Dime que me quieres

Capítulo 18

AIDA PDV*

Estábamos tomando algo sentados en el sofá de la suit cuando sonó mi móvil.

-Ay, no dejan a una descansar - Me levanté a por él y ni siquiera miré quien era, sólo contesté.

-¿Diga?

-¿Aida? - Inmediatamente supe quien era.

-Dígame profesor ¿Llama por la beca?

-En realidad no... Mire mañana tendrán que coger el primer vuelo de la mañana.

Aquello me dejó super descolocada, no sabía que decir... ¿Nos íbamos mañana sin saber si volveríamos? No, no, no, no...

-¿Señorita?

-Pero ¿Y las becas?- Digo algo nerviosa, bueno algo no, muy nerviosa.

-Todavía no se nada, lo siento mucho de verdad, tampoco puedo presionarles mucho, pero le prometo que en cuanto sepa algo, se lo diré.

-Pero profesor...

-Lo siento, tienen que volver mañana, es lo que hay Aida.

-Bien de acuerdo...- Dije con un notable nudo en la garganta.

-Le informaré cuando pueda, hasta luego.

-Hasta luego...

Colgué sin poder creérmelo aún ¿Estaba pasando ésto de verdad? No, no podíamos irnos mañana temprano sin saber si volveríamos a verles, a sentirlos cerca, a oir sus "te quiero", sin saber si volvería a sentir esas mariposas en el estómago cada vez que tenía a Liam cerca o me llamaba "Pequeña", no por favor, tiene que ser un sueño...

-Aida ¿Quién era?- La voz de Carmen me sacó de mis pensamientos, la miré aún en shock, Liam y Harry a su lado también esperaban una respuesta así que intenté que las palabras salieran de mi garganta.

-Era... El profesor, dice que mañana cojamos el primer vuelo de la mañana, nos tenemos que ir.

Los tres se quedaron mirándome sin saber que decir, se habían quedado con la boca abierta, está claro que eso no se lo esperaban, al menos no aún.

-¿Y las becas?- Pregunta Carmen en un susurro

-Aún no saben nada...- Nada mas que lo dije Carmen desapareció de allí y Harry tras ella, mientras sentiamos la puerta de la suit, se habían ido.

Sentí que me mareaba y que el brazo de Liam me agarraba de la cintura mientras me sentaba suavemente en el sofá y él conmigo. No me di cuenta de que lloraba hasta que las lágrimas me impedían ver a mi alrededor.

-Aida, Aida... Vamos tranquilízalate- Me dijo Liam a la vez que me besaba el pelo

-¿Cómo quieres que me tranquilice si mañana dejaré de verte hasta no se sabe cuándo?

-Tu tranquila, que fijo que os conceden la beca- Me dice Liam mientras me apoya la cabeza en su hombro.

-¿Pero y si no nos la conceden? Mañana nos vamos sin saber si volveremos.

-Si no os la conceden, ten por seguro que ésto no acaba aquí, ni mañana- Ese momento pican a la puerta.

-¡Adelante!- Grita Liam. Oimos que se abre la puerta y vemos aparecer por allí a Harry.

-Liam, podemos hablar- No era una pregunta, era una afirmación y se notaba en su tono de voz. Liam me mira.

-Vete... Tranquilo.

-Vuelvo enseguida- Me besa y se levanta, marchándose con Harry y quedando yo sóla en la habitación.

Me calmo un poco, no quiero que cuando Liam vuelva me encuentre llorando todavía. No se qué hacer para despejarme un poco, así que tomo una de las revistas que nos han dejando en la mesa que hay delante de sofá, no se cual es, es una de por aquí y tiene pinta de ser de éstas de cotilleos tipo "Cuore", siempre me han divertido. La abro mas o menos por la mitad, y veo algo que me deja bastante sorprendida: