Capítulo 6 La Disculpa

478 37 0
                                    

Por: mel_katina

El tan temido domingo llegó y Yulia se estaba arreglando. Se puso unos jeans rotos, una blusa negra de tirantes (no se puso nada debajo de ella) y se puso un paliacate en la cabeza para no tener que peinarse. Se maquilló sólo un poco, más bien, solo se delineó los ojos y se puso un poco de brillo en los labios. Se puso su arete en el ombligo y unas pantuflas azules de conejito que usaba para andar en la casa. Larissa por su parte estaba lo mejor vestida posible, sin ser elegante, y estaba preparando la comida. A las 3 en punto tocaron el timbre. Eran ellos.

-Yulia, ve abrir la puerta- Dijo Larissa emocionada mientras ponía la mesa
-Si ma- Dijo Yulia, quien estaba viendo la tele en la sala. Se puso sus pantuflas y, con desgana, abrió...

* Sergey se encontraba allí, con un paquete de chocolates y unas rosas en la mano. Estaba muy sonriente y a Yulia le causo gracia porque parecía un niño esperando a que le abrieran los regalos de Navidad.

-Hola, ¿qué tal?- Dijo Yulia tratando de ser amable -Buenas tardes
-Hola Yulia, ¿cómo estás?- Dijo Sergey amablemente y le extendió la caja de chocolates -Toma, son para ti
-Muchas gracias señor y disculpe… tengo que hablar un momento con usted- Dijo Yulia tomando la caja de chocolates. Cuando Sergey pasó, Yulia no vio a Lena por ningún lugar -¿No lo acompaña Lena?
-Si, pero se quedó en el auto hablando por teléfono, no tarda- Dijo Sergey sonriendo aún
-Ah ok- Dijo Yulia -Entonces dejaré la puerta abierta. La morena miró a Sergey un momento y abrió la boca para hablar, cuando su madre irrumpió en la estancia.
-¡Amor!- Dijo mientras se acercaba a el.

El calor volvió a la cara de Yulia cuando estos dos se dieron un tierno beso, muy sonrientes y se abrazaron. La ojiazul se volteó hacia la puerta y su madre habló.

-¿No vino Elena?
-Si, ella está en el auto, ¿por qué no la vas a buscar Yulia?- Dijo Sergey sonriendo gentilmente. Yulia asintió con la cabeza. El señor Katin no era malo, de hecho le caía bien, pero su hija…

Salió de la casa y sintió frío, pero le daba flojera ponerse un abrigo, así que caminó hacia el auto de los Katin. “Menos mal que no tengo blusa blanca, si no… se notaría que tengo frío…” pensó Yulia sonriendo mientras se cruzaba de brazos para conservar el calor.

Llegó al auto y tocó en la ventana trasera. Inmediatamente se bajó el vidrio, dejando ver a Lena, quien estaba peinada con dos trenzas.

-Volkova, ¿qué haces?
-Tu papá me dijo que viniera por ti- Respondió Yulia
-Tienes frío, entra- Dijo Lena mientras abría la puerta
-No, no tengo- Dijo Yulia haciéndose la fuerte. No iba a mostrar debilidad frente a Lena.
-Si, si tienes- Dijo Lena mientras abría la puerta -Se nota…- Apenas terminó la palabra dicha por la pelirroja, Yulia se sonrojó sin proponérselo.
-¿Se me nota? ¿Qué? ¿Cómo?- Preguntó Yulia aun sin entrar al auto
-Estás erizada, se ve en tus brazos- Dijo Lena y se sonrojó también porque había dado a entender otra cosa -Bueno, ¿vas a entrar o qué? Te juro que no te voy a comer
-Si, esta bien- Dijo Yulia. Entró al auto y cerró la puerta.

Miró a Lena y vio que estaba vestida con un pantalón negro, una blusa blanca y una chamarra rosa. Olía muy bien dentro del auto, a perfume… ¿sería el de Lena? En fin, Yulia no quiso seguir divagando y miró por la ventana.

-¿Mejor?- Le preguntó Lena
-Aja…- Dijo Yulia mirando a la ventana. Mentira, todavía sentía mucho frío.
-Ahora vamos a la casa, solo deja que termine de enviar este mensaje a Tiff y ya- Dijo Lena mientras se concentraba en su celular
-Si…- Dijo Yulia sin voltear a verla

Lena estaba escribiendo su mensaje y notó que Yulia estaba temblando un poco. Se preocupó… no sabía por qué, pero sentía pena por Yulia (de buena manera) y sentía ganas de ayudarle. “Espera Lena, es Yulia Volkova, la machorra que le habló mal a tu padre…” dijo una voz en su interior y otra contestó… “Ya, pero es un ser humano y tiene frío… Lena ¡Ayúdale!”

-Hey- Dijo para llamar su atención, por lo que Yulia volteó a verla. “Ay, esos ojos de nuevo…” pensaba Lena al ver la penetrante mirada de la morena -¿Te sientes bien?
-Si, estoy bien- Respondió Yulia… “Demonios Yulia, eres muy obvia. Pero… ¡Hace un frío endemoniado! Eso me pasa por floja, ¿qué digo? Le voy a decir que no tengo frío…” -No tengo frío, no señor… ¡Nada de frío!
-Ah, de acuerdo…- Dijo Lena… “¡Que obvia es! ¡Y que orgullosa! No le cuesta nada decirme la verdad, pero vamos, soy una completa extraña para ella…”

Yulia se encontraba viendo la ventana, hacia su casa...realmente estaba pensando en cuando terminaría de escribir ese mensaje la pelirroja. ¡Va, nadie podía ser tan lento! Ni Larissa era tan lenta escribiendo un mensaje.

Lena no estaba escribiendo el mensaje ya. De hecho, ya lo había mandado. Sólo estaba haciéndose la misma en el celular porque tenía el pendiente de que Yulia saliera al frío sin nada más que un pantalón y una blusa de tirantes. De por si estaba temblando…

Yulia estaba sumergida en sus pensamientos, cuando de repente sintió calor en sus hombros y cuando abrió los ojos (los tenía cerrados) notó que tenía una chamarra rosa sobrepuesta. Olía tan bien, esa chamarra… y era tan caliente… Miró de nuevo a Lena, quien la miraba. La blusa que tenía debajo de la chamarra era de manga larga.

-No te vayas a congelar, ¿con quién voy a pelear entonces?- Dijo Lena y sonrió.

En ese momento Yulia lo supo… ¡Peligro! Elena Katina era un peligro para ella. Se estaba sintiendo… algo extraño, muy profundo...no podía explicarlo. “Me sonrió ¡Me sonrió!” pensaba Yulia emocionada… “¿Por qué demonios estoy emocionada? Me siento nerviosa, demonios… ya, vámonos a la casa…”

-Este… gracias- Dijo Yulia viendo sus pantuflas.
-De nada, ¿ya vamos a la casa?- Dijo Lena viendo sus pantuflas también. “Son de conejito, nunca me lo imaginé de Yulia…”
-Si, vamos- Dijo Yulia bajando del auto, mientras sujetaba la chamarra de Lena, para que no se le fuera a caer. Al llegar dentro de la casa, los padres de ambas chicas se encontraban conversando y sonrieron al verlas entrar juntas.

-Hola Elena- Dijo Larissa mientras le daba un beso a Lena en la mejilla
-Hola, me puede decir Lena si lo prefiere- Dijo la pelirroja
-Y tu me puedes tutear- Dijo Larissa sonriendo y miró a Yulia -¿Y esa chamarra Yuli? No te la conocía…
-Este…- Dijo Yulia mirando la chamarra -Es de Lena, me la prestó un momento porque hacia frío
-Que gentil- Dijo Larissa sonriéndole a la pelirroja mientras ella le contestaba la sonrisa. Yulia se quitó la chamarra y la puso en el perchero.

* Lena siguió a su padre y a Larissa hacia el comedor, mientras que Yulia se metió al baño. Apenas entró se mojó la cara y un poco el pelo.

-¿Qué es eso Yulia? ¿por qué demonios estoy sintiendo esto?- Dijo susurrando mientras se veía en el espejo, Yulia -Lena no es tan mala persona como pensé, es solo que… cuando está con sus amigas se le sube la fama… que raro…

* Lena estaba sentada junto a su padre y conversaba con ambos adultos.

-Oye Lena, tu padre me ha dicho que eres muy buena estudiante- Dijo Larissa mirando a la pelirroja
-Bueno… tengo promedio de 95, así que supongo que puedes considerar eso…- Dijo Lena apenada
-No seas tan modesta, mira… podías ayudarle a Yuli, ella tiene promedio de 75- Dijo Larissa bromeando y en eso entró Yulia a la habitación.
-En realidad mamá, tengo 76 de promedio, no 75- Dijo sonriendo la morena y tomó asiento a un lado de su mamá

* Los cuatro rieron y Yulia miró a Sergey.
-Quiero decir algo- Dijo Yulia y se paró de nuevo y se dirigió a Sergey -Señor Katin, quiero pedirle una disculpa por lo que pasó la noche del jueves, pero es que no me sentía bien…

-No te preocupes Yulia, te comprendo- Dijo Sergey sonriendo -Acepto tus disculpas…- Yulia si se sentía mal por haber actuado así con Sergey, de verdad… y lo que había dicho era de verdad, no una farsa.
-Gracias- Dijo Yulia y sonrió de nuevo, antes de sentarse…

* “¿Realmente Yulia es así de risueña fuera de la escuela? Siempre que la veo está seria o ríe pero cuando hizo una maldad… tiene una linda sonrisa…” pensó Lena y sin quererlo ya se estaba sonrojando…

¿Cómo Llegamos Tan Lejos? (t.A.T.u. Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora