El monstruo

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Bob Pataki le había preguntado a la resepcionista en que habitación se encontraba se ex yerno, a lo que está le respondió el número de habitación que era la 305 más tardo en decirle que en lo que ya estaba Bob Pataki en el elevador al llegar a la habitación solo se acercó a la puerta para escuchar, se hincó para tener un mejor sonido.

Del otro lado de la puerta fernanda discutía con Roger.

-Pues que es lo que piensas hacer? Roger estoy harta de tu misterio- gritaba fernanda ferozmente

- vas a ayudarme o que cariño, si no sólo toma a tu hija y vete...-Roger tenia un trago en la mano con la cual le acariciaba la cara a Fernanda en tono intimidate y prosiguió - pero déjame decirte algo preciosa después de Helga tu sigues- Roger simuló un arma con la mano del trago y se la apuntó en su cabeza mientras disparaba, -bum! Cariño-
Tomó su saco y se enfiló hacia la puerta.

Bob Pataki se quedó helado al escuchar eso, Helga corría peligro debía avisarle. Pero en eso se abrió la puerta de la habitación quedando expuesto.

- valla valla valla !!! Que tenemos aquí - dijo Roger.

Bob Pataki se estaba incorporando, pero más tardo en mover una pierna en lo que un puñetazo le aterrorizaba en el rostro noqueándololo y dejandolo inconsciente.

-Bienvenido a la fiesta suegrito-

Fernanda miro horrorizada y en ese instante supo en lo que se había metido.

Amordazó y amarró a Bob Pataki en un armario, sin que sus hijos se dieran cuenta.
Fernanda al ver todo empezó a temer por su vida y la de los niños había pensado que las amenazas de Roger serían solo palabras, pero tarde se dio cuenta que era totalmente en serio, que se encontraba en la cueva de un monstruo, se encerró en su cuarto con los niños esperando a que saliera a sus vigilancias nocturnas en la casa pataki para partir con La Niña pues por primera ves temía por su vida.

***

Era ya de noche cuando Helga seguía mirando por la ventana del comedor para ver si su papá regresaba ya habían pasado dos días desde su misteriosa desaparición aunados a los cuatro de sus hijos; Arnold y Helga estaban más que desesperados pues nadie sabía del paradero tanto de los niños como el de Bob

-Es que no entiendo adónde iría mi papá? Es mucho tiempo ya- se puso las manos en la cara pues no podía detener el llanto.

Arnold la abrazo para consolarla desde hacía cuatro noches la casa de Helga era su cuartel dormía en la sala para no dejarla sola. no podía permitirse que algo le pasara no lo soportaría el día del hospital fue horrible para el no quería que callera ahora por la falta de su padre.

-tranquila Helga verás que regresa pronto-
Helga se abrazó a Arnold.

Arnold la condujo a su habitación pues no quería que siguiera llorando la ayudo a acostarse y la arropo.

-quédate aquí conmigo esta noche almenos hasta que me duerma si- ella tampoco quería alejarse de él, porque en todo este infierno el era lo único bueno que tenía.

-lo haria Helga pero devo ir por los niños a casa de Gerald nose que es lo que hacen pero sea lo que sea espero los siga distrayendo de todo esto-

En eso sonó el teléfono y Olga contestó.

- Arnold-

grito Olga desde las escaleras. El volteo a ver a Helga la aropo y solo beso su frente -regresó enseguida veré quien es- bajo las escaleras pero los ojos de Olga lo enfocaron antes de que terminara de bajar más escalones.

- ok Taylor pero porque no ha avisaron temprano?- decía mientras se limpiaba el rostro pues también había estado llorando.

Del otro lado estaba Taylor rogándole a su madre.

-mama por favor solo avisa a la Tia helga y al profesor que estamos bien ok, que vamos a hacer una pijamada aquí en casa de los Johanssen-

-ok cariño cuídense te amo pastelito-

-ash!! si mamá si-

Arnold escucho la conversación y miro a Olga que también estaba hecha un paño de lágrimas. Ella lo miro y solo se sonrieron, Arnold volvió a regresar al cuarto, donde encontró a Helga parada en la ventana mirando hacia la oscura noche y entonando una canción de cuna para sus pequeños. Arnold la abrazó de espalda y ella soltó a llorar.

-no llores verás que están bien.... EL la abrazaba preguntándose si en realidad estaban bien- verás que están bien- decía mientras el también se cuestionaba si su pequeña y los niños de Helga estarian bien

Helga asintió y se recargo en Arnold mientras ambos miraban por la ventana.

-te quedas conmigo?.... por favor-

Arnold asintió volteando la vista hacia helga que seguía mirando hacia la nada por la ventana, la acompañó hasta la cama donde la volvió aropar para que pudiera dormir mientras el se hincaba a su lado sin soltar su mano quedándose dormidos los dos después de un rato.

Mientras Arnold dormía Empezó a soñar, en su sueño recordó el nacimiento de Helga su pequeña niña, lo rosado de sus mejillas su pelo que apenas si se miraba y sus pequeños ojos, sus manitas, lo delicado que se sentía su cuerpo, su pequeño cuerpecito, y entonces lo miro claro como el día, miro a fernanda tan real, mientras le entregaba a La Niña, tenia los ojos hinchados y le pedía perdón por todo lo mala que ella había sido, "le decía que mientras no tocaran el monstruo los niños estarían bien"  ella trataría de cuidarlos, pero tenían que apresurarse porque el monstruo asechaba."
despertó con un sobre salto, Helga seguía dormida sobre la cama, se levantó del suelo, algo mareado tratando de recordar su sueño, que quería decir ese sueño estaba seguro que algo andaba mal, que tenía que ver fernanda con los niños? perturbado por el sueño, bajo a la cocina aún con las luces apagadas, tomó un vaso de agua y al asomarse por la ventana, miro un hombre vestido con un traje negro, la luz de la luna dejó ver su rostro era Roger recargado en su Volvo negro, fumando, eso ocaciono que Arnold despertará bien, estaba apuntó de salir a enfrentarse con el cuando miró otra sombra en la obscuridad, Roger apagó su cigarrillo y corrió a abrazar a un pequeño Niño que cuando logró distinguir era Arnold.

-que?! - alcanzó a soltar

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⏰ Última actualización: Jan 15, 2022 ⏰

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