For The Last Time- [Lutteo]

21• «celos y amor»

"¿En qué momento me enamoré de Luna Valente?"
-Matteo

––¡Sí amiga! ¡Es un amor!––mordí mi labio inferior, mientras apretaba la almohada que estaba sobre mi regazo, mientras hablaba con Nina.

––aww, estás muy enamorada, Lu.

––¡Sí Nina! Nunca había sentido esto. El otro día, cuando estaba enfermo, me pidió que tocara sus rulos.

––¿¡Matteo!? Joder, si no le deja que los toquen a nadie. Son como su tesoro. Sí los tocas, estás muerto.––ambas reimos––

––Cuando pienso en él, siento un zoológico dentro, Nina.

––Ay, amiga. Nunca te había visto así. ––sonreí inconscientemente–– Por cierto, hemos quedado con Matteo y Ryan para ir al parque de atracciones.

––Uy, ¿y te lo pidió Gaston?––dije de forma pervertida.

––No idiota. ––reímos–– En realidad, fué idea de Matteo. Y me pidió expresamente que te convenciera para venir. La verdad, se supone que le había prometido que no te lo diría, pero, merece la pena.

––Gracias amiga. Ahora me cambio y voy hacia allá. Esperadme en la puerta, ¿sí?

––Vaale.

––¿Y cómo es eso de que viene Ryan?

––No sé, Matteo se opuso, pero él dijo que quería conocerte. Y además, ver celoso a Matteo vale más que la pena.

Solté una carcajada.

––No puede estar celoso. Porque NO le gusto, Nina. Entiendelo por favor. ––bufó.

––Claro que le gustas, Luna. A ver, ¿no lo ves, o no querés ver la realidad?

––M-me tengo que ir... A duchar. Sí, eso.

(...)

––Matteo, para de golpear la bolsa, antes de estamparla contra la pared.––dijo Gaston, intentando tranquilizarme.

Estaba en nuestro pequeño gimnasio, golpeando la bolsa de boxeo. Sólo llevaba los típicos pantalones cortos y los guantes.

Mi pelo estaba húmedo por el sudor, ya que llevaba tiempo golpeándola. Y mi pecho estaba de igual forma.

––No joder ––la lancé con fuerza–– primero el hijo de puta de Simón va detrás de ella, y la trata como un cabron. ––di tres golpes con fuerza––Y ahora el imbécil de Ryan, que se hace el buenito y se muere por ella.––di otros tres golpes––

––Lo que tienes que hacer es luchar por ella cómo un hombre, porque ella tiene derecho a estar con alguien más si tú no le das señales de que podáis estar juntos. ––dijo lanzando la bolsa contra la pared, y dejándome a mí perplejo.

––Lo mismo que tú con Nina, ¿no?

––¿La quieres perder? Hoy vendrá Ryan y no se irá con rodeos.

––Maldita sea ––espeté con enojo.

(...)

Joder. Justo hoy que ninguno de mis padres está delante, y ninguno de los dos tiene que fingir.

Justo hoy el estúpido de Ryan y ella están hablando súper animadamente.

Me hierve la sangre sólo de verlos tan cerca, ojalá pudiera hacer algo. Relame sus labios y muero por besarla y demostrarle a ese pedazo de gilipollas que es mía.

Llegamos a la casa del terror. Reí nada más escuchar su nombre. ¿Qué no tienen más inspiración?

Luna iba a mí lado, el estúpido de Ryan se escaqueo diciendo que tenía algo importante que hacer.

Un payaso apareció de repente, no me asusté pero me sorprendí. Pero lo que más me sorprendió, fué que Luna dió un salto y se agarró a mí.

Durante unos segundos el tiempo se detuvo, nos miramos a los ojos y parecía que ya nos podíamos decir todo. Ridículo, ¿no?

Lo sé, soy bipolar.

Luego subimos a la montaña rusa, ella gritaba de alegría. Y ver su jodida sonrisa tan perfecta y el sonido de su risa me producían algo dentro, una sensación increíble, e indiscutible.

Pero no quiero sentirme asi maldita sea.

Se suponía que todo esto era una mentira, ¿desde cuándo he dejado que los sentimientos interfirieran en esto?

Maldita sea, ¿en qué momento me enamoré de Luna Valente?