Capítulo Veintinueve

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Las motos se alejaron de nosotros. Pudimos descansar un poco antes de seguir,Sam ya estaba mejor pero aún así se veía débil.

Yo pensaba en un plan,la cabaña de los forestales no estaba ya muy lejos,pero debíamos cuidarnos de esos tipos o nos atraparían de nuevo.

Ví que Sam se incorporó y se dirigió a la salida de la casita.

—Oye,¿Qué haces?.— Pregunté.

—Debemos irnos,esos hombres se acercan más y más a nosotros,no falta mucho para llegar a la cascada Yomotsu,tenemos que avanzar.— Contesto ella.

—No,vas a descansar y nos iremos esta noche,en la noche será más seguro...— Dije.

—Koga.— Me llamó.— No hay tiempo... Vámonos.

Y a como pudo se resbaló por esa resbaladilla y se puso de pie,yo salí de la casita de juegos y me dirigí a ella para ayudarla a caminar, aún sostenía su pecho.

—¿Estás bien?.— Pregunté sosteniendola de los brazos.

—Si, vámonos...

Y así lo hicimos,nos alejamos de la casita de juegos y comenzamos de nuevo a seguir el río Yomotsu,hasta dónde yo sé,tenemos que encontrar un área de descanso con mesas,pasando eso la cascada estará a unos metros y debajo de esta veremos la cabaña de la policía forestal del parque.

Pero por más que caminábamos no encontrábamos esa dichosa área,solo habían árboles y más árboles,entonces el río se desvió,teníamos que cruzarlo pero sin embargo por las recientes lluvias tenía algo de agua y la corriente estaba rápida,ví que habían rocas en el suelo del río,podíamos pasar por ahí.

Sam miró el río,después se apartó de mí y camino hasta la orilla del río y cuándo estaba apunto de si quiera cruzarlo, está cayó al suelo débil. Corrí a ella.

—¡Sam!.— Exclamé a su lado.— ¿Que te sucede,estás bien?.

Ella tenía una mirada baja y estaba algo pálida,después asintió. Mire su hombro y no paraba de sangrar,ya había desangrado bastante,es por eso que estaba débil,sin mencionar su problema con su corazón y pulmones,esos ataques.

—Tengo que llevarte a la cabaña,tienen que atenderte.— Murmuré rompiendo una parte de mi playera y cambiandole la que ya tenía puesta.— O si no vas a desmayarte...

—Estoy bien,he pasado por peores cosas.— Después comenzó a reírse,cosa que me desconcertó.— Mi organismo siempre ha sido una molestia para mí,no pude a ver tenido uno más débil que esté...

La ayude a ponerse de pie.

—Eres fuerte y no dudo de eso Sam.— Dije sonriendo.— No eres débil,y eso me ha quedado claro,así que tranquila... Te prometo que te voy a poner a salvó.

Ella sonrió.

—Te lo agradezco...

Miré el río y estaba pensando en cómo ayudar a Sam a cruzar. Hasta que se me ocurrió algo.

—Pasaremos los dos juntos,sujetate de mí.— Le dije.

Ella asintió y se sujetó bien de mi brazo. Con lentitud pase la primera roca y después la ayude a ella,pasamos las siguientes y no tuvimos problema alguno,hasta que al momento de ayudarla a cruzar la penúltima piedra ella resbaló,pero logré sujetarla de su cintura y la pegué hacia mí para que no cayera.

Nuestros rostros estaban a centímetros,Sam me miraba fijamente,yo no podía ni moverme. Estaba muy nervioso.

—Gracias... Koga...— Murmuró.

Sacudí mi cabeza apenado y asentí.

—No hay de qué.— Respondí nervioso.

Cruzamos el río y ella ya estaba un poco mejor,aún seguía algo sonrojado por lo que pasó,pero es que me sentí tan nervioso cuándo la ví tan cerca de mí,¿Por qué mi corazón latía tan rápido?, Esto nunca me había pasado.

Caminamos en silencio por unas horas más hasta que logramos ver la cascada Yomotsu,y a unos metros a unos policías charlando entre ellos.

Sam me sostuvo de mi antebrazo mirando a la dirección de los polícias.

—Koga...

—Están ahí... Vamos.— Dije tomándola de la mano y comenzando a correr hacia los policías. —¡Hey!.

—¡Aquí,oigan!.— Grito Sam alzando la mano.

Los policías miraron a nosotros y se nos quedaron viendo extrañados.

—¡Necesitando ayuda por favor!.— Grito Sam.

—¡Soy Koga Kido y ella es Samantha Uley!.— Grité.

Fue el modo en que corrieron a nosotros y al estar frente a frente nos miraron.

—Se trata del chico del orfanato,el hijo adoptivo de Saori Kido.— Hablo uno de ellos.— Los desaparecidos...

—Llamen a la policía central y a una ambulancia,no se ven nada bien.— Dijo otro regresando a la cabaña.

Sam y yo soltamos unos suspiros aliviados.

—¿Que hacían aquí,que les pasó?.—Pregunto el policía.

—Nos secuestraron,unos hombres a más de dos días de aquí,dentro de la reserva.— Expliqué.

—Así que era verdad lo que dijieron en las noticias.—Dijo otro de ellos de cabello castaño.

—Claramente sí.— Hablo Sam.— Nos tenían en la cabaña abandonada,casi al terminar la reserva... Nosotros...

En eso Sam cayó al suelo pero logré sujetarla,la recosté en mi pecho y me arrodillé frente a ella.

—Sam,oye,Sam.— Le hablaba.— Sam,¿Estás bien?,¡Sam!.

Pero ella no respondía,estaba cerrando sus ojos.

—Tiene una herida en su hombro,¿Que les pasó?.— Pregunto el policía verificando a Sam.

—Nos dispararon pero una de las balas le rozó el hombro,no le ha parado de sangrar desde entonces.— Expliqué.

—Puede tener graves consecuencias si no es atendida,Mike.— Hablo el policía de cabellos castaños.— Corre y pide que la ambulancia llegue pronto.

—¡Claro!.— Y el tal Mike corrió a la cabaña.

—Tranquilos, serán evaluados en el hospital y después tendrán que declarar... Que suerte que lograron llegar hasta aquí.— Me dijo el policía.

—Si,pero esos tipos nos están buscando,no deben estar muy lejos de aquí.— Dije yo.

—Ahora iremos en su búsqueda,¿Vieron su físico?,¿Algún tatuaje o como vestían?.— Me pregunto.

—Solo que uno de ellos era alto y delgado,tenía cabello negro con sus puntas rojas,y llevan máscaras blancas o algo así.— Contesté.

—Bien,su aparición explica lo de la fundación y su petición de cerrar la reserva por el día de hoy.— Dijo el policía.

—¿La fundación Gradd?.—Pregunte mirandolo.

—Así es,todo parecía indicar que citaron a unas personas de la fundación a dejar aquí un dinero a cambio de su libertad,pero se han escapado así que tenemos que informarle a la fundación y comenzar a realizar la búsqueda y captura de sus secuestradores.— Explicó.— Bien,ahora llevaré a tu amiga al interior de la cabaña, ahí hablaremos a la fundación y procederemos a llevar a tu amiga al hospital.

Asentí,el policía cargo a Sam y nos dirigimos a la cabaña. Al entrar suspiro cansado.

Todo terminó... O al menos por ahora.

NORMAL LIFE [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora