Me, myself and I ~VARCHIE~ (EN EDICIÓN)

Capítulo 14

Caminé hasta mi coche sin voltear
atrás. Tengo que aceptarlo, me moría
por saber sobre de lo que Nick quería
hablar conmigo, aunque era más que
obvio sobre qué quería "hablar". Pero
valdrá la pena quedarse con la duda. Ya llegará el día en que regrese rogándome que vuelva con él y para eso, archy me ayudará enormemente.

Me desperté ya con más ánimos, el
dolor en mis piernas ya no era tan
intenso como el de ayer, así que ahora
"Glamour ven a mi". Uno de mis
hermosos vestidos y mis preciados
tacones serian mi outfit de hoy. Deje mi cabello como siempre, suelto con sus comunes ondas.

Con suma seguridad caminaba por
los pasillos, atrayendo miradas al por
mayor. Adoraba tanto esto.

Localicé a Archie, sacaba libros de su taquilla. Debería ser ilegal llevar ese tipo de pantalones, debido a la masacre de hormonas que causaba en mi interior. Y si a eso le añadimos la camiseta gris que llevaba, creaba una revolución en mí.

- Y al final, ¿Que has decidido Archiekins? - le susurré en el oído por detrás, haciéndolo volter de golpe.

- Lo primero... aléjate - me hizo a un lado - Y segundo, ¿Por qué me llamas Archiekins? - preguntó sin entender.

- Porque me gusta, y por qué puedo - solté una carcajada.

- Mira - dijo con fastidio - Ya es lo
bastante difícil tener que soportarte,
así que trata de guardarte tus estúpidas bromas - cerró de un fuerte golpe su taquilla.

- Lo intentaré -le dije sonriente -¿Entonces? - Pregunté caminando
detrás de él con ligeros pasos - ¿Tú casa o mi casa?

- Tendrá que ser en la mía - dijo de
mala gana sin mirarme.

- Perfecto - canturreé y entré a la
siguiente clase.

***

Las clases pasaron muy rápido, como siempre Jug me ayudaba a distraerme y hacerme un poco más divertidas las horas de clase.

- ¿Enserio te llevará a su casa? - me preguntó Jughead.

- Si, solo para hacer la inútil guía de
física - le expliqué - El chico sigue
resistiéndose a mis encantos - ambos
reímos.

- Te lo dije - sonrió victorioso mejor que te rindas Ronnie.

- Mira Juggy... en cuanto menos te lo
esperes - lo señalé - Le tendré detrás de mi - reí.

Fui de las últimas en salir. Reuní
pacientemente todas mis cosas. La
verdad no tenía prisa alguna, además
con suerte conseguiría enfadar a Archie por llegar tarde.

Dejé la mayoría de mis libros en la taquilla, afortunadamente no había tantos deberes, solo unos cuantos
problemas de matemáticas y algunos
resúmenes. Caminaba hacia la salida
del edificio y no lograba ver a Archie.
Mas te vale no haberte ido Archie Andrews...

- Tú no te preocupes que tenemos
todo el día - una sarcástica voz me sacó de mis pensamientos.

- Te estaba buscando - le dije sonriente.

- Si, como sea - rodó los ojos y me indicó mientras se subía a su moto - sígueme - ¡Dios mío! lo que tiene
de amargado, lo tiene de sexy. Sacudí levemente mi cabeza, para salir de mis pensamientos.

- S..Si - contesté y caminé hacia mi coche, lancé mi mochila en el asiento
trasero. No fue muy largo el trayecto,
solo tenía algo de dificultad al tratar de seguir la alta velocidad de Archie.

De pronto Archie se subió a la acera del estacionando su moto ahí, aunque no parecía una casa, seguramente sería su trabajo. Me astacioné y bajé no muy segura.

- Espérame - me dijo antes de entrar
a una enorme tienda de música. De
todas formas entre detrás de él.

- ¡Archie! - un castaño detrás del
mostrador le saludó al mismo tiempo
que estrechaban fuertemente sus manos.

- ¡Wow! ¿Y tú eres? - rodeo a Archie acercándose hacia mí.

- Nadie, no es nadie - Archie lo tomó del cuello de la camiseta y lo llevo de vuelta al mostrador - Concéntrate en tu trabajo -le ordenó.

- ¡Archie! ¡Has venido! - una pelinegra que bajaba las escaleras con ambas manos ocupadas por dos cajas - Llamó Moose... - su mirada se quedó fija en mi, analizándome de pies a cabeza. Su pelo era castaño rizado, tenía la piel oscura, jeans desgastados, unas Adidas viejas y una camiseta azul, la cual parecía el uniforme de la tienda, por esas pintas no me extrañaría que esa chica fuera la... la novia de Archie.

- ¿Moose? - dijo con desespero - ¿Y que quería?

- Dijo que hoy no podría recoger a Maia (lo prometido es deuda) y tampoco a Cameron - dejó las cajas en el suelo.

- Pero... ¿por qué?- -el desespero,
aumentaba.

- Su coche... -dijo haciendo un gesto con sus manos como de explosión y
junto con el castaño rieron.

- No puede ser - dijo mirando el
reloj en su mano - Un día de estos me mata - dijo caminando rápidamente hacia la puerta - Espérame aquí - me indicó.

- Si, aquí espéralo - sonrió el castaño
cuyo nombre desconocía, mientras que era aniquilado con la mirada por la chica.

- Pero Archie... - hablé y regresó.

-No - tomó su pelo entre sus manos - No puedo ir en la moto a por ellos -regresó al mostrador - Déjame tu coche - le dijo al chico quien asintió con la cabeza y se agacho - Aquí tienes - saco sonriente un patinete.

- Chuck -le dijo fulminantemente.
Según lo que entendía la pelinegra
no era su novia, y la tal "Maia" era
muy importante, asi que seguramente
que ella si sería la...novia.

- Lo siento - sonrió - Archie, vine en esto...

- ¿Y tú Valerie? - se dirigió a la chica.

- Vine andando - sonriente subió los
hombros.

- ¿Por qué? ¡Siempre está lleno el parking por vuestros coches! - dijo
alterado y yo solo me limité a agitar las llaves de mi lujoso coche.

Se dio la vuelta para verme y le sonreí. Acortó nuestra distancia con
aproximadamente cinco pasos.

- Nunca te pediría algo a ti - susurró
en mi oído para después salir de la
tienda. ¿Le gustaba sufrir no? Salí
detrás de él, después de escuchar un
"Nos vemos" del tal Chuck.

- Sabes... - le dije por la espalda, gracias a la altura de los tacones, alcanzaba con precisión su oído - Hieres mis sentimientos - lo rodeé
poniéndome frente a él.

- ¿Enserio? - levantó una de sus
naturalmente bien definidas cejas.
Acortaba lentamente la distancia entre ambos. Mientras dejaba mis llaves en uno de los bolsillos de su chaqueta.

- No - solté una carcajada y me di la vuelta y caminé hacia mi coche. Solo que esta vez subí al lado del copiloto -Al parecer si aceptaste mi ayuda... -dije sonriente cuando Archie subió al coche.

- No, solo subí y cogí tu coche - aclaró.

- ¿Entonces esto viene siendo un robo? -pregunté mientras miraba su perfecto perfil.

- Exacto - afirmó.

- Y... ¿Quién es Maia? - me aventuré
preguntar.