Veintiuno.

1.2K 121 19
                                    


Darcy finalmente cumplió su amenaza y a primera hora de la mañana se fue a Manchester, aunque nerviosa y sin dejar de mirar a todos lados de la estación, esperaba ver correr a Niall para detenerla pero eso nunca ocurrió.

Darcy finalmente cumplió su amenaza y a primera hora de la mañana se fue a Manchester, aunque nerviosa y sin dejar de mirar a todos lados de la estación, esperaba ver correr a Niall para detenerla pero eso nunca ocurrió

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El rubio omega estaba en su casa, sentado en su cama y listo para irse a trabajar a la explotación, aunque a pesar de que le encantaba su trabajo, estaba tan triste que ni siquiera tenía ganas.

Perder a Darcy era para Niall, tan duro como haber perdido a su padre, porque así como un día él se murió llevándose su amor consigo, la alfa se había ido y llevado su corazón, el omega se sentía muerto en vida sin ella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Perder a Darcy era para Niall, tan duro como haber perdido a su padre, porque así como un día él se murió llevándose su amor consigo, la alfa se había ido y llevado su corazón, el omega se sentía muerto en vida sin ella.

También Harry y Louis se habían quedado enormemente tristes pues volvían a despedir a su hija en la estación, cuando tras terminar su último año en el colegio de Oxford, creyeron no tener que volver a hacerlo.

También Harry y Louis se habían quedado enormemente tristes pues volvían a despedir a su hija en la estación, cuando tras terminar su último año en el colegio de Oxford, creyeron no tener que volver a hacerlo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La chica les había dicho que no sabía cuanto estaría fuera, ni si finalmente volvería para el nacimiento de su hermano, el cual aún faltaban seis meses.

Louis y Harry sabían perfectamente que su hija solo estaba huyendo pero confiaban en que la sensatez volviese a su linda cabecita y recapacitase sobre su futuro.

En Manchester sus padrinos la esperaban en la estación de tren, ansiosos pero también muy preocupados pues sabían que su ahijada era muy especial y a pesar de que se habían ocupado de ella cuando era una niña, mientras Ed había estado hospitalizado y también tras su muerte, ahora ya era toda una mujer.

55. Esperando a mi omega-Cuarta parte-L.S.-Omegaverse. TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora