La vida diaria de Martín y Miguel

Heterosexual

Luego de una fiesta lo menos que esperas es encontrarte desnudo en una cama con tu mejor amigo al lado y con un enorme dolor en el trasero.

Aquello para Miguel era una broma de muy mal gusto, no pudo evitar maldecir cuando se paró de golpe y el dolor llegó a él burlándose de que todo era real para rematar aquello que estaba escurriendo de su entrada se lo volvía a confirmar.

–Soy heterosexual - hablo por milésima vez mientras caminaba por toda la habitación envuelto en una sábana buscando el resto de su ropa.

–Si, yo también.- respondió el argentino como si nada frotándose los mechones rubios de su cabello.

Miguel bufo rodando los ojos, no lo parecía tanto ya que el único conmocionado y haciendo drama era él.

–Tengo una posible Novia - habló colocándose sus pantalones rápidamente.

–Y yo muchas posibles novias - respondió divertido, quería reírse pero no lo demostró no cuando el pelinegro estaba al borde de un ataque.

–Esto no puede volver a suceder, solo fueron los tragos y ya está - intentó consolarse el peruano tomando su bolso y dirigiéndose a la puerta- somos heterosexuales...hay que olvidar esto - de dedico una sonrisa nerviosa al rubio para luego salir de aquel lugar.

Martín se volvió a acostar y rio divertido ante esa escena de película, mentiría si dijera que mientras Miguel se movía como loco por todo el cuarto no estuvo observando aquel grandioso trasero...Al final tal vez no fue tan malo beber tanto.

Los jadeos se volvían más leves al pasar los segundos, ambos jóvenes se encontraban sobre la cama intentando controlar sus respiraciones.

El peruano nunca pensó que tener aquel cuerpo más grande y cálido sobre sí mismo iba a ser una de las mejores sensaciones, aún sentía al argentino dentro suyo y no pudo evitar ronronear a gusto, Martín no se quedaba atrás enterrando su rostro en el cuello del de ojos dorados aspirando de su delicioso aroma.

–Tal vez no soy tan heterosexual - confesó el más bajo.

Aquello definitivamente hizo reír al de ojos verdes.

–Creéme que tenerme dentro tuyo gimiendo y suplicando por más es la cosa menos heterosexual del mundo.

Se levantó un poco y observo aquellos dorados ojos, se contagió de la sonrisa que traía esté y unió sus labios en un suave beso.

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Espero les haya gustado, cabe destacar que los cortos no tienen relación entre sí o la mayoría en su caso no.

Ay ya ni sé qué hablo 😂😂😂, bueno sin más espero tengan una grandiosa noche/día.