Apareciste tu..

Duele solo finguir

Cada mañana me levantaba peor, mis cortes me hacían vulnerables y me hacían perder fuerzas pero eso no me paraba en absoluto. No sentía que nadie era tan confiable como para contarle así que siguió siendo un secreto con mi reflejo 

Un día note que estaba empeorando por lo que me vi obligada a tomar unas pastillas que me aliviaran un supuesto 'dolor de cabeza' y fui al colegio sintiéndome mejor que cuando me levanté pero no duró mucho 

*estaba con mis amigas cuando decidieron ir al baño*- no quiero ir, las espero aquí-sonreí débil porque sabía que no tenía fuerzas para pararme

-no no, vamos no seas vaga

-no quiero, las espero 

-no, vos venís también-acto seguido mi amiga me agarra el brazo donde están mis cortadas y yo simplemente ahogo un grito- que paso?-me miro espantada

-no nada-me zafe de su agarre-me apretaste de más-solté la risa más falsa de mundo y me dejaron ahí después de pedirle que fuera de nuevo 

Los días pasaban y sabía que ellas sospechaban algo pero no me lo dirían, yo solo usaba camperas o remeras largas de manga para que no notarán nada excusándome de tener frío cuando hacían 27 grados.. Todo iba bien hasta me volvían a agarrar de brazo y mi dolor renacía por más que esa noche anterior me haya cortado o no. Pero no todo es perfecto y digo esto porque un día mis amigas volvieron a cometer el acto dejando que sin querer me vean el grupo de las zorras (las que cometían las llamadas que me destruían) estas se me acercaron y..

-hola linda- su falsedad se notaba a km a la redonda-como estas?

-bien-ni las mire, sus sonrisas serían una cortada más-que quieren ?

-nada sólo hablar contigo, que seamos amigas como antes-me agarraron el brazo y yo solo espere por el por dolor de mi vida- veni vamos al patio-su mano era una garra sobre mis heridas y apretaba más fuerte con cada paso

*mis lágrimas empezaban a salir cuando me ya estábamos llegando*- para que tenemos que seguir?- ya habíamos recorrido todo el puto patio 

-porque nosotras nos sentamos donde hay poco y mucho sol, entendes?-sonreían con cada paso ellas sabían lo que hacían 

-ah, claro, es lógico - mi sarcasmo era igual de notorio que su falsedad 

-nos quedemos aca, sentate- me senté pero todavía tenían mi brazo es las garras de una

-me soltas? no me voy a escapar-hice una mueca y me soltaron disculpándose. Cuando lo hicieron note el brazo húmedo de nuevo no entendía muy bien lo que pasaba así que mientras ellas hablaban sus boludeces yo controlaba que era dicha humedad