Tú fuiste el culpable

Quinta parte

La tensión por tener a Eak era demasiada para mi, tome su brazo y lo alze con cuidado, comenca a escabullirme de su agarre sin despertarlo y una vez que lo consegui lo arrope más, realmente me emociona tanto tenerlo a mi lado, es algo que simplemente no puedo explicar, pero no importaba la felicidad que sientiera al tenerlo a mi lado, Eleonor no aceptaba que su hijo estuviera conmigo.
Decidí arreglar las cosas de alguna forma, no se como terminarian, pero al final decidi que yo haria cambiar o al menos trataria de hacer que Eleonor aceptara a Eak a pesar de todo, rapidamente me vestí y con cuidado salí de la casa, dejando una nota en la mesita de la sala, bajo un plato con pan, donde escribi una breve nota para cuando Eak deserpertara:

«Eak no estare en casa, he decidido regresar a la tuya y arreglar las cosas con tú madre, no te preocupes por mí, prometo no ser descortés con tú madre, solo quiero hacerla ver que aquello que sentimos no le hara mal a nadie.

Towntrap.

P.D disculpa que no te allá preparado algo mejor, pero en mi casa no tenia nada de carne para prepararte para cuando despertaras»

Eran apenas las 8 de la mañana, un poco nervioso toque el timbre de aquella casa, hasta que Maricela abrio la puerta.

-Buenos dias, crees que...¿qué se encontrara tú madre?-

-jijos, creí que mi hermano y tú estarían poniendole Gorge al niño- dijo burlonamente.

Me encontraba algo confundido al escucharla, aún habia algunas terminaciones que no conocia de la familia de Eak, Maricela al ver que no comprendia solo río para luego dejarme pasar.

-mi jefa se encuentra en la sala, es aquí todo derecho a la izquierda- señalo con una de sus manos un pasillo.

-gracias-

-no hay de que cuñis, solo que con cuidado que mi jefa esta que se la lleva el diablo- Maricela dio media vuelta y se dirigio a otra habitación.

Comence a caminar por aquel pasillo, las manos comenzaban a sudarme y un sudor frío comenzo a cubrir mi frente, realmente queria ayudar a Eak, pero una sensación de peligro me dicia que diera marcha atrás, perdido en mis pensamientos una voz interrumpio mi trance.

-¿tú que demonios haces aquí? ¿Y dónde esta Eak?- decia Eleonor sin mirarme directamente, ella se encontraba en la sala leyendo un libro, para ser apenas las 8 de la mañana ya se veia arreglada y maquillada.

-yo...este, queria hablar con usted- me arme de valor al entrar a aquella habitación.

-tú y yo no tenemos nada de que hablar, solo dile a Eak que lo quiero de regreso cuanto antes y que de una vez se valla olvidando de ti y lo mismo va para ti-

-¡no señora!- alze la voz y me acerque aun más a ella. -yo he venido aquí a decirle que tanto Eak como yo nos amamos de verdad y ni usted ni nadie podrá separarnos.

Eleonor cerro aquel libro que estaba leyendo, se levanto del sofá y comenzo a acercarse, aquellos tacones que usaba hacian resonar el suelo a cada paso, eso me ponía aún mas nervioso, pero yo no iba a ceder tan rápido y menos si perder a Eak estaba en aquella posibilidad.

-mira niño, Eak es mi hijo, y yo estoy dispuesta a hacer lo que sea por él, y si digo que tú eres dañino para él, es por que lo eres, si tanto amas a mi hijo, ¡alejate de él!- su voz resonaba con tanta seguridad que senti que en cualquier momento podrian fallarme las rodillas y caer por el miedo.

-lo siento señora, pero Eak y yo nos queremos como no tiene idea y yo... yo estare dispuesto a hacerlo feliz cueste lo que cueste-

Eleonor solo hecho una carcajada al escucharme, después me miro con aquellos ojos miel para contemplarme de arriba a abajo y dirigirse a la salida.
-si me disculpas, debo ir a una reunión, debo recordarte que tú visita no es bienvenida en esta casa, asi que espero que tú estancia aquí sea breve- una vez terminada aquella frase Eleonor se marcho, sentí un nudo en la garganta, unas inmensas ganas de llorar y una gran impotencia al verla marchar y yo sin solucionar nada aún, deje caer mi cuerpo en uno de los sillones de la sala, cuando entra un gato siames a la habitación

-hola amiguito, ¿a caso Eak tenia un gato?- aquel gato se acerco a mi y dejo que lo acariciara, en su collar pude leer un nombre "Taco", me mofe al leer aquello, sin duda ese gato era de Eak, una vez aquel gato se alejo de mi se dirigio al sillón donde Eleonor habia dejado su libro, tirandolo por accidente, me levante a recogerlo, pero al tenerlo en mis manos me di cuenta de que no era un libro, sino mas bien un diario, incluso yo se que leer un diario ageno estaba mal, pero... pero si lo leyera quizás encontraria su mayor disgusto y podría arreglar las cosas, después de todo las cosas aún no estaban perdidas del todo, una pequeña gota de esperanza ilumino mis ojos, quizás esta en mi unica oportunidad, tome aquel pequeño libro, lo guarde debajo de mi camisa y me dirigi a la salida, me sentia culpable en todos los aspectos, pero...pero esto era por Eak.

★†★†★†★†★†★†★†★†★†★†★†

Esta recién salido del horno jaja se que no es tan melosa esta historia jaja pero deben admitir que parece novela de Televisa XD jaja igual espero y la disfruten.