Tú fuiste el culpable

Cuarta parte

Maricela me miro preocupada, una vez que Eak y ella estaban completamente de pie se acercaron a mi, Eak me acompañó hacia adentro de la casa mientras Raúl su padre junto a su hermana y algunos familiares intentaban calmar a Eleonor.

-yo...lo siento carnal, mi jefa..., mi jefa aun se altera por esto... es por eso que no la viste en toda la tarde hasta ahora- dijo Eak algo avergonzado.

-no te preocupes por eso- emboze una sonrisa para que el ambiente cambiara un poco, me acerque a Eak, tome con ambas manos su rostro y bese aquella mejilla roja por la cachetada de hace un momento. -¿aún te duele?- al no recibir respuesta lo abrace con fuerza, Eak siempre ha sido muy valiente y para él sería imperdonable verlo llorar, sin embargo, no se contuvo y logre percibir unas lágrimas mojar mi ropa. -tranquilo, no pasara nada, ya veras... que tu madre recapacitara-

-¡es que wey! Mi jefa es mas terca que una mula, no lo va a entender- respondió una vez separándose de mi.

-entonces ¿cómo es que hicieron esta fiesta sin que ella se molestara?-

-le dijimos que había ganado nuestro equipo y que celebrariamos, y pus como a ella le castran estas cosas creímos que podíamos estar tranquilos... pero todo se salio de control...

-carnal nuestra señora madre ya esta mejor, pero...- Maricela había entrado a donde nos encontrábamos, un poco desanimada. -me pidió que los acompañara a la salida-

-¿qué paso wey?-

-pues que nuestra jefa esta súper alterada, ya nuestra tía Chona la esta calmando y nuestro padre esta a su lado un poco, no se, como achicopalatado-

-ya veo...- Eak inclino la mirada y me tomo de la mano. -dile a nuestra jefa que yo llegare mañana temprano, que no se preocupe por mi, no quiero hacerle pasar mas corajes...- dicho esto me sujeto con mayor fuerza y finalmente salimos de su casa.

-Eak ¿qué haces? ¿Qué piensas hacer?-

-¿no es obvio carnal? Quiero pasar aún mas tiempo contigo, no importa el mal rato que pasamos hace un momento, yo no te dejare ir solo a tú cantón como perro callejero, además...hoy me quedare contigo-

-¿qué? ¿Es enserio? Pero mi casa esta...esta hecha un caos-

-no importa, te quiero demostrar que a pesar de todos los pinche baches del camino tú me importas y mucho-

Aquellas palabras hacían latir mi corazón, de cierta forma me preocupaba lo que fuera a pasar con él y su madre, pero a la vez también me ponía de puntas saber que Eak estaría esta noche en mi casa, una vez llegando saque las llaves y abrí, encendí las luces y se lograba persibir en la sala un tiradero de libros, revistas, hojas y libretas, entre primero y comencé a recogerlas.

-¿qué es todo este desmadre carnal?- Eak se acercó también a recoger algunas cosas.

-son solo cosas que me gusta estudiar, yo quiero entrar a una universidad donde...donde pueda cumplir un sueño que quiero alcanzar-

Eak tomo una de las revistas y comenzó a leerla. -¿Tonna Newman Trhap? Esta doctora tiene el mismo apellido que tú-

-ella...ella es mi madre-

-¡a cabrón! Nunca me habías contado de ella, mas que...bueno tú sabes-

-si, lo sé, no te preocupes, es solo que me gusta leer algunos de sus trabajos, ella antes de conocer a mi padre fue una gran doctora reconocida, pero una vez que se junto con mi padre ella...decidió dejar su vida de lujos y comodidades para poder estar a su lado, ella fue fuertemente criticada por dejar su carrera como doctora en uno de los laboratorios mas famosos, dejar su empleo, sus lujos, todo, pero ella vio en mi padre no solo un hombre que cobra por curar y sanar una vida, ella vio en él la bondad y el amor, esa pasión con la que ayudaba a aquellos animales a sobrevivir tras la crueldad de los hombres...pero ahora, ellos dos están perdidos, yo aún mantengo la esperanza de que sigan con vida, pero...no se que pensar a veces, ya han pasado mas de 10 años, por eso ahora quiero esforzarme como mis padres lo hicieron para poder convertirme en unos de los mejores rescatistas y poder ayudar a aquellos que mis padres cuidaban con el corazón- Dije una vez acomodando todos los libros en un estante cercano.

-¡eso si que es tener huevos, bueno ovarios y de los grandes!- dijo entusiasmado Eak. -mira que enfrentar a todos, solo por defender su propia vida, si que es algo admirable-

Antes de poder voltear, sentí un agarre en mi cintura, la diferencia de estaturas no era muy notable o al menos yo no la sentía, pero una vez sentí su cuerpo pegado al mio una sensación eléctrica recorrió mis sentidos.

-y su morrito no se queda atrás- susurro una vez que tome sus manos para poder girarme y abrazarle.

-Eak...tu dormiras en mi cama esta noche yo usare el sillón, esperó y no te moleste-

-pinshe Town, tú si que no eres mas puro que el mismísimo Papá por que de veras no eres monje- río al soltarme. -pero bueno, si eso es lo que quieres, pus no me quejo, después de todo este es tu cantón, yo soy el gorrón esta noche-

-no, Eak, no digas eso, tú eres bienvenido a esta casa cuando gustes-

Eak solo se limitó a reír, una vez que yo baje unas cobijas para que pudiera dormir en el sillón Eak subió a mi habitación, apagamos las luces y nos dispusimos a dormir, sin embargo, cuando comenzaba a conciliar el sueño algo pesado se encimo en mi.

-¿qué pasa?- dije al moverme un poco.

-tranquilo, simplemente no podía dormir- susurro la peculiar voz de Eak, este simplemente se acomodo en aquel estrecho espacio por lo que quedamos en posición de cuchara, Eak abrazo mi espalda y hundía su nariz en ella, como si se estuviera acurrucando. -ahora si, buenas noches- no tardo mucho en decir eso, cuando al poco rato comenzó a oírse unos ligeros ronquidos, la verdad estaba muy nervioso el tenerlo en una posición tan pegado a mi cuerpo, el sentir su respiración, su cálido cuerpo y todo me hacia sentir nervioso, esa noche no logre dormir para nada.

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Espero y lo disfruten ^^

Y por cierto XD los nombres originales de Eak y Towntrap no significan eso jaja solo me lo saque de la manga por que no recordaba que significaban jaja.