Aventura en el Laberinto: [Gally]

Capitulo 37

-Aceptaré la pelea, Thommy.- dijo la chica abriendo la puerta de la habitación del chico sorprendiéndolo un poco. -Les daré el código. Jugaremos la última batalla, fuego contra fuego hasta que uno consuma al otro.-

Thomas permaneció atento a ella buscando alguna pizca de algún juego mental, se sorprendió aún más al no encontrar ninguna.

-Les daré el código para ganarnos más tiempo... pero debes seguirme la corriente, ¿me entiendes?- la chica le hizo algunas señas al chica indicándole que no apartara la pistola de su bolsillo y que le siguiera la corriente en todo momento. -Es hora de ponerle fin a este juego.-

Prepararon un plan bastante elaborado para ser de último minuto, Thomas no pudo contener las ganas de preguntarle a Aria porqué había decidido cambiar de opinión, la chica tardó en contestar.

-Por un segundo la idea de poder acabar con esto, admito que fue bastante convincente... pero luego, entendí porqué había dejado de creer en la cura, no puedo permitir que más personas sufran por esas máquinas que yo cree, el estúpido Laberinto que elaboramos. ¡Nosotros mismos sufrimos cosas horribles! Y es hora de acabar esto de verdad, les haremos pagar por todas las vidas que se perdieron. Los vengaremos a todos.-

-Hablas como si tú sí tuvieras una idea de cómo conseguir la cura.- dijo Thomas pensativo ante la castaña.

-Puede que la tenga...- sonrió la chica de lado. -y definitivamente, no incluye tomar a dos sujetos y examinar su cerebro.-

La puerta se abrió repentinamente mostrando a una mujer pelirroja que les traía la comida.

-Quiero hablar con A.D Janson, ¿puedes conseguirlo para mí?- dije dirigiéndome hacia la pelirroja que se limitó a asentir para luego abandonar la habitación. -Qué empiece el fin del mundo.-

Luego de un rato un golpe en su puerta la hizo volver a la realidad, Thomas y ella compartieron una mirada cómplice, ambos sabían que desde ese instante se vida estaba en verdadero juego.

-¿Aria?- escuchó la voz de Jason del otro lado. -Me dijeron que querías verme.-

-Te daré el código, Janson.- solté rápidamente al ponerme de pie.
-Terminaremos el proyecto y conseguiremos la cura. Pero quiero algo a cambio.-

Janson pareció meditar las cosas, pero la sonrisa en su cara por la gran ambición que lo caracteriza reflejaba que estaba encantado con la situación. -¿Qué es lo que quieres? De seguro podemos negociarlo.-

-Quiero inmunidad..., y volver a dirigir las Pruebas.- propuso la chica mirando atentamente a Janson.

Janson rió por lo bajo buscando alguna pizca de diversión en el rostro de la chica, al no encontrarlo su expresión volvió a ser cortante.

-¿Qué dices? Lo tomas o lo dejas.- insistió la castaña antes de extenderle la mano para cerrar el trato confiando en que la ambición de Janson jugaría a su favor.

Luego de una larga pausa, Janson aceptó la mano extendida de la castaña.

-Siempre una chica inteligente, Aria...- dijo con una sonrisa ladeada cargada de malicia. -Sígueme, ambos tenemos trabajo.-

-¿Ambos?- cuestionó la castaña
-Thomas viene conmigo, ese es el trato.-

Janson negó. -Te prometí inmunidad a ti y el liderazgo del experimento, no hablé nada sobre Thomas... Un trato es un trato, tómalo o déjalo.-

Como odio a este sujeto.

-Ese no era al trato, Janson.- espeté nuevamente irritada.

-Entonces, comenzaremos con la operación de inmediato.- Janson levantó la maga izquierda de su bata blanca donde tenía el reloj de control.