NORMAL LIFE [EN EDICIÓN]

Capítulo Treinta y cuatro

Al día siguiente me habían dado de alta,Sam se quedaría unos días más hasta que los doctores estuviesen seguros de que estaba a salvó.

Obvio que al siquiera salir de él hospital estaban muchos reporteros y sujetos con cámaras tomando fotografías.

Me subieron a un auto color negro que supuestamente me llevaría al orfanato,los camarógrafos graban absolutamente todo lo que hacía tanto como yo, como los demás alrededor de mí.

--¡Por favor,solo una pregunta!.-- Pidió un reportero.

--El joven es menor de edad,no puede dar ningún tipo de declaración.-- Dijo mi chófer que inmediatamente se subió al auto.

Arrancó el auto pero al siquiera movernos escuché como gritaban mi nombre con euforia.

--¡Koga!.-- Mire por la ventana.-- ¡Koga!.

--¡Koga no!.-- Ví a Seiya correr junto a Saori.--¡Detengan ese auto!.

--¡Saori,Seiya!.-- Grité con mis manos en la ventana del auto.-- ¡Saori!.

--¡Koga!.

El chófer arrancó el auto y comenzó a andar en su curso con rapidez.

--¡No,oye!.--Grité.--¡Detén el auto!.

--Tú no me das órdenes niño,ahora cállate y abrocha tu cinturón.

Piso el acelerador y por el movimiento me estampe en la parte de atrás del auto,me queje y me puse en cinturón,mire por la ventana y ví a Saori de pie junto a Seiya observando cómo me alejaba para después ser rodeados por los reporteros.

Suspiré frustrado,¿Por qué no me dejan ver a Saori?.

Fue mi culpa,si no hubiese salido huyendo aquel día y los hubiera escuchado,quizás las cosas sean distintas ahora.

--Tranquilo... Todo estará bien.

La voz de Aria.

Suspiré.

--Siempre me dices eso.-- Murmuré enfadado.-- Desde siempre me has dicho que todo va a mejorar. No te creo.

--Hazlo.-- Estaba sentada a lado de mí,tenía un vestido blanco.-- Créeme,es la verdad...

--No, tú no existes...-- Dije firme.-- No estás aquí realmente, tú... Estás muerta.

Ella solo tomo mi mano y juró,por mi vida,que la sentí real. Levanté la mirada y la observé,ella sonreía.

--¿Por qué no me dejas en paz?.-- Pregunté mirándola.-- ¿Por qué no descansas como debes?, ¿Por qué sigues en este mundo?.

Aria solo me miraba.

--Por qué tengo una promesa que cumplir...

--¿Y eso que?.-- Aparte su mano de mi tacto.-- Yo no tengo nada que ver,¿Que no se supone que en el otro mundo solo es para descansar en paz?, Olvídate de mí,solo... Desaparece.

Cerré mis ojos con fuerza,lágrimas salían y cuando volví a abrir los ojos,Aria ya no estaba.

Mire por la ventana y ví como el chófer estacionaba en auto en el orfanato de Miho,me limpie las lágrimas y abrí la puerta.

En cuánto puse un pie fuera,el chófer me detuvo;

--Oye tú.

Me giré a verle.

--No podrás salir de aquí,pero eso no quiere decir que estarás incomunicado.-- Dijo para después extenderme una caja negra.

--¿Que es eso?.