior sucia. Cuando vió a Archie aproximarse se escondió entre los arbustos hasta llegar a la casa como si nada hubiera pasado.

—¿Dónde estaba?—preguntó Archie al verla entrar.

—Por ahí, tenía ganas de tomar un poco de aire. —respondió tomando una revista que había en el sillón sobre moda. —¿Dónde será nuestro proximo destino?

—Viajaremos a un país donde el matrimonio con diferencia de edad esté permitido.— respondió inconsientemente haciendo que Charlotte deje caer la revista al piso.

—¿Nos vamos a casar?— preguntó entusiasmada

—E-eh? —posó una mano en sus labios recordando lo que anteriormente había dicho.— ay no, claro que no.

—Yo lo escuché, Archie.— argumentó con sus mejillas ruborizadas.

—Bueno.— se dió vuelta avergonzado.

La joven empezó a ilusionar como sería aquel casamiento, su vestido y como caminaría al altar, mientras Archie solo esperaba y exigia que la tierra lo trague y lo escupa a otro lado.

—Sí, acepto.— decía repetidas veces Charlotte frente al espejo con una encantadora sonrisa y una toalla blanca que rodeaba su cuerpo simulando ser un vestido.

—Charlotte, no nos vamos a casar.— comentó Archie cansado de la situación.

—Ahora no, pero más tarde sí— sonrió ella dándose la vuelta.

"¿Cómo le digo que también quiero pero no en este tiempo?" Preguntaba el mayor en su mente, no quería dañar su relación pero posponer un acto de confirmación le parecía lo mejor, el tiene pensado casarse con ella en otra parte, si alguien se entera serían juzgados por la sociedad y eso sabe que a Charlotte la destruiría emocionalmente y ella se lo ha contado tiempo atrás.

¿Se casarán? si es así.. ¿en dónde? ¿Archie le propondrá matrimonio? ¿Charlotte será fuerte para aguantar criticas? ¿Cuál será su próximo destino?