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Ranitas se acuerdan que les dije que trabajaría en el smut? Bueno. Disfruten, bye.

Sus labios eran suaves y gruesos, su tacto era como la porcelana y su sabor era una mezcla entre chocolate y menta. Seguramente antes de salir de casa se había lavado los dientes.  Y como que me llamo Harry que seguramente se había comido algo por ahí.

-¡Oh por Dios! -Escuché los gritos y risas de mamá, Gemma y Linda detrás de nosotros e inmediatamente nos separamos.

Mire a las tres féminas con una sonrisa, Linda cubría su boca con una mano, Gemma tenía su celular en la mano y una sonrisa gigante en el rostro, seguramente nos había sacado alguna foto. Y mamá estaba a punto de llorar por tercera vez en el día por lo que se abanicaba con su mano derecha intentando apaciguar las lágrimas que venían, digamos que Anne era algo sentimental.

-Hola, vida.-La miré de nuevo y sus ojos también estaban cristalizados.
-Hola -Hizo pucheros y yo sonreí y la volví a besar muchas veces más, besos pequeñitos pero con mucho amor.
-¿Por qué esa carita?
-Porque hoy es el día más feliz que he tenido en años. -Me sujeto por ambos lados de la cara y luego pasó ambos brazos por detrás de mi cuello para abrazarme mientras que yo la sujete por la cintura, ahora que llevaba sandalias altas estábamos a la misma altura.
-Te felicito, mi doctora hermosa. Estoy muy orgulloso de ti. -Besé su mejilla un par de veces más y luego la solté. Entonces se me quedó mirando un par de segundos y comenzó a golpearme.
-¡Ah, vida!
-¿Por qué demonios no me contestabas? -Otro golpe.
-Mi amor porque te iba a dar una sorpresa, ¿ves? -Alcé los brazos y sonreí pero lo único que recibí fue un golpe en las costillas con su mano abierta.
-¡Amor, basta! -No podía parar de reír y entonces pude ver su sonrisa de nuevo y quise llorar de la felicidad, no literalmente claro.
-Estás tan hermosa.- Me acerqué un poco más y susurré en su oído.- Tan jodidamente caliente en ese vestido.
-¡Harry! -Fue su turno de acercarse a mi oído.- solamente por y para ti. -Rozó el lóbulo de mi oreja con sus labios y seguido  besó detrás de la misma con tal lentitud que pude sentir cada vello de mi cuerpo erizarse.

Dios, ¡¿por qué?! Sonrió de nuevo como si lo que acababa de hacer no fue absolutamente erótico y me jaló de la mano hasta encontrarnos con nuestras familias que estaban ahora reunidas.

-Se ven tan hermosos.- Mamá se puso de puntillas para abrazarnos a ambos y respectivamente besar la mejilla de cada uno. -Yo siempre lo supe cariño, siempre supe que terminarían juntos. -Paula sonrió y mamá me apretó la mejilla izquierda.

-Styles. -La voz de Robert sonó más fuerte y ruda de lo que norlmalmente era. Miró nuestras manos juntas y luego directamente a mis ojos, subió el mentón y su expresión estaba tan seria que sentí que iba a matarme en cualquier momento. -Se trata de mi bebé y no quiero saber que le hagas daño porqu... -Linda colocó una mano sobre su hombro y lo miró con una pequeña sonrisa, entonces suavizó sus facciones y continuó hablando. -Merecen ser felices. Tienen mi aprobación.  -Paula se soltó al instante y los abrazó a ambos.
-Los amo tanto. A ustedes, a Phoebe, a Gemma... Gracias.

Seguido de eso llegaron las felicitaciones por parte de nuestros familiares, abrazos, incluso alguna que otra burla se hizo presente. Llegamos a lo que era la celebración y por petición mía ni Paula ni yo ingerimos una sola gota de alcohol.

-HUELE COMO ME GUSTA, ME BESA COMO ME GUSTA, ME AGARRA COMO ME GUSTA, SIGUE ASÍ QUÉ A MÍ ME GUSTA COMO MUERDE LA FRUTA -Paula cantaba y movía sus caderas al ritmo de J-Lo y yo la verdad no era ni remotamente bueno bailando ningún ritmo así que me limitaba a tratar de seguir el ritmo y sujetarla de las caderas para que no se me pegara demasiado, no quería que causará un problema en mis pantalones que ya de por sí estaban algo apretados desde que la vi con ese jodido vestido.

Best Friends; h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora