Rompiendo Las Leyes De La Sociedad

Capítulo 36 -Mi amada Charlotte-

Archie cargó a Charlotte en sus brazos, ideó hacer su luna de miel en una pequeña cueva que vió a unos metros.

—Vamos a festejar, este día es especial.— sonrió Archie mirándola a sus ojos que por el hecho de su muerte se tornaron grises y opacos.

Una vez ya dentro, la sentó en el suelo y empezó a susurrarle cosas en el oído, tratándo de exitarla o mínimamente corresponder a sus elogios.

—Estás realmente muy guapa esta tarde, mi amada Charlotte— guiñó su ojo y se quitó el saco negro del smoking y también su moño que llevaba en el cuello. —No tenemos la champagne o algo en especial, pero usted tendrá mis labios, querida— sonrió y sostubo sus mejillas para posterior besarla apasionadamente.

Archie aún no captaba de que la alma de la joven había desaparecido, que su corazón había dejado de latir, que estaba besando un cádaver. Archie regresó al auto y sacó todo lo que se encontraba ahí, paquetes de snaks; una botella de agua; un anotador con un bolígrafo , un chaleco antibalas y una pistola con balas dentro.

—Mira, Charlotte— sonrió regresando a la cueva dejando las cosas que encontró en el frío y duro suelo.

Archie se sentó en frente de ella y le dio de comer galletas, le abría la boca y le partía una galleta en cuatro.

—Buen provecho, mi amada— sonrió una vez más y acto seguido comió el también una galleta.

La luna fue apareciendo de a poco en el cielo, el último rincón donde daba el sol ahora ya no está. Archie volvió a tomar a Charlotte y le propuso bailar vals aunque no llevaba un reproductor de música, bailó hasta sentir que Charlotte le hablaba pidiéndole que finalize, era obvio que era producto de Archie esas voces. Hizo caso a su favor y frenó su baile y siguió a lo más común que se puede hacer en una luna de miel.
Archie recostó a Charlotte en el suelo una vez más y empezó a desvestirla como una delicada muñeca de porzelana, su vientre , su rostro, sus pechos eran de lo más suaves y fríos. Dentro del sujetador se encontró con la brújula de oro, no pensaba que llevase eso ahí, decidió agarrarlo y dejarlo en el suelo para evitar algún daño.

—Tranquila, estará en el suelo, nadie lo agarrará— prometió Archie mientras continuaba quitándole el vestido.

Después del acto del cual Archie oía gemir a Charlotte en su mente, decidió acabar dentro de ella ya que ella esperaba tener hijos en un momento.

—Haremos tu sueño relidad, Charlotte—sonrió recostándose junto a Charlotte— yo también la amo.

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Les vengo a contar una buena noticia, he llegado a los 1k de lecturas.

Muchas gracias por leer este libro, espero que les guste la trama de la historia y cada personaje.

El próximo capítulo será el ante-último. Espérenlo. :)