Como era de esperarse, cuando todos hacían la actividad dictada Ciro me llamo para que hablara con el y supongo que por mi mala cara dedujo que no estaba de humor para sermones nuevos, por lo que no dijo nada hasta que me sente en aquella silla que el siempre tenia cerca de su escritorio
-Bella, me alegra verte de nuevo-sonrió con alegría-como has estado?
-Bien supongo-dije sin mirarlo y con indiferencia
-Me conto el director que estuviste grave, tienen que transferirte sangre?-su interés por levantar la conversación era tan desesperada que me dio pena por lo que preferí cooperar
-Si, pero no creo que sea tan grave como le contaron-le sonreí de costado y sus hermosos ojos verdes se encendieron con un brillo en especial
-Bueno, me quedo tranquilo...-un silencio incomodo se formo-que tipo de sangre eres?-la sorpresa se hizo aparecer al escuchar tal pregunta
-0 positivo-conteste confusa y ahora era su sonrisa la que se iluminaba
-Yo también soy ese tipo-me miro de una forma tierna pero mi expresión de curiosidad seguía
-Para que quería saber?-me miro a mi,luego a mis compañeros y reto a algunos que se reían
-Por nada en particular, escúchame-susurro y lo mire con atención asintiendo-tienes algo que hacer este fin de semana?-y ahí fue cuando mi plan de descansar de todo y todos se arruino por completo.Pense en decirle que estaba ocupada pero por alguna extraña razon en mi interior no queria mentirle y menos con el queriendome ayudar
-Por ahora no tengo nada, porque?-era muy idiota mi pregunta pero nunca esta de mas
-El domingo te invito a una ida al campo, te parece?-lo mire dudando-no te preocupes Bella, esta vez nadie se enterara de nuestro encuentro, lo prometo-levanto su dedo pequeño para hacer la seña de la garrita y mi una pequeña risita se escapo de mis labios sin previo aviso
-Esta bien-cerré el trato y el volvió a sonreír
-Eres tan bonita cuando sonríes-dijo mirándome y me zafe de su agarre nerviosamente levantándome de la silla en donde me encontraba
-Tengo que volver con mis amigas-el asintió diciendo algo que no llegue a escuchar al caminar rápido por los pequeños pasillos que se formaban con los espacios de banco en banco. Gustina me miro entendiendo mi nerviosismo y le hice una seña de que teníamos que hablar mas tarde.Cuando las clases terminaron Gustin me acompaño hasta mi casa y fui contandole todo lo del profesor y junto a ello mis nervios complotados con miedo
-Tenes que decirle a Nicanor-dijo despues de largos minutos razonando la situacion
-Si puede ser,pero como le digo sin que me grite o se enoje?-ella me miro pensando y despues se volvio a callar por varios minutos mas
-Explicale la situacion y si el tiene confianza en vos lo va a entender-en eso tenia razon,pero no sabia cual era el grado de confianza que el me tendria a mi
-Tal vez sea mejor que ni le comente el tema hasta despues de la vuelta-ella me miro con afirmacion y nos detuvimos en la entrada de mi casa,no podia invitarla porque para ser lunes tenia todas mis tareas asignadas y minuto que perdia era tiempo que me autodescontaba y eso era para causar nada mas que mas problemas de los que trataba de safarme lo mas posible
Cuando termine de estudiar las primeras 3 materias ya eran las 16:30 y tenia que encontrarme con Maria en el centro de la ciudad para comprar pequeñas cosas que le habian falta tanto a ella como a su bebe,agarre mi celular,tome las llaves y empece a caminar hasta encontrar un taxi ya que el tiempo corria y no avanzaba muy fuerte debido a mis problemas con falta de nutrientes y sangre.Me maldeci por ser tan idiota pero sin ningun motivo me frene hasta toparme con ella,cuando volteo pude notar su hermoso vientre,perfecto y redondo en donde estaba en pequeño Ryan
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Apareciste tu..
Подростковая литератураUna triste sonrisa se hace notar más que la sonrisa mas feliz de mundo