el amor no entiende de enemigos.

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Kiri

Me vi en lo que parecía ser un campo de batalla, creo que puedo reconocer el lugar del reino en el que estoy pero solo tengo a una persona en frente y ese en Hiro.
Parecia algunos años mayor que ahora y yo caminaba hacia él que tenia su espada transformada, al ver hacia mi derecha hay un persona a mi lado, un chico de ojos negros que me transmitian un poco de miedo, éste me dijo con mucha seguridad -majestad, usted sabe lo qie debe hacer- en ese momento ya no podia controlar mi cuerpo, se movio solo (parecia ser llevado por el deber, eso es lo que sentia) esta batalla parecia ser a muerte, nuestras espadas cruzaban con mucho poder.
La batalla parecia ser eterna pero terminó en el momento que la espada de Hiro volo por los aires y pronuncie -yo gane mi amor, perdon- nuestras miradas se cruzaron y la mirada de Hiro me transmitió aceptación y en ese momento la espada del rey, que estaba en mi mano derecha, lo atraveso por el vientre y él me beso.
Nuestro beso termino cuando su cuerpo cayo al suelo y como acto seguido atravese mi propio vientre con esa espada.

Abrí los ojos y en ese momento Hiro estaba en mis piernas, estabamos debajo de un arbol y su cara estaba empapada en lagrimas.
Él se acerco a mi y dijo -no se quien sos, seguramente seas mi enemiga, pero mis sentimientos me torturan, no quiero que te pase nada- acaricio mi cara con su calida mano y sus labios se unieron a los mios, casi de forma inmediata mi cara se empapo en lagrimas, entre lagrimas nuestro beso continuó, y fue transformándose en caricias, sus manos recorrian mi cuerpo como si se hubieran preparado para esto por siempre.

Hiro

Esa visión me habia angustiado, durante esa batalla Kiri tenia el pelo negro y ambos ojos celestes, pero no habia duda de que era ella, yo tambien intente matarla pero gano en buena ley, el ambiente era de deber, pero al abrir los ojos y ver a esa dama de pelo plateado la bese y ahora esos besos eran caricias, ambos estabamos tristes, creo que estamos casi seguros de que en realidad somos enemigos, pero nuestros sentimientos no nos dejaban serlo.
Sus nuestras manos y nuestros cuerpos parecia como si hubieran sido creados para el otro, ambos teniamos la piel erizada, era una sensación indescriptible.

Kiri

Nuestras pieles erizadas no dejaban de acariciarse, nuestras manos nos recorrieron hasta que nuestros cuerpos sin ropa se unieron.
Definitivamente esto es magia, no habia explicación para estos sentimientos, pero creo que puedo llamarlo felicidad.
Me acoste en su pecho desnudo apenas tapada con mi capa negra, era muy feliz en ese momento.

Hiro.

El cuerpo de Kiri sin ropa es lo mas lindo que vi en mi vida y al verla en mi pecho por primera vez en mi vida fui feliz, no habia sensación parecida.
Creo que esto es amor.

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Fui muy feliz escribiendo este capitulo, acepto cualquier critica constructiva, me fue muy difícil escribirlo

Los Herederos Del PecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora