Capítulo 9

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Carmen PDV*

Vaaale sí... Aida tenía razón... Harry no me había dejado pero es que es tan adorable que el miedo a perderlo se había apoderado de mí. 

Después de todo incluso se quedaban a dormir con nosotras... Nuestros chicos son increíbles. Después de que Liam se llevara a Aida a nuestra habitación lo más rápido posible para evitar las bromas de Harry, él y yo nos quedamos solos en el salón. 

-¿Te importa si me quedo en bóxers? No, ¿verdad? -Me dice Harry mientras ya se estaba quitando la camiseta.

-No, tengo un hermano y estoy muy acostumbrada a verlo por ahí merodeando en bóxers. -Nos reímos. Vale, yo llevaba una camiseta de tirantes y unos shorts tipo coulotte... Pero él estaba en bóxers y no nos engañemos... No puedo comparar a mi hermano con mi novio, no es lo mismo... Me sonrojé y sonreí ante ésta idea.

-Harry... ¿Cómo vamos a dormir los dos en este sofá? Además no hay ni mantas ni nada. -Me había dado cuenta de que el sofá no es muy ancho para que quepamos los dos echados y además con las prisas de Liam por irse a la habitación no pudimos coger mantas...

-Pues así. -Se acercó a mi para cogerme en brazos mientras yo me agarraba a su cuello sonriéndole. Me tumbó en el sofá, se echó justo a mi lado y me rodeó con su brazó atrayéndome hacia él hasta que no quedara espacio. 

-¿Ves? Así incluso sobra sitio y si me abrazas no harán falta mantas. -Me miró con una sonrisa de las suyas. Me abracé a él, me encantaba sentir sus latidos y su respiración.

-Me encantas Harry. -Le di un beso en el cuello, porque no llegaba a la cara al estar tan apretujados y vi cómo se le erizaba la piel lo que hizo que me riera.

-Es que... El cuello es mi punto débil... -Se sonrojó y yo me reí aún más. Espero que no descubra que el mío también lo es...- Por cierto, no te vuelvas a preocupar por lo de Caroline, sabes que ahora lo único que me importa eres tú y no quiero verte mal por eso, ¿vale? Y recuerda que siempre estaré contigo. -Al decir ésto último me abrazó con más fuerza.

-Te quiero Harry. -Alcé la cabeza para encontrarme con su cara. Él me estaba sonriendo y bajó la cabeza hasta que nuestros labios se encontraron. Perfectamente encajados, rozando nuestras lenguas mientras que él jugaba con mi melena y yo le acariciaba la espalda. Durante el beso ambos sonreíamos porque a él se le erizaba la piel a causa de mis caricias en su espalda.

Seguí dibujandole garabatos con el dedo en su espalda y con ésto llego a dormirse, cuando me di cuenta simplemente me bastó con concentrarme en sus latidos para quedarme dormida.

Aida PDV*

 Me desperté, serían las 12:00... ¿LAS 12:00? Vaya, es tarde, pero teniendo en cuenta de que nos dormimos a las 6:00 no es nada... Todavía seguía apoyada en el pecho de Liam, así que levanté la cabeza y vi que aún dormía. Me levanté sin hacer ruido para ir a vestirme, pero antes de salir de la habitación le di un suave beso a Liam en la mejilla para no despertarlo. Fui a vestirme al baño, no quería molestar a Liam y no pude evitar mirar al sofá... Harry y Carmen estaban tan abrazados que no había ni un mísero centímetro entre ellos, Carmen estaba dándole la espalda al respaldo, apoyada sobre la parte izquierda de su cuerpo, su mano izquierda estaba en el pecho de Harry y la otra en su espalda; Harry tenía su mano derecha en la mejilla de Carmen y la otra en su cuello, enredada en su melena. Se veían tan adorables... Sonreí ante la escena y me fui al baño a vestirme y a arreglarme, hoy decidí ponerme una falda blanca con una camiseta de color azul marino metida por dentro acompañado de unas sandalias. Iba a disponerme a salir y vi a alguien dirigirse hacia aquí, era Liam que ya venía abrochándose la camisa.

Dime que me quieresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora