For The Last Time- [Lutteo]

6• «Nos vemos, mi niña.»

Luna.

Estaba caminando hacia casa, pero poco después de salir del instituto, me paré para llamar a Nina, y saber dónde estaba.

-Mierda Nina, ¿donde andas?-suspiré y sentí algo que chocó contra mí, y vi a una mujer de entre 30 y 40 años, pelo castaño, y ojos color miel, bastante mas alta que yo-

-Disculpame, iba distraída y no te vi.-me regaló una agradable sonrisa.-

-Oh, no, no se preocupe hablando de distraídas, yo en eso me llevó el premio.-las dos reímos- Soy Luna-sonreí tímidamente-

-Encantada Luna, soy Katherine.-sonrió dulcemente- pero no puedo permitir que te vayas así, ¿te parece si te invito a comer?

-No, no, disculpeme, pero no puedo aceptarlo.

-Vamos Luna, primero que todo, tuteame por favor, y segundo; fué mi culpa, dejame enmendar mi error, por favor, y no aceptó un no cómo respuesta.

-Esta bien...-sonreí rendida-

No quería aceptar, ya que no quiero que nadie gaste dinero en mí, por eso Nina no sabe nada sobre mi estado familiar, pero esa señora me generaba confianza, y la verdad, es que no sé por qué. Además, si no comía ya, las tripas me iban a rugir demasiado, ya que, llevaba casi una semana sin probar bocado.

Katherine pidió un plato de carne para ambas y una coca cola para beber, hacía mucho tiempo que no comía así.

-Bueno, cuentame Katherine, ¿qué te trae por aquí?-le sonreí y ella imitó mi gesto-

-Pues iba a venir a hablar con el director por mí hijo, ya que recibí una llamada suya, y de paso así lo buscaba para llevarlo a casa.

-¿En serio?, ¿y a qué instituto va?

-Va al Blake South College, ¿por qué?

-Qué coincidencia, porque yo voy a ese también, quizás lo conozco.

-Seguramente.-sonrió- hasta creo que va a tú clase.

-¿Sí?, ¿y cómo es el?

-Pues él es alto, delgado, de ojos cafés, igual a mí, cabello castaño y de rizos, y demasiado mujeriego para mí gusto.-suspiró y, por un momento, a mí cabeza le vino el nombre de el idiota de Matteo. Nah, qué tonta soy. Miren cómo es ella, y luego mirenlo a él. Es imposible que tengan la misma sangre.- Luna, Luna, ey, te quedaste-dijo riendo-

-Disculpa. -reí- ¿y cómo se llama?

-Pues el se llama M...-lo interrumpió una llamada en su celular- ¿Ben?, si, disculpa, tuve un percance -me sonrió- en 10 minutos estoy allá, si, claro que sí, adiós.-cuelga- Bueno Luna, encantada de conocerte, y mira, si me necesitas algún día, sólo llámame -me dió una tarjeta con su número de teléfono, y besó mi mejilla- Nos vemos mi niña, adiós. -me dijo "adiós" con la mano sonriendo.-

Sus mirada, su forma de hablar, su rostro, todo en ella me recordaba a alguien, pero ahora no caigo. Esa señora me hacía sentir que podía confiar en ella, y eso que la acabó de conocer. Es algo extraño, pero siento cómo si la conociera de toda la vida, raro, ¿no?. Nah, serán imaginaciones mías, a veces mi mente piensa demasiado.