CAPÍTULO II

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Me encontraba en el campo que estaba detras de la casa de mis abuelos, miraba a la nada, pensando en lo que aquellos chicos me dijeron, por mas que querí­a, mi mente no me podia traer el recuerdo de Jesús Omar y Carlos jugando conmigo cuando era niña, es inexplicable porque soy de las personas que se acuerdan de todo y todo. 

Mi vista se tornó oscura, es más que obvio, me habían tapado los ojos.

- Jesús Omar, no hagas eso por favor. 

- No soy ese tal Jesús Omar  -oh por Dios, es Logan, bueno, hay que aceptarlo, es mi crush. Pero no Hannah, Logan sólo te ve cómo una amiga, que no te importe todo lo que te han dicho tus primas, sólo sé tú misma. 

- Eh, hola Logan, por favor, ya quita tus manos de mi bello rostro —una pequeña risa se escuchó, ay, su sonrisa es perfecta. Pero me hizo caso. 

- ¿puedo sentarme? -preguntó; ahora que me doy cuenta, este chico si que tiene voz de hombre.-

- Claro que si -se sentó junto a mí­ -tiempo sin verte, has cambiado bastante.

- Pues para comenzar, hola a ti también, digo lo mismo, y si no me equivoco, han pasado creo que ¿dos años?, y si que has cambiado bastante. —cada vez que estaba junto a Logan, sentía un hormigueo en mi estómago y la piel se me erizaba

- Gracias, me alegro de verte...

- De nada, igual me alegro de verte, ¿Cuándo llegaste?

- Ayer, ¿y tú? 

- Hace una semana. 

- Oh que bien, es bueno darse un respiro de lo cotidiano.

- La verdad, sí, y ¿estudiarás en la ciudad?

- Pues creo que ya sabes, pero me mudé aquí y sí­, estudiaré en la ciudad, de hecho quedé en el turno matutino. —ay Dios, ya no puedo seguir así­, tengo que expresarle mis sentimientos a como dé lugar, aunque obviamente sé que la respuesta es un rotundo no. 

- Me alegro mucho Hannah, de hecho yo también estudiaré en la misma preparatoria, quedé en la mañana por cierto y ojalá que quedemos en el mismo salón —me miró con su perfecta sonrisa que cada vez que la veo hace me enamore más y más de él. 

- ¿en serio? ¡felicidades! Espero de la misma manera que quedemos en el mismo salón... Emm, Logan...

- ¿sí Hannah?

- Iré directamente al punto. Toda mi vida, o bueno, desde que tengo memoria, por alguna razón me enamoré de ti. No te he podido decir esto desde antes porque no tenía la fuerza necesaria y la segunda porque te gustaba mi prima Clara, eras su novio y luego, antes de que me fuera, te ayudé con Melisa, no sé si aún andan pero no te digo esto para que me des una oportunidad, te digo esto porque quiero y aunque sé que sólo me ves como una amiga, no quiero que nuestra linda amistad se vea corrompida por unos sentimientos tontos. —terminé de decir, tomando una gran bocanada de aire hundiendo mi cara en el espacio que habí­a entre mis piernas. 

- Hannah, te seré franco, no te niego que anduve con Clara, pero sólo fue un amor platónico, Melisa, jamás anduve con ella y pues ahora me doy cuenta de que tengo a una persona que no vale la pena, sino la vida entera, Hannah, si tú me lo permites, quiero intentar algo serio contigo, obviamente todo a su debido tiempo, ¿qué dices? —la respuesta de Logan me sorprendió mucho, espero y esto no sea mentira.

- Claro que sí­ Logan -nos paramos, y nos abrazamos mientras me giraba en el aire, y como fondo, el bello atardecer.




HANNAHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora